Cuando conozco alguien yo pienso en un proyecto y después de conocerlo me deseociono siempre le encu

Hola, parece que el proyecto pertenece a un ideal y cuando le conoces aparece la falta, lo real. Y hay una diferencia entre lo uno y lo otro. El origen es el ideal que pareces querer mantener. O también el defecto tiene la función. de no iniciar el proyecto, así puedes mantener el proyecto ideal.

Cuando conocemos a alguien nuevo, especialmente si nos interesa emocional o románticamente, es muy común que nuestra mente construya un proyecto mental: una historia, una posibilidad, un “y si…”. Proyectamos en esa persona deseos, expectativas, ideales, muchas veces sin darnos cuenta. No estamos viendo a la persona real aún, sino una versión de lo que queremos que sea. "No me enamoro de ti, me enamoro de lo que representas para mí."

¿Por qué ocurre esto? Las personas tendemos a buscar significado en nuestras relaciones. Cuando aparece alguien nuevo, el cerebro quiere “encajar” esa figura en un patrón deseado: pareja, amistad, aliado, etc. Creamos un proyecto para darle sentido al vínculo.

Pero aquí está el punto clave: encontrar un defecto no es el problema. El problema es lo que ese defecto representa para ti. ¿Un defecto te frustra porque rompe tu idea de perfección? ¿O porque sientes que ya no vale la pena si no encaja al 100% con tu proyecto? ¿O porque no sabes si puedes manejar la realidad de los vínculos imperfectos?

Lo que describes es bastante común: al inicio solemos idealizar a las personas y proyectar en ellas expectativas o deseos propios. Cuando la realidad aparece, surge la decepción porque no coincide con esa imagen inicial. Detectar defectos no es negativo en sí mismo, lo importante es aprender a equilibrar la ilusión con una mirada más realista y flexible hacia el otro.

Si sientes que esta dinámica se repite y te impide disfrutar de tus vínculos, te invito a contactarme o agendar una cita conmigo. Juntos podemos trabajar en cómo construir relaciones más sanas y satisfactorias.

Lo que cuentas puede pasar cuando al inicio idealizamos mucho a las personas y después, al verlas de cerca, nos centramos en lo que no encaja. Esa expectativa alta suele llevar a la decepción, porque nadie cumple con la imagen perfecta que tenemos en mente.

Desde la psicología se puede trabajar en identificar esas expectativas, cuestionarlas y aprender a valorar también lo que sí aporta la otra persona, sin dejar que un defecto pese más que el conjunto. La terapia cognitivo-conductual o la aceptación y compromiso ayudan a poner más equilibrio en la forma de relacionarnos.

Un primer paso podría ser observar qué es lo que más te decepciona y preguntarte si habla más de la otra persona… o de lo que tú esperabas de ella.

Muchas gracias, un abrazo.
Carolina Torres Hernández · Psicóloga

Buenas tardes, te ocurre lo que describes, porque te vas al futuro y comienzas a crear situaciones que te favorecen, sin darte cuenta que la realidad es seguramente, muy distinta a lo imaginado. Sería mejor centrarte en el presente y poco a poco ir descubriendo al otro, que puede decepcionarte o no, pero para eso le estás conociendo. Espero te ayude. Un saludo.

Hola. Encontrar defectos a las personas que conocemos significa que las conocemos de forma más completa. Porque todo el mundo tiene defectos. Si conocemos a alguien y no le vemos defectos lo más probable es que todavía no hayamos pasado suficiente tiempo con esta persona, con lo que merece la pena valorar si es una buena idea hacer proyectos con él/ella. La cuestión, con los defectos, es si estamos dispuestos a admitirlos sin que hagan la relación imposible. Si necesitas ayuda para tomar este tipo de decisiones, puedes contactar conmigo. Gracias!

Lo que describes puede estar relacionado con expectativas muy altas o con una visión idealizada de las personas antes de conocerlas a fondo. Cuando imaginamos a alguien como parte de un “proyecto” personal, es fácil que la realidad no encaje con esa imagen y cualquier diferencia se perciba como un defecto.
A veces ayuda cambiar el enfoque: en lugar de buscar que la persona encaje en un plan, observar quién es realmente y valorar sus cualidades junto con sus imperfecciones. Las relaciones más sanas suelen construirse aceptando que todos tenemos lados que no encajan del todo con lo que imaginamos.

Si quieres, puedo proponerte estrategias para manejar esas expectativas y evitar la decepción constante.

No hay suficientes datos para darte una respuesta clara y concisa, sin embargo, te invitaría a que exploraras dentro de ti cuando fue la primera vez que reaccionaste de esa manera, que expectativas pones en una relación y que posibles carencias afectivas puedas estar sufriendo que te llevan a la decepción.
Espero que esta respuesta te ayude, aunque no hay suficientes datos para poder ser más clara.

Hola,
Es normal hacernos ilusión con personas que conocemos. Lo importante es entender si es algo que nos ocurre siempre, si tiene sentido. No ocurre nada porque no nos guste alguien cuando lo conocemos mejor. Si es algo que te afecta mucho te sugiero buscar ayuda a un profesional.

La idealización del amor es muy frecuente. Realmente no ves a la pareja como un ser humano, lo ves como un rol que debe ocupar en tu vida. Te invito a que vayas a consulta y lo trabajes con un profesional de tu zona que te pueda ayudar a entender mejor el origen del problema. Espero haberte ayudado

Lo que describes puede estar relacionado con expectativas muy altas o idealización al inicio de las relaciones. Es normal sentir ilusión al conocer a alguien, pero cuando las expectativas no se ajustan a la realidad, puede aparecer la decepción. Trabajar en gestionar expectativas y conocerse mejor a uno mismo ayuda mucho en estos casos. Te recomiendo buscar apoyo psicológico para aprender estrategias que te permitan relacionarte de forma más sana y realista. No tiene que ser conmigo, sino con el profesional con quien te sientas más cómodo y seguro.

Lo que describes es bastante común y puede estar relacionado con patrones de expectativas poco realistas o con una forma de autoprotegerse ante posibles decepciones. Es normal que, cuando idealizamos a alguien, cualquier pequeño detalle que no encaje con esa imagen nos genere desilusión. Sin embargo, si esto te ocurre constantemente, puede interferir en tus relaciones y tu bienestar emocional.

En terapia, podrías trabajar varios aspectos:
- Identificar patrones de pensamiento que llevan a idealizar a las personas y luego desilusionarte, comprendiendo de dónde vienen esas expectativas.
- Aprender a valorar a las personas de manera realista, reconociendo tanto sus virtudes como sus defectos sin que esto afecte negativamente tu percepción general.
- Explorar la relación con tus propios criterios y autoexigencias, entendiendo si hay miedos o inseguridades que influyen en cómo te relacionas con los demás.
- Desarrollar estrategias para establecer vínculos más saludables, basados en aceptación y comunicación abierta, evitando que la desilusión constante afecte tu vida social y afectiva.

Si quieres, puedo acompañarte en terapia individual para trabajar sobre estos patrones y ayudarte a construir relaciones más satisfactorias y equilibradas.

Hola!
Primero de todo gracias por animarte a hacer una consulta.
Aunque la descripción del problema es muy breve, me lanzo a decirte lo que me sugiere que quizá te pueda estar pasando.
Creo que tiene que ver con las expectativas que cada unx nos creamos a la hora de conocer a alguien, la verdad es que es algo que pasa con bastante regularidad y a veces resulta un poco complicado de manejar, sobre todo a personas con determinados perfiles de personalidad. Es necesario hacer un buen manejo de las expectativas para evitar caer en la decepción cuando nos encontramos con que las cosas no son como las esperábamos.
Por otro lado, es importante entender que no existe la persona perfecta y que todxs tenemos nuestras virtudes y defectos, tenemos que pensar hasta que punto los defectos de lxs demás son tolerables o asumibles para nosotrxs a la hora de elegir con quien llevar a cabo un proyecto y desde esa aceptación elegir.
Espero haber podido arrojar algo de luz a tu consulta.
Un abrazo fuerte

A veces la cuestion de encontrar defectos es una forma de autoboicotearnos y quedarnos en la queja y en la angustia: "nunca voy a encontrar a alguien como la gente" "a fin de cuentas son todxs iguales" etc... Hay que tratar en ese caso el aprender a entender que lo que se busca siempre va a tener alguna falta y con eso hay que aprender a convivir.

Eso que describes le pasa a más gente de la que crees, solo que pocos lo dicen en voz alta.
Sueles empezar desde la imaginación, no desde la observación. En lugar de conocer a la persona que tienes delante, conectas primero con la idea que tu mente proyecta sobre ella —una posibilidad, un ideal, una promesa. Y claro, cuando aparece la persona real, con su ruido, su historia, su imperfección… el contraste duele.

No es frialdad ni exigencia: suele tener que ver con una defensa frente a la decepción o el abandono. Fantasear con la versión “perfecta” del otro protege durante el principio; encontrar el defecto después te devuelve el control (“yo me voy antes de que me hieran”).

Lo que puede ayudarte no es forzarte a “no decepcionarte”, sino quedarte más tiempo en la observación tranquila antes de proyectar. Para evitar esto, te propongo algunos cambios:

En lugar de pensar “podríamos ser…”, prueba a preguntarte “¿quién es realmente esta persona, hoy?”.

Deja que la curiosidad reemplace a la expectativa.

Si notas que aún así vuelve la decepción, no corras a irte; solo mírala como un dato más: “esto es lo que me pasa cuando lo ideal y lo real se cruzan”.