Dra. Carme Martorell i Sabater

Dolor de espalda inespecífico

Los dolores cervicales, dorsales, lumbares o sacros que no se deben a una lesión irreversible; especialmente, el dolor de espalda inespecífico, cuya causa es desconocida pueden resonar sobre puntos de acupuntura muy diferentes. Su diagnóstico requiere un interrogatorio completo y un examen cuidadosos, que nos permitan escoger el mejor tratamiento en cada caso partuicular.

Ataques de pánico

Según mi experiencia personal, los ataques de pánico suelen emerger como consecuencia de un desajuste entre lo que lo que la persona siente en profundidad y lo que vive. Constituyen, a mi modo de ver, un "toque de alarma" vital cuya resolución requiere que la persona se reposicione. Pero como semejante "sacudida" energética genera una inestabilidad que propicia la aparición de nuevos ataques, es conveniente tratarlos. Una acupuntura dirigida a la raíz del conflicto permite, además, canalizar una feliz evolución, minimizando el sufrimiento del proceso de cambio.

Insomnio

Los insomnios pueden deberse a trastornos energéticos muy diversos, y por ello cada paciente debería recibir un tratamiento individualizado. En algunas ocasiones, solamente un punto determinado de acupuntura (de los más de 360) es capaz de resolverlo. Este modo aparentemente simple de tratar requiere una maestría que no siempre alcanzamos. Pero no conozco tratamiento más rápido, efectivo, permanente y global que la estimulación aislada de un solo punto de acupuntura.

Diarrea

La acupuntura me parece el tratamiento de elección en las diarreas funcionales (no en las debidas a una infección, por supuesto). He tratado satisfactoriamente diarreas (etiquetadas como Síndrome del Intestino Irritable) muy crónicas. La elección del tratamiento adecuado en cada caso depende de la constitución del paciente, de los síntomas acompañantes, de los datos obtenidos mediante un examen físico exhaustivo, así como de la comprensión del contexto emocional pretérito y actual de la persona que la sufre.

Palpitaciones

Las palpitaciones que veo en mi consulta son las de las personas cuyas molestias no obedecen a ningún diagnóstico cardiológico claro. Suelen darse en pacientes que presentan, además, otras afecciones de índole diversa (digestivas, hormonales, psíquicas, etc). Por tanto, la sensación subjetiva de que "el corazón no late normal" puede deberse a trastornos energéticos diversos, por lo que cada paciente requerirá un tratamiento individualizado: aquel capaz de resolver todo el cuadro.