No puedo controlar el que cuando hagan algún comentario con respecto a mi me haga daño y me señalen

Hola, en primer lugar, gracias por tu pregunta. Respecto a la cuestión que planteas, la terapia efectivamente te puede ayudar a que no te afecten las críticas, vengan de quien vengan. Lo primero sería trabajar autoestima y seguridad, y con esto solo atenderás a las críticas constructivas que te hagan evolucionar, y no a las destructivas con el único objetivo de dañar. Cuando hayas trabajado esto, y recibas una crítica, simplemente te plantearas si esta, te sirve aprender algo o no. Hay una frase que lo define “no ofende quien quiere, sino quien puede”. No podemos controlar lo que otros hablan de nosotros, pero si nuestra reacción a ello. Al igual que tú no estás de acuerdo con ellos, ellos pueden no estarlo contigo, y esto no debe de suponer ningún problema para ti. Si tu estás segura de que haces y la razón por la que lo haces, el hecho de que alguien lo critique es ajeno a ti. Son diferencia de opiniones, cada uno vemos la realidad de diferente manera, por tanto no es necesario que todo el mundo esté de acuerdo contigo. Esto es lo que va a hacer que no te afecte. Espero haberte podido ayudar,
Un saludo.

Gracias por compartir con nosotros su "miedo a salir y conocer gente".

He leído la respuesta de nuestra compañera de Bilbao. Compartimos las soluciones ofrecidas. Sus recomendaciones son acertadas y ayudan a vencer el foco principal de su problema: “Me da miedo a salir y conocer gente”.

Sin embargo, nuestra aportación queremos extenderla, como complemento a los datos ofrecido por la compañera, al conocimiento de su Yo. El Yo que continua y operativamente da centro y origen a su vida real. Analizar ese Yo, el primer yo de “Yo soy yo y mi circunstancia”, es entonces analizar su vida, y, he aquí, el sentido del texto que a continuación desarrollaremos basándonos en la ideas de Ortega y Gasset.

Cuando usted dice: “no me arrepiento por ello la verdad lo hice porque así quería, creo que cada cual tiene derecho de hacer lo que quiera con su vida”, el Yo que define en su texto no es un Yo abstracto, genérico, sino que es un Yo concreto, único, que no admite artículo determinado, es el emocionado sentido que el término Yo toma cuando quien llama a su puerta y usted pregunta ¿quien es?, le responda Yo. Pero claro, comprenderá con nuestro ejemplo, que no tendría sentido que la persona que llame a su puerta le respondiera: El Yo.

De aquí, que cuando usted afirma:

“Me *conocen* por eso gente que ni si quiera se de su existencia se inventan cosas y hablan cosas que realmente no saben”

Estas personas que dice usted que la “conocen”, y, que “se inventan cosas”, están hablando del Yo que admite artículo determinado, pero no están hablando del Yo concreto y único que es usted. Y es, ese Yo, -como decíamos más arriba- el que pretendo analizar

Por lo tanto, sus preguntas:

1. ¿Cómo puedo controlar que cuando alguien haga un comentario dañino respeto a mi y me señale no me afecte?

Respuesta:

Descubriendo su Yo.

2. ¿Cómo puedo tratar esto en terapia?

Respuesta:

Su Yo no es una realidad cuyo ser, cuya consistencia o contenido le ha sido dado ya hecho. El Yo es, por lo pronto, actividad, tarea, y es tarea personal, es decir, depende de usted.

Es cierto, que las cosas que le están pasando a su Yo no están en su mano –usted nos dice: “Me señalan…se inventan cosas y hablan cosas que realmente no saben”-, pero sí está en su mano el sentido vital de lo que le pasa, porque eso depende de lo que usted decida ser.

Según nos relata, usted ha elegido:

“Me acostaba con hombres mayores que yo algunas veces por dinero”.

Por un lado, es libre -no tiene por qué “arrepentirse”- ya que como se señala: “cada cual tiene derecho de hacer lo que quiera con su vida”, sin embargo, ante su libertad se alza siempre algo con un carácter de necesidad, como si algo le dijera: hacer puedes hacer lo que quieras, pero solo si quieres “salir” sin “miedo y conocer gente”, tendrás que ser autentica. He aquí la finalidad de la terapia que tiene que hacer.

Planteado el problema de este modo, podría usted preguntarse:

¿Qué debo hacer?

Respuesta:

No tener miedo a la soledad derivada de sentirse usted misma y trabajar el descubrimiento de su Yo para crecer como persona desarrollando unos valores que le permitan continuar con su existencia social y personal.


Discusión

Si usted desarrolla mediante terapia un suficiente sentido de su identidad (su Yo), de la pertenencia a la vida y de una mismidad integral (recuerde, nos dice: “no me arrepiento por ello la verdad, lo hice porque así quería”), entonces se encontrará segura y será capaz de conducir su vida, de lo contrario experimentará lo que llamamos en contextos clínicos “inseguridad ontológica”. En esta situación es donde surgen las eternas preguntas en relación a las cosas que llevamos a cabo y hacemos: ¿para qué?, ¿por qué?, ¿quién soy? ¿qué tengo que hacer ahora?, y la pregunta más importante formulada por usted de modo encubierto –sin ser consciente de ello-:

“¿Por qué si lo que hice lo hice porque así quería; entonces, por qué llevo tan mal que me señalen, por qué me da miedo salir y conocer gente?”.

Conclusión

Al no hallar modo de sostenerse sobre la pregunta que inconscientemente se formula, surge entonces un rechazo indominable al Mundo y a vivir en Sociedad ya que la vida se presenta con carácter puramente negativo.

Pero esta apatía, las razones de esta apatía es porque ha dejado usted de ser auténtica. Ha olvidado que “lo que hizo lo hizo porque así lo quería”. Es decir, siendo responsable de lo que hacia.

No debe temer la Responsabilidad, ya que enfrentarse con su Yo auténtico, ser consciente de ello, puede no ser fácil, pero es el único camino para que continúe con su vida social y personal sin miedo a que la “señalen”.

Su situación puede ser vivida por usted como un drama, con tensiones y fuerzas contradictorias, por lo que puede que no encuentre el “sentido”. Ayudarla a encontrar el “sentido” de lo que tiene que hacer con su vida, he ahí la finalidad de la psicoterapia.

Espero que estas reflexiones, basadas en las ideas de Ortega y Gasset, le hayan ayudado.

Un saludo,
Juan José Regadera, Murcia

¡Hola! La verdad es que entiendo que es una situación complicada, ya que por una parte hay muchas personas que lo interpretarían como prostitución otras tantas como tu elección, etc. Sea la motivación que sea no debería en ningún caso ser motivo de comentario.
Lo primero que creo que deberías de trabajar es tu sensación de vergüenza respecto a tu pasado para así poder no pasarlo tan mal en el momento en el que dichas personas hablen sobre ti. Respecto a las que te conocen por primera vez, cuando te pregunten por el tema, si lo tienes trabajado y asumido, posiblemente serás capaz de dar una u otra respuesta menos dolorosa para ti.
Espero haber arrojado algo de luz a tu pregunta.
Un saludo, Paul

Buenos días, los comentarios negativos nos afectan a todos, especialmente cuando esos comentarios se basan en lo que opinan los otros sobre tu personas y en cuanto esos comentarios te excluyen de un grupo o hagan que te sientas inhibida para poder realizar tu vida cotidiana, desde el bulling hasta el mobbing o el acoso, para ello debemos ser impermeables a las críticas dañinas, saber poner límites, denunciar cuanto corresponda, y solo rescatar los consejos que te ayuden a crecer y a aprender cosas nuevas. Pero más allá de lo que piensen los demás sobre ti tendríamos que trabajar que es lo que piensas tu misma, y en que ámbitos te esta afectando. Esta fobia social que planteas se puede ir superando poco a poco, trabajando la parte emocional y con exposiciones paulatinas, pero es importante que puedas hablar con alguien sobre el tema y que intentes continuar con tu vida cotidiana y no cerrarte o encerrarte haciendo que esta fobia se extienda a otros ámbitos. Espero poder ayudarte y cuando quieras mi consulta esta abierta.

Buenos días,
Si efectivamente no te arrepientes de lo que has hecho con anterioridad, poco debería de importarte lo que puedan decir o pensar de ti y más si se trata de gene desconocida. Dejar que esos comentarios afecten a tu día a día e incluso evites salir tiene una causa mas profunda.
Habría que tratar en profundidad si realmente tienes asumido tu pasado y trabajar en terapia tu autoestima y seguridad, porque desde el momento en que lo tengas aceptado e interiorizado te verías menos afectada por los comentarios ajenos, puesto que lo importante es que te encuentres tranquila contigo misma y en consonancia con tus valores.
Espero que te sirva de ayuda.

¡Hola!
Gracias por tu pregunta ya que su solución pasa por ayudarte a ti y también a otras personas. En primer lugar yo tendría en cuenta el lugar donde vives en el que te sientes tan juzgada ¿es un pueblo, un barrio, es una ciudad?
¿realmente la gente te juzga tanto o solo te sientes tu juzgada? Esto es lo primero que revisaría y después pasaríamos a trabajar varios aspectos, entre ellos tu personalidad. Espero haberte ayudado y si quieres que empecemos una terapia estoy a tu disposición.

En contestación a tu pregunta sobre cómo puedes tratar en terapia el hecho de "sentirte señalada", te haré un par de reflexiones:
- El profesional te ayuda a que te centres en el presente, lo pasado pasado está y seguro que has podido aprender algo. - Cada persona es libre de hacer las cosas que considera que tiene que hacer, por lo que no te arrepientas - Tendrías que trabajar el porqué te afecta tanto que te señalen. Indaga sobre esto, porque este "miedo" no puede condicionarte la vida.
Mi recomendación es que busques un profesional de confianza y que trabajas tus sentimientos, temores… ¡Te mereces disfrutar plenamente de la vida!. Espero te haya podido ayudar.

Hola, buenas tardes!

Desde Psico_Graca podemos ayudarte trabajando con distintos tipos de técnicas; de forma muy superficial (ya que no manejamos los datos suficientes de tu historia vital) tres serían los objetivos de tu terapia: habilidades sociales, autoestima y reestructuración cognitiva.

Un saludo cordial.
Psico_Graca.

Muchas gracias por compartir tu experiencia. Estoy convencido que muchas personas, aunque no hayan vivido tu misma situación, se sentirán identificadas con tu malestar. Los seres humanos necesitamos de contacto social con las otras personas y también de su aprobación. Hay quien es más susceptible a esa necesidad y quien sostiene mejor las críticas ajenas. A veces, estas críticas nos hacen dudar de nuestra valía o de si hemos actuado mal. Pero la opinión que debe prevalecer es la del sujeto mismo, la valoración que cada uno de nosotros hace sí. Ello no equivale a ser una persona solitaria y que no tiene en cuenta aquello que dice su entorno, sino que escuchándolo puede darle la justa importancia. Los juicios que hacen y nos hacen no están, en muchos casos, fundamentados. Y aún cuando lo están, somos nosotros quien decidimos si son importantes. Aunque si el entorno es especialmente hostil, o no pasamos por un buen momento, o si nuestra seguridad en nosotros mismo se ha visto amenazada por avatares de la vida o un mal cuidado por parte de otros nuestra seguridad se tambalea y puede ser interesante disponer de un acompañamiento. Valorar qué imagen tenemos de nosotros mismo, qué imagen creemos que tienen los demás, de nuestras habilidades y recursos o de nuestros valores. Ese posible conflicto puede afectar a varias facetas de nuestra vida. Respecto a tus prácticas y a tu vida, la única persona que decide eres tú. Y sentir plenitud con tus decisiones y tu recorrido vital.