Dr. Gonzalo Ruiz Manrique de Lara

Fobias

Las fobias se definen como un miedo exagerado e irracional ante algo que no debería producirlo. Entre las más frecuentes encontramos la fobia a determinados animales, a conducir, a usar el transporte público, a volar, a la sangre y a hablar en público. Las fobias pueden tratarse hasta desaparecer siendo el tratamiento más eficaz la combinación de psicoterapia conductual con apoyo farmacológico específico.

Depresión grave

La depresión es un estado caracterizado por animo bajo, falta de energía y de ilusión por las cosas acompañados de ansiedad y alteraciones del apetito y el sueño así como sentimientos de culpa o desesperanza. Desde mi experiencia considero un doble componente en su origen: - Un componente orgánico, debido a la alteración de neurotransmisores cerebrales. - Un componente psicológico, debido a las reacciones personales antes diferentes sucesos de la vida. Por ello considero que el tratamiento óptimo para la depresión debe considerar ambos aspectos valorando el tratamiento conjunto con fármacos y psicoterapia de forma individualizada a cada caso.

Psicoterapia individual

La psicoterapia consiste en el tratamiento de las enfermedades mentales a través del diálogo. Existen diferentes tipos de terapia que parten de diferentes maneras de entender la enfermedad (terapia cognitiva, conductual, sistémica, psicoanálisis...). La terapia integradora consiste en tomar de cada modelo las herramientas más útiles para cada caso concreto entendiendo que un solo modelo puede no ser suficiente o adecuado para todas las situaciones.

Depresión asociada a fibromialgia y fatiga crónica

Tanto la fibromialgia como la la fatiga crónica son enfermedades complejas, poco comprendidas en la medicina actual. En ambas son de especial relevancia los componentes físicos (procesos inflamatorios y reacciones inmunológicas) como los psíquicos (afectación del estado de ánimo, ansiedad, vivencia del dolor...). Estas enfermedades se benefician no solo del tratamiento para el dolor, sino que la adecuada atención a los procesos mentales y psicológicos (tanto con farmacología como con psicoterapia) así como el desarrollo de hábitos y estilos de vida saludable (tipos de alimentación, complementos nutricionales, higiene del sueño...) pueden ser muy beneficiosos.

Ataques de pánico

Los ataques de pánico son crisis bruscas y repentinas de ansiedad intensa. Pueden incluir temblor, rigidez, palpitaciones, dificultad para respirar y en los casos extremos de sensación de descontrol y desrealización. Pueden tener desencadenantes concretos o presentarse espontáneamente. Se trata de un trastorno que puede resultar muy limitante para la vida diaria pero que con el tratamiento adecuado (farmacológico o terapéutico según el caso) se resuelve sin secuelas.