Hace 4 años conocí a un chico pero no pasó nada porque él estaba con otra chica. Desde ese momento,
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Hace 4 años conocí a un chico pero no pasó nada porque él estaba con otra chica. Desde ese momento, hemos sido amigos y no hubo nada entre nosotros. Siempre nos hemos gustado pero hubo mucho respeto y no hicimos nada, quedábamos como amigos. Estos días, me dijo que su relación está en pausa pero no hicimos nada. La última vez, me quedé a dormir en su casa y me quedé a dormir en su casa vestida. Al final, no pudimos evitarlo y nos acostamos a la mañana siguiente. Fue sin intención y surgió todo. Fue un momento bonito porque hubo mucho cariño entregado por ambas partes en ese momento. Ahora me siento mal porque siempre he sido una chica muy fiel a mis valores y no me gustan estas cosas de infidelidades. Me siento un poco sucia y quiero quitarme de la cabeza la idea de que esto pueda ser kármico y me hagan lo mismo algún día. No fue mi intención llegar a ese momento pero al final, había mucho cariño reprimido y surgió.
¿Cómo me quito de la cabeza que he hecho algo muy mal y que soy mala gente por eso? Gracias.
¿Cómo me quito de la cabeza que he hecho algo muy mal y que soy mala gente por eso? Gracias.
Hola, encantada de saludarte. Lo primero que quiero decirte es que entiendo que estás pasando por una situación emocionalmente complicada y que te sientes muy contrariada por lo que ha sucedido.
Esta situación la podríamos abordar en terapia confrontando los pensamientos automáticos negativos sobre ti misma y sobre lo ocurrido transformándolos en pensamientos algo más realistas y compasivos, por ejemplo: "Tomé una decisión en un momento de vulnerabilidad y afecto. Eso no define mi valor como persona."
También sería necesario darte espacio para sentir y procesar todas la emociones que están surgiendo. Es normal sentirse culpable, triste o incluso confundida. Podríamos explorar juntas estos sentimientos y buscar entender su origen. ¿Qué te dice esta culpa sobre tus valores y tus deseos? ¿Cómo puedes honrar tus emociones y al mismo tiempo ser compasiva contigo misma?
Y en esta línea también podríamos trabajar la aceptación de tus sentimientos y pensamientos sin juzgarlos, y comprometerte con acciones que reflejen tus valores. Reconocer que cometiste un error desde tu perspectiva no significa que debas castigarte eternamente por ello. En lugar de intentar suprimir o eliminar estos pensamientos de culpa, puedes aprender a convivir con ellos de una manera que no te impida avanzar. ¿Qué acciones puedes tomar ahora que reflejen quién realmente eres y tus valores?
Veo que esta experiencia ha puesto en juicio tus valores y creencias, pudiendo causarte una sensación de crisis contigo misma y tu identidad. Me gustaría recordarte algo que seguro muchos te han dicho ya, pero me sumo a ellos, todos cometemos errores y lo importante es cómo aprendemos y crecemos a partir de ellos. No defines tu valor por un solo acto. Es esencial tratarte con la misma compasión y comprensión que ofrecerías a un buen amigo en una situación similar.
Si te sientes cómoda podríamos hablar más en profundidad de este tema en una sesión y trabajar juntas para que puedas encontrar la paz y el equilibrio que buscas.
Esta situación la podríamos abordar en terapia confrontando los pensamientos automáticos negativos sobre ti misma y sobre lo ocurrido transformándolos en pensamientos algo más realistas y compasivos, por ejemplo: "Tomé una decisión en un momento de vulnerabilidad y afecto. Eso no define mi valor como persona."
También sería necesario darte espacio para sentir y procesar todas la emociones que están surgiendo. Es normal sentirse culpable, triste o incluso confundida. Podríamos explorar juntas estos sentimientos y buscar entender su origen. ¿Qué te dice esta culpa sobre tus valores y tus deseos? ¿Cómo puedes honrar tus emociones y al mismo tiempo ser compasiva contigo misma?
Y en esta línea también podríamos trabajar la aceptación de tus sentimientos y pensamientos sin juzgarlos, y comprometerte con acciones que reflejen tus valores. Reconocer que cometiste un error desde tu perspectiva no significa que debas castigarte eternamente por ello. En lugar de intentar suprimir o eliminar estos pensamientos de culpa, puedes aprender a convivir con ellos de una manera que no te impida avanzar. ¿Qué acciones puedes tomar ahora que reflejen quién realmente eres y tus valores?
Veo que esta experiencia ha puesto en juicio tus valores y creencias, pudiendo causarte una sensación de crisis contigo misma y tu identidad. Me gustaría recordarte algo que seguro muchos te han dicho ya, pero me sumo a ellos, todos cometemos errores y lo importante es cómo aprendemos y crecemos a partir de ellos. No defines tu valor por un solo acto. Es esencial tratarte con la misma compasión y comprensión que ofrecerías a un buen amigo en una situación similar.
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Le invitamos a una visita: - 38 €
Puede concertar una visita a través del sitio Doctoralia, haciendo clic en el botón Concertar visita.
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Entiendo que estás atravesando una situación emocionalmente compleja y te sientes conflictuada respecto a lo sucedido. Es natural sentirse culpable cuando tus valores se ven comprometidos, pero recuerda que la situación surgió espontáneamente en un momento de conexión y afecto mutuo. Reflexiona sobre tus valores y lo que más te preocupa de esta situación. Hablar abiertamente con el chico sobre lo sucedido puede ayudarte a reducir la carga emocional. Perdónate a ti misma y reconoce que eres humana y estás aprendiendo de tus experiencias. Considera consultar a un terapeuta para explorar estos sentimientos y recibir apoyo objetivo. Reevalúa tu relación con él y aclara tus intenciones y expectativas para el futuro. En cuanto al karma, recuerda que la intención detrás de las acciones es crucial, y reflexionar sobre tus intenciones puede aliviar tus temores. Con tiempo, paciencia y autocompasión, podrás reconciliar tus acciones con tus valores y seguir adelante de manera saludable.
Querida,
Es completamente comprensible que te sientas confundida y un poco angustiada después de lo que ha sucedido. Los sentimientos que describes son naturales dado el contexto de respeto y amistad que has mantenido con esta persona a lo largo de los años. Reconocer y aceptar tus emociones es un paso importante hacia entender mejor tus acciones y cómo se alinean con tus valores.
Primero, es esencial recordar que todos somos humanos y, como tales, a veces nuestras emociones y deseos pueden llevarnos a actuar de maneras que no anticipamos. El cariño y la atracción que sentías eran genuinos y han estado presentes durante mucho tiempo. A veces, en momentos de cercanía intensa, es natural que esos sentimientos se manifiesten de maneras físicas, especialmente si ambos se sentían de manera similar.
En lugar de verte a ti misma como "mala gente" o castigarte por lo sucedido, podría ser útil reflexionar sobre este evento como una experiencia de aprendizaje. ¿Qué te dice sobre lo que realmente valoras en las relaciones? ¿Cómo puedes utilizar esta experiencia para tomar decisiones más conscientes en el futuro? Estas preguntas no pretenden juzgarte, sino ayudarte a entender mejor tus necesidades y deseos.
Además, la idea de que lo que sucedió pueda ser "kármico" y que algo similar pueda sucederte es una preocupación comprensible, pero lleva consigo una carga de miedo y ansiedad que quizá no sea justa ni útil para ti. El karma no se trata de castigo o retribución, sino más bien de cómo nuestras acciones pueden influir en nuestro futuro de maneras que a veces no comprendemos completamente. En este caso, lo que importa es cómo manejas tus sentimientos y decisiones a partir de ahora.
Para aliviar algunos de estos sentimientos de culpa, podría ser útil hablar con alguien en quien confíes, alguien que pueda ofrecerte una perspectiva compasiva y comprensiva. A veces, simplemente expresar tus preocupaciones, como ahora estás haciendo al compartir y recibir consuelo puede ser enormemente liberador.
Recuerda ser amable contigo misma. Todos enfrentamos momentos de conflicto interno, especialmente cuando se trata de relaciones personales y emociones profundas. Permitirte espacio para entender tus emociones sin juzgarte duramente es clave para vivir de acuerdo con tus valores y para tu propio crecimiento emocional.
¡Adelante! Vanessa
Es completamente comprensible que te sientas confundida y un poco angustiada después de lo que ha sucedido. Los sentimientos que describes son naturales dado el contexto de respeto y amistad que has mantenido con esta persona a lo largo de los años. Reconocer y aceptar tus emociones es un paso importante hacia entender mejor tus acciones y cómo se alinean con tus valores.
Primero, es esencial recordar que todos somos humanos y, como tales, a veces nuestras emociones y deseos pueden llevarnos a actuar de maneras que no anticipamos. El cariño y la atracción que sentías eran genuinos y han estado presentes durante mucho tiempo. A veces, en momentos de cercanía intensa, es natural que esos sentimientos se manifiesten de maneras físicas, especialmente si ambos se sentían de manera similar.
En lugar de verte a ti misma como "mala gente" o castigarte por lo sucedido, podría ser útil reflexionar sobre este evento como una experiencia de aprendizaje. ¿Qué te dice sobre lo que realmente valoras en las relaciones? ¿Cómo puedes utilizar esta experiencia para tomar decisiones más conscientes en el futuro? Estas preguntas no pretenden juzgarte, sino ayudarte a entender mejor tus necesidades y deseos.
Además, la idea de que lo que sucedió pueda ser "kármico" y que algo similar pueda sucederte es una preocupación comprensible, pero lleva consigo una carga de miedo y ansiedad que quizá no sea justa ni útil para ti. El karma no se trata de castigo o retribución, sino más bien de cómo nuestras acciones pueden influir en nuestro futuro de maneras que a veces no comprendemos completamente. En este caso, lo que importa es cómo manejas tus sentimientos y decisiones a partir de ahora.
Para aliviar algunos de estos sentimientos de culpa, podría ser útil hablar con alguien en quien confíes, alguien que pueda ofrecerte una perspectiva compasiva y comprensiva. A veces, simplemente expresar tus preocupaciones, como ahora estás haciendo al compartir y recibir consuelo puede ser enormemente liberador.
Recuerda ser amable contigo misma. Todos enfrentamos momentos de conflicto interno, especialmente cuando se trata de relaciones personales y emociones profundas. Permitirte espacio para entender tus emociones sin juzgarte duramente es clave para vivir de acuerdo con tus valores y para tu propio crecimiento emocional.
¡Adelante! Vanessa
Hola! Entiendo que te sientas con sentimientos encontrados por lo ocurrido. Es completamente normal sentirte así cuando tus acciones y tus valores personales parecen estar en conflicto. Primero, permítete sentir y reconocer estos sentimientos sin juzgarte a ti misma. Reflexionar sobre la situación te permitirá comprender mejor tus emociones y necesidades.
Es útil pensar en por qué te sientes de esta manera y qué es lo que realmente te preocupa. Es posible que tengas miedo de las implicaciones futuras o de cómo esto podría afectar tu percepción de ti misma. Hablar con el chico sobre cómo te sientes puede ser una manera constructiva de procesar lo que sucedió y obtener claridad sobre sus intenciones y sentimientos. Recuerda que los sentimientos que surgieron en ese momento fueron genuinos y que el cariño y la conexión emocional que experimentaste son aspectos importantes de las relaciones humanas. Permítete ver este evento como una expresión natural de esos sentimientos, en lugar de una desviación de tus valores.
Es importante también trabajar en el auto perdón y la aceptación. Permítete aceptar que las emociones y los momentos de conexión no siempre se alinean perfectamente con nuestras expectativas o normas, y eso está bien. Considera cómo puedes integrar esta experiencia en tu comprensión de ti misma y tus relaciones de una manera que te permita crecer y aprender.
Si los sentimientos de culpa y confusión persisten, puede ser beneficioso hablar con un terapeuta. Un profesional puede ofrecerte un espacio seguro para explorar tus emociones y ayudarte a encontrar formas de reconciliar tus valores con tus experiencias.
Recuerda, un solo evento no define quién eres como persona. La capacidad de reflexionar, aprender y crecer a partir de nuestras experiencias es lo que realmente importa. Permítete ser compasiva contigo misma y entender que las relaciones y las emociones humanas son complejas y multifacéticas.
Es útil pensar en por qué te sientes de esta manera y qué es lo que realmente te preocupa. Es posible que tengas miedo de las implicaciones futuras o de cómo esto podría afectar tu percepción de ti misma. Hablar con el chico sobre cómo te sientes puede ser una manera constructiva de procesar lo que sucedió y obtener claridad sobre sus intenciones y sentimientos. Recuerda que los sentimientos que surgieron en ese momento fueron genuinos y que el cariño y la conexión emocional que experimentaste son aspectos importantes de las relaciones humanas. Permítete ver este evento como una expresión natural de esos sentimientos, en lugar de una desviación de tus valores.
Es importante también trabajar en el auto perdón y la aceptación. Permítete aceptar que las emociones y los momentos de conexión no siempre se alinean perfectamente con nuestras expectativas o normas, y eso está bien. Considera cómo puedes integrar esta experiencia en tu comprensión de ti misma y tus relaciones de una manera que te permita crecer y aprender.
Si los sentimientos de culpa y confusión persisten, puede ser beneficioso hablar con un terapeuta. Un profesional puede ofrecerte un espacio seguro para explorar tus emociones y ayudarte a encontrar formas de reconciliar tus valores con tus experiencias.
Recuerda, un solo evento no define quién eres como persona. La capacidad de reflexionar, aprender y crecer a partir de nuestras experiencias es lo que realmente importa. Permítete ser compasiva contigo misma y entender que las relaciones y las emociones humanas son complejas y multifacéticas.
Buenas tardes. Entiendo que una persona con tus valores pueda sentirse mal ahora mismo al dejarse llevar por sus sentimientos. En cuanto al tema de que esa acción vaya a regresar a ti en forma de karma es una distorsión cognitiva, por lo que puedes estar tranquila, y si algo malo te sucede no tendrá que ver con este suceso, si no que todos tenemos nuestros momentos malos y buenos.
En cuanto a la culpa que sientes, entiende que ese acto se ha quedado en el pasado y no podemos hacer nada para cambiarlo, y no por ello es un acto malo o de ser mala persona. El mero hecho de que sientas culpabilidad indica todo lo contrario, que tienes un buen corazón. Ahora queda mirar para delante, intentando tomar las mejores decisiones para nosotros mismos y siendo coherentes con ellas.
Para quitarte esa rumiación de la cabeza, te recomendaría practicar algunos ejercicios de relajación y distraerte con actividades que sabes que te hacen bien. ¡Mucho ánimo!
En cuanto a la culpa que sientes, entiende que ese acto se ha quedado en el pasado y no podemos hacer nada para cambiarlo, y no por ello es un acto malo o de ser mala persona. El mero hecho de que sientas culpabilidad indica todo lo contrario, que tienes un buen corazón. Ahora queda mirar para delante, intentando tomar las mejores decisiones para nosotros mismos y siendo coherentes con ellas.
Para quitarte esa rumiación de la cabeza, te recomendaría practicar algunos ejercicios de relajación y distraerte con actividades que sabes que te hacen bien. ¡Mucho ánimo!
Gracias por compartir tu experiencia. Entiendo que te sientas mal y confundida por la situación. Es normal sentir un cóctel de emociones en momentos complicados como este, así que permítete sentir y reconocer lo que estás pasando sin juzgarte demasiado severamente. Reflexiona sobre los hechos y las circunstancias, ya que la relación de tu amigo estaba en pausa, lo que indica que había cierta ambigüedad en su compromiso. Mantenerte fiel a tus valores es importante, pero también debes recordar que todos cometemos errores y un desliz no te define como persona, ni tu carácter en su totalidad. Hablar honestamente con tu amigo sobre lo sucedido puede ayudar a aclarar malentendidos y a establecer cómo ambos quieren proceder en el futuro. Cada experiencia, incluso las que nos hacen sentir mal, nos ofrece una oportunidad para aprender y crecer, así que pregúntate qué puedes aprender de esta situación para el futuro y cómo podrías actuar de manera diferente la próxima vez. Practica la autocompasión y perdónate a ti misma, recordando que cometer errores es parte de ser humano. Si te preocupa el aspecto kármico, recuerda que el karma no es una cuestión de castigo sino de aprendizaje y crecimiento, y lo importante es alinear tus acciones futuras con tus valores. Si estos sentimientos persisten y afectan tu bienestar, considera hablar con un psicólogo, ya que un profesional puede ayudarte a explorar tus sentimientos en profundidad y a desarrollar estrategias para manejarlos. Lo más importante es darte espacio para procesar lo sucedido y avanzar con una comprensión más profunda de ti misma, reconociendo que todos enfrentamos situaciones complejas que pueden desafiar nuestros valores.
Buenas;
Yo considero que la fidelidad más importante es la fidelidad a uno mismo. Yo no encuentro sentido, que estando enamoradas dos personas, no estén juntas.
Saludos cordiales.
Yo considero que la fidelidad más importante es la fidelidad a uno mismo. Yo no encuentro sentido, que estando enamoradas dos personas, no estén juntas.
Saludos cordiales.
¡Buenos días!
Entiendo que te lamentes porque ves que has franqueado tus valores. Sin embargo, era algo que te apetecía y que querías hacerlo. La culpa no nos ayuda a aclarar lo que realmente queremos para nosotros en nuestra vida, si tienes problemas para gestionar esta emoción, te animo a que acudas a un psicólogo que te ayude a gestionarla. Un saludo y gracias.
Entiendo que te lamentes porque ves que has franqueado tus valores. Sin embargo, era algo que te apetecía y que querías hacerlo. La culpa no nos ayuda a aclarar lo que realmente queremos para nosotros en nuestra vida, si tienes problemas para gestionar esta emoción, te animo a que acudas a un psicólogo que te ayude a gestionarla. Un saludo y gracias.
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Es normal sentirte conflictuada tras esa experiencia, especialmente si valoras la lealtad. Reflexiona sobre tus sentimientos y reconoce que la conexión fue genuina. Comunicarte con él sobre cómo te sientes puede ayudar a aclarar las cosas. Evita juzgarte severamente; todos cometemos errores y esto puede ser una oportunidad de aprendizaje. Dale tiempo al proceso y concéntrate en el presente en lugar de lo que pudo haber sido. Hablar con amigos o familiares sobre tus emociones puede proporcionar apoyo y perspectiva. No eres mala persona por lo que pasó; lo importante es cómo decides manejarlo y lo que aprendes de ello.
Al final hay que trabajar esas percepciones distorsionadas.
Gracias por compartir lo que sientes con tanta apertura. Es evidente que eres una persona reflexiva, con valores firmes y con una conciencia emocional profunda. Justamente por eso, lo que ha ocurrido te genera tanto malestar. Pero eso no significa que seas mala persona ni que hayas traicionado lo que eres. Significa que estás en un conflicto emocional entre lo que sientes y lo que crees que “debería” haber sido.
Lo primero que quiero decirte con claridad es: no eres mala gente. Lo que viviste no fue fruto del egoísmo ni del daño intencional a nadie. Fue una situación compleja, con una historia previa de vínculo, deseo contenido y afecto mutuo. No fuiste a buscar un engaño, no actuaste con frialdad ni manipulación. Las cosas surgieron en un momento íntimo, emocional y humano.
Tampoco eres “sucia”. Esa palabra tan dura nace de una culpa muy fuerte que no te pertenece completamente. No está mal que sientas remordimiento si sientes que cruzaste una línea para ti importante, pero esa culpa puede ser una señal de que necesitas comprenderte mejor, no castigarte.
Respecto a la idea de que esto pueda ser “kármico”: muchas veces, cuando actuamos en contra de nuestros propios valores, aparece el miedo a que “nos devuelvan” eso que hicimos. Pero el karma no es un castigo, y la vida no funciona como una lista de deudas morales. Lo importante no es lo que pasó una vez, sino qué haces con lo que sientes ahora: cómo lo piensas, lo procesas y lo integras para seguir siendo coherente contigo misma.
Te invito a que mires este momento no como un error imperdonable, sino como una experiencia emocional intensa que merece ser entendida. Las emociones no siempre respetan las normas racionales. A veces nos sorprenden, nos desbordan o nos enfrentan con partes de nosotros que no habíamos visto.
Si te estás juzgando con demasiada dureza, si esto te impide estar en paz contigo misma, hablarlo puede ayudarte mucho. Puedes contactarme para concertar una cita online si necesitas un espacio seguro donde ordenar tus emociones y aliviar esa culpa que ahora pesa tanto. Estoy aquí para acompañarte con respeto y comprensión.
Lo primero que quiero decirte con claridad es: no eres mala gente. Lo que viviste no fue fruto del egoísmo ni del daño intencional a nadie. Fue una situación compleja, con una historia previa de vínculo, deseo contenido y afecto mutuo. No fuiste a buscar un engaño, no actuaste con frialdad ni manipulación. Las cosas surgieron en un momento íntimo, emocional y humano.
Tampoco eres “sucia”. Esa palabra tan dura nace de una culpa muy fuerte que no te pertenece completamente. No está mal que sientas remordimiento si sientes que cruzaste una línea para ti importante, pero esa culpa puede ser una señal de que necesitas comprenderte mejor, no castigarte.
Respecto a la idea de que esto pueda ser “kármico”: muchas veces, cuando actuamos en contra de nuestros propios valores, aparece el miedo a que “nos devuelvan” eso que hicimos. Pero el karma no es un castigo, y la vida no funciona como una lista de deudas morales. Lo importante no es lo que pasó una vez, sino qué haces con lo que sientes ahora: cómo lo piensas, lo procesas y lo integras para seguir siendo coherente contigo misma.
Te invito a que mires este momento no como un error imperdonable, sino como una experiencia emocional intensa que merece ser entendida. Las emociones no siempre respetan las normas racionales. A veces nos sorprenden, nos desbordan o nos enfrentan con partes de nosotros que no habíamos visto.
Si te estás juzgando con demasiada dureza, si esto te impide estar en paz contigo misma, hablarlo puede ayudarte mucho. Puedes contactarme para concertar una cita online si necesitas un espacio seguro donde ordenar tus emociones y aliviar esa culpa que ahora pesa tanto. Estoy aquí para acompañarte con respeto y comprensión.
No debes de sentirte mal, tu no tienes pareja y él te gusta. El que tiene pareja es tu amigo y es quien tiene que saber lo que hace, por favor no te permitas culpabilizarte.
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