Hola, soy una chica de 36 años y tengo ansiedad y depresión diagnosticada desde la época de institut
12
respuestas
Hola, soy una chica de 36 años y tengo ansiedad y depresión diagnosticada desde la época de instituto , y una cosa va un poco junto a la otra, tuve una vida llena de maltrato y miedo en el hogar , asi como bullying, las raíces de ambas cosas las conozco. Actualmente estoy con un psicólogo que no me termina de encajar del todo ya que no me enseña a afrontar y manejar mis días malos que son todos, y por eso estoy también en proceso de ver si cambio. Mi inquietud es que hace tres noches cuando estaba dormida me desperté muy acalorada, sentí calor en cuello, pecho abdomen y cara, lo que me alarmó muchísimo, esta sensación ya me había pasado de manera puntual a lo largo del año pasado ( unas 5/6 veces quizás) y también en otras épocas de mucho estrés en mi vida , con esto me refiero a algunas noches sueltas, contadas y también cuando he tenido problemas para conciliar el sueño al meterme en la cama o cuando mientras dormía, me venía el bochorno y con ello mi miedo, impaciencia y más inquietud todavía. La cosa es que cuando me sucedía antes era sobre todo por el hecho del miedo a no poder quedarme dormida noches y más noches … era más bien miedo a que me pudiera morir si no dormía, y anticipaba la idea de ello cada vez que me iba a la cama, pero ahora con esto que me ha pasado tan fuerte hace tres días o sea hablo de ese calor que desprendía mi cuerpo, me da miedo que sea por alguna enfermedad y me aterra, ya que soy hipocondríaca , incluso pensar que es uña enfermedad y no que es la misma ansiedad en un punto álgido que llevo acumulando todo este tiempo ( dos años casi ). Lo que comento fue hace tres noches, antes de ayer tomé un Atarax y conseguí dormir 6 horas, y ayer. ayer me pasó lo mismo que hace tres días que conseguí dormirme 1h y luego ya nada con la sensación de inquietud y calor también pero algo menos. Necesito ayuda, por fa para entender que le pasa a mi cuerpo y si es normal Por otro lado, mi psiquiatra de hace diez años ya me recetó lorazepm para dormir en el caso de q lo necesitara y yo de manera super puntual lo había hecho pero me da mucho miedo engancharme a los somníferos y que no me funcione a la larga, porque antes no es que tuviera insomnio si no noches que me costaba más dormir sin más y ahora es más recurrente. Espero que me digáis que puedo hacer por favor, gracias
Lo que estás experimentando es completamente normal en el contexto de la ansiedad crónica y la hipocondría. Lo primero que quiero transmitirte es tranquilidad: estos síntomas no indican una enfermedad grave, sino una respuesta exacerbada de tu sistema nervioso a la ansiedad acumulada.
¿Por qué te ocurre esto?
Respuesta de hiperactivación del sistema nervioso
La ansiedad mantenida en el tiempo genera una sobrecarga del sistema nervioso simpático, que es el encargado de activar respuestas de lucha o huida. Esta sobrecarga puede provocar:
Oleadas de calor repentinas (bochornos).
Sensación de inquietud extrema.
Problemas para conciliar el sueño o despertares abruptos.
Aumento del miedo y la sensación de peligro inminente.
Condicionamiento del insomnio
Es posible que, con el tiempo, hayas generado un "miedo al insomnio". Esto es algo muy común: cuando pasamos muchas noches preocupándonos por no dormir, el cerebro empieza a asociar la cama y el acto de acostarse con angustia y estrés. Esto crea un círculo vicioso:
Preocupación por dormir → Aumento de la ansiedad → Activación fisiológica → Dificultad para dormir → Más preocupación.
Hipocondría y pensamiento catastrofista
Tu mente está interpretando estos síntomas físicos como un posible problema grave, lo que aumenta aún más la ansiedad y la activación del sistema nervioso.
Estrés acumulado y traumas pasados
Has mencionado un historial de maltrato y bullying. Estas experiencias dejan una huella en el sistema nervioso, lo que hace que en situaciones de estrés el cuerpo reaccione con mayor intensidad.
¿Cómo manejarlo?
1. Cambiar la relación con el sueño
No luches contra el insomnio: Mientras más intentas dormir, más se activa tu cerebro. Si no puedes dormir, levántate y haz algo relajante hasta que sientas sueño.
Evita revisar la hora: Contar las horas de sueño aumenta la presión y la ansiedad.
2. Técnicas de regulación emocional antes de dormir
Ejercicio de respiración 4-7-8:
Inhala por la nariz durante 4 segundos.
Retén el aire 7 segundos.
Exhala lentamente por la boca durante 8 segundos.
Repite de 4 a 5 veces antes de dormir.
Diario de preocupaciones: Escribe antes de dormir todo lo que te preocupa para "sacarlo" de la mente.
3. Afrontar el miedo al insomnio y a la enfermedad
Hazte esta pregunta:
¿Cuántas veces en mi vida he sentido este miedo y he sobrevivido?
Cada vez que has pasado por esto, tu cuerpo ha seguido funcionando, lo que indica que no es peligroso.
4. Uso de medicación de forma consciente
Lorazepam y Atarax pueden ayudarte a corto plazo, pero no deberían ser la única estrategia.
Si te preocupa la dependencia, puedes hablar con un especialista para buscar opciones no farmacológicas como la terapia breve estratégica.
¿Es normal lo que te pasa?
Sí, completamente. Es una manifestación de la ansiedad acumulada y del miedo anticipatorio. No es señal de una enfermedad grave. Si sigues expuesta al estrés y la preocupación por estos síntomas, se seguirán intensificando. Pero la buena noticia es que puedes trabajarlo con técnicas adecuadas.
Si sientes que necesitas apoyo especializado, estaré encantada de ayudarte desde PSYAMM. Puedes contactarme a través de Doctoralia.es.
¿Por qué te ocurre esto?
Respuesta de hiperactivación del sistema nervioso
La ansiedad mantenida en el tiempo genera una sobrecarga del sistema nervioso simpático, que es el encargado de activar respuestas de lucha o huida. Esta sobrecarga puede provocar:
Oleadas de calor repentinas (bochornos).
Sensación de inquietud extrema.
Problemas para conciliar el sueño o despertares abruptos.
Aumento del miedo y la sensación de peligro inminente.
Condicionamiento del insomnio
Es posible que, con el tiempo, hayas generado un "miedo al insomnio". Esto es algo muy común: cuando pasamos muchas noches preocupándonos por no dormir, el cerebro empieza a asociar la cama y el acto de acostarse con angustia y estrés. Esto crea un círculo vicioso:
Preocupación por dormir → Aumento de la ansiedad → Activación fisiológica → Dificultad para dormir → Más preocupación.
Hipocondría y pensamiento catastrofista
Tu mente está interpretando estos síntomas físicos como un posible problema grave, lo que aumenta aún más la ansiedad y la activación del sistema nervioso.
Estrés acumulado y traumas pasados
Has mencionado un historial de maltrato y bullying. Estas experiencias dejan una huella en el sistema nervioso, lo que hace que en situaciones de estrés el cuerpo reaccione con mayor intensidad.
¿Cómo manejarlo?
1. Cambiar la relación con el sueño
No luches contra el insomnio: Mientras más intentas dormir, más se activa tu cerebro. Si no puedes dormir, levántate y haz algo relajante hasta que sientas sueño.
Evita revisar la hora: Contar las horas de sueño aumenta la presión y la ansiedad.
2. Técnicas de regulación emocional antes de dormir
Ejercicio de respiración 4-7-8:
Inhala por la nariz durante 4 segundos.
Retén el aire 7 segundos.
Exhala lentamente por la boca durante 8 segundos.
Repite de 4 a 5 veces antes de dormir.
Diario de preocupaciones: Escribe antes de dormir todo lo que te preocupa para "sacarlo" de la mente.
3. Afrontar el miedo al insomnio y a la enfermedad
Hazte esta pregunta:
¿Cuántas veces en mi vida he sentido este miedo y he sobrevivido?
Cada vez que has pasado por esto, tu cuerpo ha seguido funcionando, lo que indica que no es peligroso.
4. Uso de medicación de forma consciente
Lorazepam y Atarax pueden ayudarte a corto plazo, pero no deberían ser la única estrategia.
Si te preocupa la dependencia, puedes hablar con un especialista para buscar opciones no farmacológicas como la terapia breve estratégica.
¿Es normal lo que te pasa?
Sí, completamente. Es una manifestación de la ansiedad acumulada y del miedo anticipatorio. No es señal de una enfermedad grave. Si sigues expuesta al estrés y la preocupación por estos síntomas, se seguirán intensificando. Pero la buena noticia es que puedes trabajarlo con técnicas adecuadas.
Si sientes que necesitas apoyo especializado, estaré encantada de ayudarte desde PSYAMM. Puedes contactarme a través de Doctoralia.es.
Siento mucho que estés pasando por un momento tan difícil. Lo primero que te plantearía es que puedas comunicarle a tu psicólogo lo que te está sucediendo y cómo sientes que no te está ayudando. No obstante puedes pedir ayuda como lo estás haciendo y buscar nuevas opciones.
Respecto al sueño, parece que tu cuerpo te está señalando de alguna forma toda la ansiedad y las preocupaciones actuales; por si fuera poco respecto a todo lo que has vivido. Me planteo si llevas mucho tiempo luchando con el dolor de todo lo que has expresado o si has encontrado una vida valiosa a pesar de todo lo que te ha ocurrido.
¿Qué necesitas en esos momentos de angustia? A parte de la necesidad de dormir, ¿sentirte protegida, acompañada o en paz contigo misma? ¿Qué más aparece cuando piensas en la posibilidad de morir? Conectar con eso puede darte pistas sobre cómo cuidarte cuando aparece el miedo.
También hablas de que los días malos son todos; entiendo que esto tiene que ser bastante agotador. Me gustaría preguntarte, si tus días no estuvieran definidos solo por el malestar, sino por lo que realmente te importa, ¿cómo te gustaría que fueran? ¿Qué cosas harías que dejas de hacer cuando aparece ese malestar? En general, ¿cómo está tu vida más allá de toda esta dura historia de depresión, ansiedad, bullying..? ¿Has conseguido acercarte a aquellas cosas que te importan o pasas mucho tiempo conectada a los recuerdos, la ansiedad o la depresión?
Tu historia habla de mucha fortaleza, porque sigues aquí, buscando maneras de sentirte mejor. Tal vez lo que necesitas no sea eliminar esos síntomas de inmediato, sino empezar a sostenerte sabiendo que no estás sola en esto. Y empezar a explorar qué cosas de tu vida te gustaría cambiar o cuidar a pesar de todo lo que te acompaña.
Encontrar un terapeuta con quien te sientas comprendida puede ayudarte a explorar todo esto sin miedo, con un espacio seguro para ti.
Respecto al sueño, parece que tu cuerpo te está señalando de alguna forma toda la ansiedad y las preocupaciones actuales; por si fuera poco respecto a todo lo que has vivido. Me planteo si llevas mucho tiempo luchando con el dolor de todo lo que has expresado o si has encontrado una vida valiosa a pesar de todo lo que te ha ocurrido.
¿Qué necesitas en esos momentos de angustia? A parte de la necesidad de dormir, ¿sentirte protegida, acompañada o en paz contigo misma? ¿Qué más aparece cuando piensas en la posibilidad de morir? Conectar con eso puede darte pistas sobre cómo cuidarte cuando aparece el miedo.
También hablas de que los días malos son todos; entiendo que esto tiene que ser bastante agotador. Me gustaría preguntarte, si tus días no estuvieran definidos solo por el malestar, sino por lo que realmente te importa, ¿cómo te gustaría que fueran? ¿Qué cosas harías que dejas de hacer cuando aparece ese malestar? En general, ¿cómo está tu vida más allá de toda esta dura historia de depresión, ansiedad, bullying..? ¿Has conseguido acercarte a aquellas cosas que te importan o pasas mucho tiempo conectada a los recuerdos, la ansiedad o la depresión?
Tu historia habla de mucha fortaleza, porque sigues aquí, buscando maneras de sentirte mejor. Tal vez lo que necesitas no sea eliminar esos síntomas de inmediato, sino empezar a sostenerte sabiendo que no estás sola en esto. Y empezar a explorar qué cosas de tu vida te gustaría cambiar o cuidar a pesar de todo lo que te acompaña.
Encontrar un terapeuta con quien te sientas comprendida puede ayudarte a explorar todo esto sin miedo, con un espacio seguro para ti.
Hola, gracias por compartir tu experiencia. Lamento que estés pasando por este malestar, y quiero decirte que lo que describes es comprensible, especialmente dado tu historial de ansiedad y depresión.
Sobre la sensación de calor y la inquietud nocturna
Lo que mencionas, esa sensación de calor en el cuello, pecho, abdomen y cara, es algo que muchas personas con ansiedad experimentan. Algunas posibles explicaciones incluyen:
1⃣ Respuesta de lucha o huida: La ansiedad activa el sistema nervioso simpático, lo que puede provocar un aumento en la circulación sanguínea y en la temperatura corporal, generando bochornos y sudoración.
2⃣ Hipervigilancia nocturna: Si has pasado por situaciones traumáticas, es posible que tu cuerpo permanezca en un estado de alerta incluso cuando intentas descansar. Esto puede causar despertares súbitos y sensaciones físicas intensas.
3⃣ Ciclo de ansiedad e insomnio: El miedo a no dormir puede generar más ansiedad, lo que dificulta aún más el descanso. Este ciclo puede reforzarse con pensamientos catastróficos, como el miedo a enfermar gravemente.
Sobre la medicación y el insomnio
Es normal que sientas preocupación por el uso de somníferos. Medicamentos como el lorazepam pueden ayudar en momentos puntuales, pero su uso prolongado no es la única solución. El Atarax (hidroxizina) es un antihistamínico con efecto sedante que puede ayudarte a dormir, pero lo ideal es complementar la medicación con estrategias que aborden la raíz del problema.
Recomendaciones para mejorar el autocontrol y el sueño
Técnicas de regulación emocional: La respiración diafragmática o la relajación muscular progresiva pueden ayudarte a calmar el sistema nervioso antes de dormir.
Rutina de sueño estructurada: Intenta acostarte y despertarte a la misma hora todos los días. Evita pantallas y estimulantes antes de dormir.
Aceptación del insomnio: En lugar de luchar contra la idea de no dormir, intenta aceptar que algunas noches pueden ser difíciles, pero tu cuerpo encontrará el descanso.
Explorar una posible terapia con otro enfoque: Si sientes que tu psicólogo actual no te está proporcionando las herramientas necesarias, quizás sea útil buscar otro profesional que pueda trabajar específicamente en la gestión de la ansiedad y el insomnio, como un especialista en terapia cognitivo-conductual para el insomnio (TCC-I).
Si estos síntomas persisten o afectan significativamente tu calidad de vida, te recomiendo que hables con tu médico o psiquiatra para evaluar otras opciones de tratamiento. Si necesitas más orientación, puedes contactarme y estaré encantada de ayudarte.
Sobre la sensación de calor y la inquietud nocturna
Lo que mencionas, esa sensación de calor en el cuello, pecho, abdomen y cara, es algo que muchas personas con ansiedad experimentan. Algunas posibles explicaciones incluyen:
1⃣ Respuesta de lucha o huida: La ansiedad activa el sistema nervioso simpático, lo que puede provocar un aumento en la circulación sanguínea y en la temperatura corporal, generando bochornos y sudoración.
2⃣ Hipervigilancia nocturna: Si has pasado por situaciones traumáticas, es posible que tu cuerpo permanezca en un estado de alerta incluso cuando intentas descansar. Esto puede causar despertares súbitos y sensaciones físicas intensas.
3⃣ Ciclo de ansiedad e insomnio: El miedo a no dormir puede generar más ansiedad, lo que dificulta aún más el descanso. Este ciclo puede reforzarse con pensamientos catastróficos, como el miedo a enfermar gravemente.
Sobre la medicación y el insomnio
Es normal que sientas preocupación por el uso de somníferos. Medicamentos como el lorazepam pueden ayudar en momentos puntuales, pero su uso prolongado no es la única solución. El Atarax (hidroxizina) es un antihistamínico con efecto sedante que puede ayudarte a dormir, pero lo ideal es complementar la medicación con estrategias que aborden la raíz del problema.
Recomendaciones para mejorar el autocontrol y el sueño
Técnicas de regulación emocional: La respiración diafragmática o la relajación muscular progresiva pueden ayudarte a calmar el sistema nervioso antes de dormir.
Rutina de sueño estructurada: Intenta acostarte y despertarte a la misma hora todos los días. Evita pantallas y estimulantes antes de dormir.
Aceptación del insomnio: En lugar de luchar contra la idea de no dormir, intenta aceptar que algunas noches pueden ser difíciles, pero tu cuerpo encontrará el descanso.
Explorar una posible terapia con otro enfoque: Si sientes que tu psicólogo actual no te está proporcionando las herramientas necesarias, quizás sea útil buscar otro profesional que pueda trabajar específicamente en la gestión de la ansiedad y el insomnio, como un especialista en terapia cognitivo-conductual para el insomnio (TCC-I).
Si estos síntomas persisten o afectan significativamente tu calidad de vida, te recomiendo que hables con tu médico o psiquiatra para evaluar otras opciones de tratamiento. Si necesitas más orientación, puedes contactarme y estaré encantada de ayudarte.
Hola. Entiendo que tienes un problema de larga historia detrás. En este caso se trata la sintomatología actual con psicoterapia para afrontar los ataques de pánico, implementar higiene de sueño y reestructuración cognitiva para mejorar la sintomatología ansioso-depresiva. Por otro lado, hay que regresar a ese pasado y trabajar traumas de maltrato, de situaciones que te generaron miedo e inseguridad. Se puede trabajar con EMDR o con técnicas de exposición en imaginación y desterrar las creencias erróneas que hicieron que el problema no fuera asimilado por tu mente. Espero haberte ayudado. Un saludo
Hola, el calor puede ser un síntoma de ansiedad provocado por el ritmo cardíaco acelerado. Además, comentas que la noche es un momento del día que te produce ansiedad, con lo cual tiene sentido que estos síntomas aparezcan por la noche. Me parece razonable y una buena decisión que no quieras abusar de los ansiolíticos y los uses como rescate en días puntuales. Tu psiquiatra puede ayudarte en esta toma de decisiones de ahora en adelante. Desconozco tus circunstancias personales en la actualidad, pero de forma general respecto a tu última pregunta te recomiendo poder trabajar técnicas de mindfulness y meditación para reducir síntomas de ansiedad con la ayuda de un psicólogo. Espero que la ansiedad vaya disminuyendo poco a poco. Un saludo!
Buenos días, por lo que comentas has experimentado síntomas de pánico, tanto en el momento de intentar conciliar el sueño como los otros episodios que refieres de ansiedad intensa el año pasado.
Por otro lado, parece que ante la vivencia de pánico reaccionas con preocupaciones hipocondriacas. Por ello sería necesario trabajar sobre la hipocondria y también sobre la preocupación excesiva, que seguramente está en la base de parte de la ansiedad que experimentas en tu día a día a parte de estar en la base de los momentos de pánico y de hipocondria.
Sería recomendable que comentes con tu terapeuta tu deseo de trabajar sobre esos momentos de pánico e hipocondria, y cómo manejarlos. Ya que se puede trabajar de forma aislada, y trabajar también en la ansiedad que tienes en tu día a día.
Como sabrás la terapia cognitivo conductual es la terapia de elección para este tipo de problemas. Yo estoy especializada en trabajar desde este paradigma y en diversos problemas de ansiedad (entre ellos el pánico y la hipocondria). Si deseas agendar una cita informativa conmigo para conocer más sobre cómo trabajo, puedes hacerlo desde mi perfil.
Por otro lado, parece que ante la vivencia de pánico reaccionas con preocupaciones hipocondriacas. Por ello sería necesario trabajar sobre la hipocondria y también sobre la preocupación excesiva, que seguramente está en la base de parte de la ansiedad que experimentas en tu día a día a parte de estar en la base de los momentos de pánico y de hipocondria.
Sería recomendable que comentes con tu terapeuta tu deseo de trabajar sobre esos momentos de pánico e hipocondria, y cómo manejarlos. Ya que se puede trabajar de forma aislada, y trabajar también en la ansiedad que tienes en tu día a día.
Como sabrás la terapia cognitivo conductual es la terapia de elección para este tipo de problemas. Yo estoy especializada en trabajar desde este paradigma y en diversos problemas de ansiedad (entre ellos el pánico y la hipocondria). Si deseas agendar una cita informativa conmigo para conocer más sobre cómo trabajo, puedes hacerlo desde mi perfil.
Hola, te vendría bien aprender técnicas que te ayuden a recuperar tus patrones de sueño para poder conciliar un sueño reparador así como técnicas para controlar y superar las crisis de angustia o ataques de pánico... para el tema que me me comentas las técnicas de autohipnosis te pueden ayudar. Cualquier duda puedes escribirme a mi mail. Un saludo
Los síntomas que describes, como el calor repentino, la inquietud y la dificultad para dormir, pueden estar relacionados con la ansiedad y el estrés acumulado, especialmente si ya has experimentado episodios similares en el pasado. Es comprensible que la hipocondría aumente tu preocupación, pero la ansiedad puede manifestarse de muchas formas físicas. Si el tratamiento actual no te está ayudando lo suficiente, es válido considerar un cambio de enfoque terapéutico. Te animo a trabajar estos síntomas en consulta para encontrar estrategias que te ayuden a manejarlos y recuperar tu bienestar.
Buenas! por lo que comentas y la historia relatada, cuadra mucho con un estado de ansiedad prolongado en el tiempo con picos dando la sintomatología que describes. Esto lo que puede demostrar es que hace tiempo de que tu cerebro está un estado de alerta permanente, detectado amenazas constantemente, e incluso, cuando duermes, que debería ser el momento de relajarte, el cerebro no puede parar de estar en alerta. Lo que te recomendaría desde aquí es que iniciaras el entrenamiento en técnicas de relajación como la meditación o el mindfullness, y sobre todo, entrenar la respiración, parece una tontería, pero es muy importante. Esto ayudara a que poco a poco el estado de alerta vaya bajando. Espero haberte ayudado un poco, muchos ánimos para seguir en la mejora!
Hola!
Creo que debes ser honesta contigo misma, y si sientes que tu profesional actual no es el mas adecuado para tí, quizás te ha llegado la hora de cambiar de terapeuta.
Si crees que te ayuda, quizás es con él con quien debas abordar todos estos síntomas que explicas, ya que es él quien te conoce y lo sabrá encuadrar dentro de tu problemática.
Si te planteas búsqueda de otro profesional, quizás deberías buscar que sea informado en trauma, apego y posiblemente EMDR.
Si estás interesada en mis servicios, puedes consultar mi perfil y estaré encantada de ayudarte.
Un saludo
Creo que debes ser honesta contigo misma, y si sientes que tu profesional actual no es el mas adecuado para tí, quizás te ha llegado la hora de cambiar de terapeuta.
Si crees que te ayuda, quizás es con él con quien debas abordar todos estos síntomas que explicas, ya que es él quien te conoce y lo sabrá encuadrar dentro de tu problemática.
Si te planteas búsqueda de otro profesional, quizás deberías buscar que sea informado en trauma, apego y posiblemente EMDR.
Si estás interesada en mis servicios, puedes consultar mi perfil y estaré encantada de ayudarte.
Un saludo
Si estás pensando en cambiar de terapueta yo te puedo ayudar, tengo consulta online y podemos hablar y ver qué te está pasando y cómo afrontarlo.
Un abrazo
Un abrazo
Gracias por abrirte y contar tu experiencia, entiendo lo duro que está siendo para ti convivir tanto tiempo con la ansiedad y la depresión. La historia de maltrato y bullying que mencionas puede dejar huellas profundas, y es muy normal que esas vivencias generen una base de inseguridad, miedo y síntomas que hoy siguen afectando tu día a día. Lo que describes de los calores repentinos, la inquietud al dormir, el miedo a no poder descansar o incluso la sensación de que pueda haber una enfermedad detrás, encaja mucho con lo que la ansiedad hace en el cuerpo: una sobreactivación física que se siente muy real y alarmante, pero que en la mayoría de los casos no responde a una enfermedad orgánica, sino a un estado de alerta mantenido. Esa hipervigilancia, unida a la hipocondría, hace que cada sensación se viva con mucho miedo.
El hecho de que lo asocies a momentos de más estrés refuerza esa idea: tu cuerpo está reaccionando a la tensión acumulada. Eso no significa que no debas cuidarte o consultar dudas médicas, pero sí que puedes quedarte más tranquila sabiendo que no eres la única a la que le pasa y que esos síntomas son compatibles con la ansiedad. El miedo a depender de medicación también es común, y es positivo que seas consciente de ello: los fármacos puntualmente pueden ayudar a regular el descanso, pero lo más importante es contar con un espacio terapéutico en el que aprendas herramientas para afrontar tus miedos, manejar las crisis de ansiedad y reconstruir poco a poco tu seguridad.
Si sientes que con tu psicólogo actual no estás encontrando esos recursos prácticos para manejar el día a día, es totalmente válido que quieras buscar otro profesional que se ajuste mejor a lo que necesitas. La terapia no es solo hablar del pasado, también es aprender a gestionar el presente, a bajar la intensidad de los síntomas y recuperar tu calidad de vida.
Y mientras das ese paso, hay pequeñas cosas que pueden ayudarte: rutinas relajantes antes de dormir (respiración, relajación muscular, escribir tus preocupaciones en un papel antes de acostarte), limitar la exposición a pantallas por la noche, crear horarios regulares y, sobre todo, recordar que el descanso no se reduce solo a dormir “perfecto”, sino a darle al cuerpo un entorno seguro y tranquilo para que pueda ir regulándose.
Si quieres, como psicóloga, puedo acompañarte en este proceso y ofrecerte una terapia adaptada a tu situación, donde trabajemos tanto el manejo de los síntomas como la reconstrucción de tu autoestima y seguridad. Un abrazo.
El hecho de que lo asocies a momentos de más estrés refuerza esa idea: tu cuerpo está reaccionando a la tensión acumulada. Eso no significa que no debas cuidarte o consultar dudas médicas, pero sí que puedes quedarte más tranquila sabiendo que no eres la única a la que le pasa y que esos síntomas son compatibles con la ansiedad. El miedo a depender de medicación también es común, y es positivo que seas consciente de ello: los fármacos puntualmente pueden ayudar a regular el descanso, pero lo más importante es contar con un espacio terapéutico en el que aprendas herramientas para afrontar tus miedos, manejar las crisis de ansiedad y reconstruir poco a poco tu seguridad.
Si sientes que con tu psicólogo actual no estás encontrando esos recursos prácticos para manejar el día a día, es totalmente válido que quieras buscar otro profesional que se ajuste mejor a lo que necesitas. La terapia no es solo hablar del pasado, también es aprender a gestionar el presente, a bajar la intensidad de los síntomas y recuperar tu calidad de vida.
Y mientras das ese paso, hay pequeñas cosas que pueden ayudarte: rutinas relajantes antes de dormir (respiración, relajación muscular, escribir tus preocupaciones en un papel antes de acostarte), limitar la exposición a pantallas por la noche, crear horarios regulares y, sobre todo, recordar que el descanso no se reduce solo a dormir “perfecto”, sino a darle al cuerpo un entorno seguro y tranquilo para que pueda ir regulándose.
Si quieres, como psicóloga, puedo acompañarte en este proceso y ofrecerte una terapia adaptada a tu situación, donde trabajemos tanto el manejo de los síntomas como la reconstrucción de tu autoestima y seguridad. Un abrazo.
¿No has encontrado la respuesta que necesitabas? ¡Envía tu pregunta!
¿Tu caso es similar? Estos profesionales pueden ayudarte:
Todos los contenidos publicados en Doctoralia, especialmente preguntas y respuestas, son de carácter informativo y en ningún caso deben considerarse un sustituto de un asesoramiento médico.