Estamos en trámites de separación con una niña de por medio. Queremos llegar a una custodia compartida

Cada caso es absolutamente diferente, influye también la evaluación de peritos psicólogos y la apreciación del juez de estas recomendaciones.
Es fundamental que el ambiente habitual de la niña se altere lo menos posible, que sus relaciones con las familias de ambos progenitores, el colegio, las amistades, se mantengan sin sufrir cambios y que sean lo más amplias posibles y se faciliten todo lo que sea necesario.
El cambiar de casa cada dos o tres días parece una alteración excesiva para crear un ambiente estable en el desarrollo de la niña, pero depende de como sean vuestras relaciones postruptura, de la cercanía de ambas casas y de los factores antes mencionados que no se vean alterados de manera significativa.
Así aunque todo apunta a que esto puede ser algo disruptivo, puede conseguirse si los dos progenitores colaboráis estrechamente en beneficio de que todo el contexto de vuestra hija sea el más estable y satisfactorio posible dadas las circunstancias.

Los niños necesitan un ambiente estable para desenvolverse, así interiorizan la seguridad y la confianza, lo que luego les va a ayudar mucho en sus vidas.
Si habéis optado por la custodia compartida procurad que el ambiente de la niña cambie lo menos posible. Así que si hay que elegir entre semanas o días en una casa, mejor semanas enteras.
Mucha suerte.

Lo importante es mantener un ambiente lo más estable para la niña. Lo ideal sería por semanas, pero a veces no es fácil compaginarlo con los trabajos actuales. Estableced un acuerdo entre ambos y después transmitidselo a ella para que sepa en qué casa va a estar cada día y con qué progenitor.

Más importante que la estabilidad en el lugar, es que la niña vea una coherencia y consistencia entre sus hábitos actuales y los futuros, si por necesidades del trabajo hay que seguir ese ritmo, la niña se adaptara, debéis mantener entre vosotros buena comunicación y el objetivo de su bienestar por encima de todo, si ella ve a sus padres felices y con buena relación entre ellos, ella estará bien, sin importar tanto el donde

Sería importante valorar la edad de la niña y qué le supone la alternancia de domicilios, desde acudir a extraescolares, amigos en el barrio, adecuación de ambas viviendas...Si es muy pequeña (menor 5 años), incluso una semana entera sin compartir espacios con el otro progenitor puede resultar desaconsejable.
Ya que estaís dispuestos a intentar llegar a un acuerdo, acudid a un Equipo de Mediación Familiar, en muchos lugares son gratuitos y os asesoraran individualmente en función de todas las variables particulares y pequeños detalles de vuestro día a día, con el bienestar del menor como prioridad suprema

La custodia compartida, permite que los hijos puedan disfrutar del padre y de la madre de forma equitativa, para ello siempre se requieren ciertas condiciones: proximidad geográfica, buena relación entre los padres una comunicación abierta y una capacidad horaria para hacerse cargo de las rutinas de los hijos. Otra consideración, que también deberéis tener en cuenta es la edad del hijo en común y su madurez para poder acordar una custodia compartida.

Como dicen mis cimpañeros, las claves son estabilidad, coherencia y unidad de criterios en bien de la niña.