Mi hermana ha engordado mucho los últimos años, siempre ha sido rellenita comiendo pero ahora come

El problema de tu hermana requiere como solución ideal un trabajo conjunto de psicólogo/a y nutricionista. Hay que abordar problemas emocionales y posiblemente de depresión y ansiedad que mantienen esta conducta con la comida como sustituto emocional y al mismo tiempo instaurar unas pautas adecuadas de alimentación que poco a poco regularán su metabolismo además de que aprenderá a comer saludablemente.
El tratamiento psicológico facilitará la motivación y cumplimiento de las pautas alimentarías y el diseño de objetivos alcanzables, medibles y reforzantes para conseguir las metas que se propongan en dicho tratamiento.
Hay numerosas técnicas , visualizar como desea estar, diseñar el plan progresivo de actividades para conseguirlo, adherencia a las pautas alimentarias, cambio de conductas, aumento de la autoestima y la autoeficacia según se abordan y consiguen los objetivos intermedios, reducción de la depresión y ansiedad según se avanza en el tratamiento y prevención reacaídas.

Según en qué esté afectando la obesidad a tu hermana se puede utilizar como argumento a favor de la necesidad de acudir a un psicólogo y nutricionista. Es decir, si está triste, irritable, realiza menos actividades placenteras que antes debido al peso, queda poco con los amigos, o si está apática, ansiosa, etc. Todo esto serían buenas razones para acudir a un psicólogo, no lo centres sólo en el peso si ella no quiere hablar de este tema. Y plantéaselo con una actitud de cariño y apoyo y no en plan por ejemplo de "¿no te das cuenta lo mal que estás y que va a ser de ti si sigues así?". Esto sólo provocaría que se opusiera más a buscar ayuda. Espero que te sea útil y consigas que tu hermana busque ayuda.

Yo apostaría por psicoterapia, definitivamente; un nutricionista podría apoyar este proceso.
También aconsejo descartar problemas de tipo médico que hayan podido afectar al aumento de peso, como son los hormonales.
Un saludo,

Yo empezaría por una buena evaluación del problema. Primero, debería acudir a su médico a que le realizaran una valoración descartando que pueda existir alguna enfermedad de base ( problemas hormonales como el tiroides pueden afectar a la conducta de comer, o enfermedades como la diabetes pueden producir una especial inclinación por ingerir alimentos). Tras esto tomaría la decisión pertinente. Es importante que, en cualquier caso, ella sienta vuestro apoyo, que la queréis y que solo os preocupa su salud (no su aspecto físico). Si las causas son de origen psicológico necesitará psicoterapia, con un psicólogo experto en temas de alimentación y sería adecuado que éste trabajase conjuntamente con un nutricionista para realizar la reeducación de hábitos alimentarios. En algunos casos también puede ser de ayuda medicación psiquiátrica.

Espero que te sirva. Mucho ánimo!

Posiblemente necesite al princpio un tratamiento intensivo de tipo farmacologico para reducir de forma importante apetito o quirúrgico (balon gastrico) creo ahora sera poco eficaz el nutricional (dietas no las va hacer) o el apoyo psicologico Al ver que baja peso de forma importante esto le animara para que despues ella acuda al psicologo y al nutricionista

Suscribiendo todo lo anterior, entiendo que habría que reparar en el elevado sufrimiento de la paciente y la identificación de la comida como objeto o la ingesta como proceso que reduce en parte y cada vez menos esa angustia. Temo que cualquier intervención centrada en la modificación de la dieta (procedimineto de primera elección y urgente) sea interpretado como invasivo. De ahí que requiera de una aproximación a la relación con la ingesta y conocer qué sustituye.

El problema de tu hermana es que es ella la que tiene que querer hacerlo y salir de ahí. Por mucho que insistáis no creo que lo vayáis a conseguir.
Es probable que esté en un círculo vicioso: come porque tiene algún problema que le genera ansiedad, como consecuencia de esto engorda y ésto le hace sentir mal. Para reducir la sensación de malestar come. Así que es complejo.
Lo ideal sería un trabajo combinado de nutricionista y psicólogo. Hablad con ella, exponedle la situación y decidle que, cuando ella lo decida, vosotros estáis dispuestos a prestarle toda la ayuda necesaria.
Suerte

Es necesario una terapia multidisciplinar entre alimentación emocional, nutricional y alguna técnica como el Método POSE que aporte saciedad precoz.