Tengo un bebé de dos años y medio. Desde el año y medio que lo saqué de la guardería con el tema com

Hola, en primer lugar, te mando ánimos para esta etapa en la que nos surgen grandes dudas sobre cómo poder alimentar de forma correcta a nuestros pequeños. Con dos años y medio, todavía somos los adultos quienes ofrecemos los alimentos a los pequeños, y dentro de esa oferta, los pequeños escogerán lo que les apetezca comer y en la cantidad en la que se sientan satisfechos. Si dentro de la oferta se encuentran alimentos altamente palatables (muy dulces, muy salados, etc) es probable que deseen inclinarse hacia este tipo de alimentos, desplazando aquellos que más les van a nutrir. Esto es algo que tiene solución! Con educación nutricional y paciencia, podemos llevar a cabo estrategias que pueden revertir la situación. Partiendo de la base de que los adultos seamos su modelo de alimentación saludable, que coman junto con la familia en un ambiente tranquilo, evitaremos ofrecer a lo largo del día alimentos que no sean saludables (zumos, lácteos azucarados, procesados, etc), y también evitaremos forzarles a comer lo que no desean. Es un proceso que puede parecer complejo si no se ha trabajado previamente. Si necesitas ayuda para poder llevar a cabo el proceso, estaré encantada de acompañarte.

En principio es normal que los niños a esa edad pasen por la etapa de rechazar alimentos nuevos. Lo primero es no preocuparse. Generalmente los niños reciben suficientes proteínas (a esa edad, medio litro de leche ya le aporta la proteína necesaria para todo el día) y no tenemos que entrar en discusiones o parecer agobiados porque el niño no come.

Una cosa que podría ser interesante es prepararle esos alimentos que le gustan en casa. No saben igual que los industriales, evidentemente, pero usaremos alimentos de mejor calidad y también en alimentos como las croquetas podemos triturarle en la masa parte de las verduras que no quiere comer.

Lo siguiente que tenemos que tener en cuenta es que aunque no los quiera comer, los alimentos como fruta, verduras, legumbres, hay que seguir ofreciéndoselos. Un niño puede tardar 15 o 20 intentos antes de plantearse comer un alimento que está rechazando. Por cierto, comer con ellos y comer frente a ellos los alimentos que rechazan puede ser bastante útil. Solemos darles de comer aparte y los niños aprenden a comer por imitación. Si no nos ven a nosotros comer un alimento ellos solos no lo van a intentar nunca.

Hay muchas más estrategias para conseguir que los niños coman los alimentos que deben comer, pero probablemente si consulta a un dietista-nutricionista cercano pueda ayudarle al conocer más de cerca su caso.

Por último, si el niño está bien de peso y es un niño activo, yo no me preocuparía de las carencias nutricionales en este momento, sino de conseguir, poco a poco, que vaya ampliando su alimentación. En cuanto a las vitaminas, se deben dar con conocimiento de su pediatra. Si éste las ha recetado como parte de una estrategia para evitar la malnutrición, ok. Si lo hemos decidido nosotros porque nos preocupe el estado nutricional del niño, es mejor hablar con el médico. Le animo a que lo haga si este es su caso. Un saludo!

Hola, los niños tienen periodos de picos de crecimiento en los que comen más, y periodos en los que se estabilizan y no necesitan comer tanto. Por otro lado, es normal que tenga cierto rechazo a determinados alimentos. Lo importante sería intentar que en casa no tuviese acceso a alimentos menos saludables como flanes o nuggets de pollo (si son industriales).

Por vuestra parte, sería interesante adquirir buenos hábitos de alimentación para que él acabe imitando lo que vosotros hacéis.

En cuanto a que prefiera o no ciertos alimentos, la exposición recurrente a ellos (hasta 20 veces en días diferentes) es necesaria para que acaben aceptándolos. Lo importante es no forzarlo a comer, y no ofrecerle otros productos menos saludables "por que coma algo".

Espero haber sido de ayuda. Un saludo!

¡Buenos días! Es muy común que a esa edad pasen por una etapa de rechazo a nuevos alimentos, especialmente si han tenido un cambio como salir de la guardería. Si el niño está activo, con buen peso y sigue tomando pecho, es buena señal. Aun así, entiendo tu preocupación: con una dieta tan limitada, sí puede haber riesgo de carencias a largo plazo.

Algunas claves que pueden ayudarte: no forzar ni presionar, eso aumenta el rechazo. Ofrecer alimentos nuevos sin exigir que los coma. Mantener horarios, evitar picoteos y no premiar con lácteos o postres. Involucrarlo en la cocina y mantener un ambiente tranquilo.

Las vitaminas pueden apoyar, pero no sustituyen una dieta variada. Si el rechazo se mantiene o empeora, convendría valorar con pediatría o algún especialista (logopeda o nutricionista especializada en pediatría).

Te recomendaría que se viera en consulta, ya que es un tema con buena solución pero hay que abordarlo en consulta. No le des vitaminas si no está justificado su uso, ya que tan negativo es para su salud un déficit, como un exceso.