Creo que la psicología no me puede ayudar... He pasado por muchos psicólogos y la verdad es que me

Buenas tardes,
por supuesto que se puede tratar, tanto si se trata de un TOC relacional como de un apego evitativo. Se puede abordar y aprender a vivir sin que te dificulte en tus relaciones de pareja.
Que lo tengas identificado es el primer paso para ponerle solución, por lo que ya estás en camino, ¡enhorabuena!
Yo te propondría profundizar en esas inseguridades, ese temor o dudas, el agobio y el aburrimiento que te aparecen.
También decirte que aprender a aceptarte a ti misma es un paso super importante, reconocerte y amarte como eres, para poder responder libremente a las situaciones que te acontecen, sin verte tan tan influenciada por etiquetas diagnósticas o malas experiencias.
Yo estaría encantada de poder ayudarte en este proceso. Te animo a buscar al profesional con el que te sientas más cómoda, comprendida y segura.
Muchísimo ánimo! Aquí nos tienes.

El TOC de amores o relacional es un subtipo de TOC que comparte los dos elementos fundamentales de este tipo de trastorno: las obsesiones (dudas) y las compulsiones (lo que la persona hace mental o conductualmente para intentar eliminar o mitigar esas dudas y el gran sufrimiento que les genera)
En el TOC de amores la compulsión o ritual suele ser mental, es decir, la persona dedica mucho tiempo a responder a sus dudas (obsesiones) respecto a la relación de pareja a través de comprobaciones o comparaciones para calmar sus dudas normalmente referentes a la veracidad de su propio amor, de merecerse o no el amor de la pareja, búsqueda constante de pruebas de amor, comparación constante con otras parejas, con películas o libros románticos, etc. Como consecuencia, la persona que lo padece sufre numerosas rupturas de pareja, se siente incapaz de comprometerse, no por falta de interés ni de sentimientos sino por el gran peso de las emociones negativas que aparecen en cada nueva relación de pareja
.Es necesario tratar el trastorno. El tratamiento psicológico que mejores resultados está aportando en la actualidad es la Terapia Cognitiva Conductual, como parte central del tratamiento se usa la técnica de exposición con prevención de respuesta o ritual.
Una de las tareas más importantes de la terapia psicológica es hacer una exhaustiva evaluación para determinar cuál es el diagnostico o diagnósticos para poder elegir qué tratamiento es el adecuado.

Buenas noches,

Desde mi punto de vista, podría tratarse de un trastorno disociativo.

En el caso de presentar síntomas obsesivos-compulsivos, los síntomas son comorbidos al trastorno disociativo.

Los trastornos disociativos han sido poco estudiados de forma sistemática debido a su gran complejidad y a las dificultades de las personas que lo padecen para acceder y adherirse a los tratamientos. De aquí, que en el caso de tratarse de un trastorno disociativo, no haya podido ser fácil dar con un diagnostico apropiado.

La "Sociedad Internacional para el estudio del trauma y la disociación" (ISSTD, 2011), determina la frecuencia y la duración de las sesiones en una o dos sesiones por semana, que oscilarían entre los 45 y los 120 minutos de duración (esto dependerá de la consideración del terapeuta sobre lo que será más eficaz y útil para un paciente dado).

Continuando dentro del área de los trastornos disociativos, el protocolo de actuación que ha presentado un mayor nivel de evidencia es la "terapia de esquemas".

La "terapia de esquema" también presenta unos aceptables niveles de recomendación en el tratamiento de los trastornos de la personalidad (en particular, personalidad evitativa, dependiente y obsesivo-compulsiva) -los trastornos de personalidad también son comorbidos con los trastornos disociativos-.

La "terapia de esquemas" es una terapia que tiene su origen en la "terapia cognitivo-conductual", pero que se desarrolló en un primer momento para personas con un diagnóstico de trastorno de personalidad que no respondían a la "terapia cognitivo-conductual" clásica.

Se basa en el concepto de esquemas tempranos desadaptativos, creencias que se desarrollan en etapas tempranas del desarrollo y son fruto de necesidades no cubiertas en dichas etapas. Son patrones que comprenden pensamientos, emociones, recuerdos y comportamientos, y se activan ante ciertos disparadores y que provocan estrategias de afrontamiento desadaptativas en las persona. Estas estrategias son la evitación, el sometimiento al esquema o la sobrecompensación, y aunque la persona los lleve a cabo para evitar el malestar, acaban reforzando los mismos esquemas tempranos. Algunos ejemplos de esquemas son el abandono, el abuso, la desconfianza, etc.

Un saludo.

Lo que describes tiene sentido y a la misma vez te genere confusión. No es nada extraño que, debido a X experiencias en nuestra vida, relacionarnos y establecer vínculos estrechos nos genere emociones un tanto aversivas. Nuestra historia juega muchos papeles, más allá de las etiquetas diagnósticas que a veces dicen muy poco.

En todo caso, lo que me llama la atención de lo que describes es que esto te preocupa, por lo que a su vez, parece importante para ti.

Respecto a TOC y el apego evitativo, te invitaría a buscar un acompañamiento terapéutico donde te sientas a gusto y lo revises, los apegos y las conductas disfuncionales de desaprenden, se modifican, es algo real que sí puedes cambiar. La confusión es lógica: estás buscando respuestas y si no sabes por donde ir, aparece la ansiedad y confusión. ¿Te cuesta enamorarte? Habría que ver a que llamas enamorarte, por que al menos que esté en un error nunca es fácil enamorarse, así que, sí cuesta, no me llama la atención.
Espero haberte ayudado un poco, y te deseo lo mejor en tu proceso, presta atención como estás con el profesional, y tendrás parte del camino andado.
Un saludo,
Marcos.

Buenos días,
En primer lugar me gustaría decirte lo curioso que me parece que hayas empezado el comentario refiriendo que crees que la psicología no te puede ayudar, pero sin embargo has planteado esta pregunta en una página web donde te van a contestar psicólogos, es algo realmente curioso e interesante.
Por otro lado, también me gustaría felicitarte porque este paso que estás dando es muy importante y más aún cuando crees que la psicología no te puede ayudar. Te felicito de verdad.
Sin embargo me gustará que reflexionases, sobre si esto que te ocurre lo han calificado como trastorno al ser algo que no ocurre "normalmente". El que no tengas una forma de relacionarte (con parejas, etc.) que no sea normotípica, no quiere decir que sea un trastorno.
Me gustaría hablar más contigo sobre el tema, si tú también estás interesada, te invito a pedir cita.
Una última cosa, con respecto a los tratamientos con evidencia y demás, quiero que sepas que no siempre los tratamientos con más evidencias son los más útiles para todo el mundo. En relación con lo que te comenté anteriormente, estos tratamientos van para personas muy normotípicas, sirven para la mayoría de las personas, pero no para todas. Eso no quiere decir nada malo. Al final es lo bonito de la psicología, poder adaptarte con múltiples técnicas, estrategias, métodos, a cada persona y poder aportar el tratamiento que necesita y le funciona, no solo el que tenga mayor evidencia empírica.
Un saludo.

También existe la posibilidad de que no sea un problema psicológico sino que no has encontrado a un compañer@ ideal. Tener pareja es más complejo de lo que creemos y a veces compararnos con los demás puede hacernos muchísimo daño.

Respecto a la terapia, yo le daría la vuelta y no me enfocaría en si te puedes enamorar o no. Sería interesante que te permitieras una terapia de autoconocimiento y a partir de allí volver a enfocar el problema. Darle a tu mente un break de la obsesión y autoexigencia.

Espero encuentres la ayuda que necesites!

Hola, lo primero que me llama la atencion de tu escrito es que dices que la psicologia no te puede ayudar, parece que tu aun andas buscando ayuda o a alguien que te ayude a entender que es lo que te pasa.
Explicas una dificultad en la relacion de pareja y planteas la posibilidad de aguantarte, te diria que no has de aguantar nada que no te guste.tambien podrias pensar que pides a tus parejas, cuales son tus expectativas, quizas ahi radican las dudas: que le pedimos al otro, que queremos del otro y que estamos dispuestos a dar nosotros. un poco por clarificar que una relacion de pareja incluye a los dos, entender y ser entendido. A veces queremos algo con tanta intensidad que eso nos bloquea a poder ser naturales ante los otros.
espero que puedas encontrar ayuda.

Buenas;
Gracias por compartir tu experiencia con nosotros.
Si, lo primero es aceptarte a tí misma, intuyes bien, vas bien encaminada y luego ver el tema de las relaciones.
Hay alguna necesidad de que deban ser de alguna forma especial ?.
Huye de las necesidades y de los "debería ser", y creo que vas en esa dirección aunque parezca que entras en confusión.
Conceptualiza tus relaciones como desees, prefieras y vive en coherencia con lo que eres/sientes y hacia donde desees dirigirte. Tu forma de ver tu experiencia y aceptarla es la que es válida.
Indicas que tienes un problema, quizás no lo tienes si esa forma de relacionarte no es disfuncional, no te crea sufrimiento. Quizás el problema es poner o intentar poner etiqueta y/o solución a algo que no se necesita cambiar, porque no deseas cambiarlo es tu forma de experiencia.
Está la otra parte de la relación, tu pareja que ya decidirá también qué hacer.
Saludos.

Te recomiendo iniciar un proceso de terapia, aprende a autoobservarte y autoconocerte, estos deben ser pilares para poder saber qué queremos de nuestra vida.

Gracias por abrirte con tanta sinceridad. Lo que expresas refleja un profundo cansancio emocional, y es completamente comprensible que, tras varios intentos frustrantes en terapia, sientas que la psicología no puede ayudarte. Pero que estés aquí, preguntando, también muestra que no has perdido del todo la esperanza. Y eso ya es muy valioso.

Lo que describes —la dificultad para mantener el interés o el deseo en una relación, el agobio cuando alguien te gusta al principio pero luego todo se apaga, las dudas constantes— se ha empezado a investigar más en los últimos años, y efectivamente se relaciona con experiencias de apego, sensibilidad a la incertidumbre o, en algunos casos, con lo que se llama TOC relacional (o ROCD). Pero más allá de la etiqueta, lo más importante es que sí hay enfoques terapéuticos que pueden ayudarte a entender qué te está pasando y cómo liberarte del bucle entre el ideal, la duda, el rechazo y la culpa.

Y no, la solución no debería ser "aguantarte" ni forzarte a hacer cosas que no deseas. Una buena terapia no te empujará a actuar en contra de ti, sino a comprenderte profundamente, a distinguir tus valores de tus miedos, y a recuperar la capacidad de elegir desde un lugar más libre y conectado contigo.

Si llegas a ese punto en el que decides darte otra oportunidad, busca un/a terapeuta con experiencia en TOC relacional, procesos de apego y terapia de tercera generación (como la Terapia de Aceptación y Compromiso o la Terapia Cognitivo-Conductual y la Exposición con Prevención de Respuesta...). El acompañamiento adecuado puede marcar una diferencia.

Aceptar lo que sientes no significa resignarte, sino empezar a tratarte con la amabilidad y claridad que quizás llevas tiempo buscando.

Yo o el profesional que tu elijas, estaremos aquí si decides volver a intentarlo.

Un abrazo!

Elbire Arana Iturrarte

Psicóloga General Sanitaria

Hola, tu dificultad no es falta de capacidad de amar, ni una condena sin solución.
Te aconsejo probar con un terapeuta experto en terapia EMDR, desde esta perspectiva lo que te pasa se entiende como un patrón de defensa ligado a experiencias pasadas que pueden reprocesarse, mejorando la regulación emocional y la seguridad en el vínculo. No es una incapacidad, tu cerebro no está “estropeado”, sino que está protegiéndote. Lo que ocurre es que, en algún momento de tu historia, amar o vincularte de cerca fue confuso, doloroso o inseguro. El enfoque EMDR no te pide que “aguantes” o “finjas interés”. Su objetivo es ir al origen del patrón, a las experiencias tempranas o relacionales que enseñaron a tu sistema nervioso que la cercanía no era segura.