Dr. Maciej Julián Brandt

Desde el primer momento ha hecho que sientamos que vamos a conseguir nuestro sueño de ser padres. Resuelve todas tus dudas y transmite una tranquilidad increíble, haciendote creer que verdaderamente estando en sus manos estás en el sitio correcto. Después de pasar por bastantes consultas y ginecólogos en otros centros, es el único que siento que nos ha escuchado en nuestras preocupaciones y les esta dando la importancia necesaria para que todo marche bien. Estamos muy agradecidos de poder contar con él en este camino duro pero más llevadero con el trato recibido.

Tras 6 años buscando nuestro bebé y tras someternos a 4 tratamientos de fiv en la seguridad social sin éxito, lo conseguimos a la primera con el Dr. Brandt e incluso tenemos varios congelados para futuro. Ya lo diferencia de otros, que en la primera consulta se quede explicándote todo el protocolo con total detalle, hasta pasadas las diez de la noche sin saber si finalmente lo harás con ellos. Esos detalles son los que marcan la diferencia. Mil gracias a él, a Nuria y todo su equipo.

Matias fue nuestro doctor en la mayoría de las visitas. Se preocupó muchísimo por mejorar las opciones de éxito en la inseminación, en nuestro llevó a una histeroscopia que resultó ser muy importante para el siguiente intento, que fue positivo. Tuvo un trato muy cercano y amable, facilitándonos toda la información y haciendo todo lo que estaba en su mano para ayudarnos. Lo recomendaríamos a cualquier pareja o madre soltera que quiera realizar este proceso.

Gracias al doctor Brandt hoy tenemos a nuestra pequeña princesa.
Nos explico todo el tratamiento con una paciencia y profesionalidad infinita.
Esto fue una ayuda fundamental para empezar el tratamiento ya que teníamos muchas dudas y mucha ansiedad por no conseguir el embarazo de forma natural.

Lo mejor:
Siempre cercano y con una gran sonrisa pese a lo duro que es todo este tratamiento, lo que ayuda a que el proceso sea más fácil.
Destacar su gran profesionalidad por encima de todo.

Podría mejorar:
Nada.