Dra. Aina Vila

Ni dos segundos se tomó para revisarme.no me permitió mostrarle ni lesión ni lunares, dijo que no hacia falta que ELLA era la médica, cuando le comenté ,algo que ella tendría que haberme preguntado, mis antecedentes familiares por cáncer de piel ,se miraba las uñas!! En plan : estoy en un bar con mi prima...pero que es esto? Que falta de empatía, profesionalidad y falta de respeto TOTAL hacia el paciente. No se tomó el tiempo de revisarme, NO ME permitió mostrarle mis lesiones, donde se vio esto? y cuando se lo hice notar, me responde: algo más? Profesionalidad ,respeto y empatía HACIA EL OTRO, es lo mínimo. una vergüenza.

La dra. Aina Vila me visitó para ver una mancha que me había salido en la piel. Me explicó todo muy bien, me tranquilizó y me dio un tratamiento que me funcionó! La recomiendo

Fui al hospital nervioso, mascarillas por todas partes, distancia...
Pero salí muy satisfecho. Entré 15 minutos tarde, aunque es cierto que el anterior estuvo más de 20 minutos en la consulta. Ya había visitado otro dermatólogo que no dio con la clave, pero creo la doctora lo clavó. Espero que continúe por aquí. De ser así, tengo dermatóloga para mucho tiempo.

Desgraciadamente he visitado muchos dermatólogos, y puedo decir sin duda que si tuviera que escoger uno, me quedo con ella.
Se volcó totalmente en mi problema como si de ella misma se tratara. Atenta, profesional y muy segura de si misma.
Es el claro ejemplo de medica que se dedica a ello por devoción.

La mejor dermatología que jamás tuve, no se anda con rodeos y soluciona tu problema si o si, te hace un seguimiento de 10, no va con problemas si no con soluciones

He acudido a la Dr. Vila dos veces, la primera para quitar un lunar del cuello y para un tratamiento de mi dermatitis sebareica. En ambas ocasiones la atención fue excelente y el resultado también.

Fui a la consulta de la doctora en cuestión y no fue precisamente un buen día de la sra. Vila, me trató de mala manera, quejándose de la tarde de trabajo que tenía y el montón de citas que tenía y que no tenía tiempo para minucias