Tengo un hijo de 5 años y estamos pendientes de que se pueda palpar el quiste del conducto tirogloso

Se trata de una patología benigna. Tanquilícese. Como cualquier quiste puede crecer más o menos deprisa, aunque es excepcional su reabsorción espontánea. Lo más probable es que se haya "escondido" entre estructuras vecinas, pero en cualquier momento volverá a llenarse de moco y crecer y hacerse visible, momento en que su cirujano pediátrico podrá extirparlo sin problemas.
Pero tal vez el diagnóstico no era correcto y se trata de una adenopatía y se ha desinflamado. Debe ser controlado por un cirujano infantil.

Únicamente añadir que si fuera un quiste tirogloso, le reaparecerá y debe entonces operarse con carácter preferente, antes de que se le infecte, porque son estructuras embriológicas ectópicas que precisan resecarse en su integridad, y no desaparecen por sí mismas.

Respecto a la posibilidad real de que no fuere un quiste tirogloso, no debe desecharse, y debe contactar Vd. con su cirujano pediátrico para revisiones clínicas periódicas de su hijo, quien, en su caso, le realizará las pruebas de imagen precisas para apurar su diagnóstico.

El quiste tirogloso es una patología que se forma sobre la persistencia de una comunicación entre la lengua y la glándula tiroides, y que generalmente desaparece antes de que nazcamos.
Suele diagnosticarse cuando se inflama o infecta, por lo que notamos un bulto en la parte central y alta del cuello que se pone rojo, caliente y duele. En estos casos debe tratarse con antibiótico y una vez que pase la inflamación intervenirlo.
Por otro lado su diagnóstico no implica siempre el tener que operarlo, es más, como en su caso, si no se palpa es más difícil su intervención y también tiene sus riesgos.