Perdi a mi padre hace menos de un mes y han sido días muy difíciles para mi, veo sus cosas y me duel

12 respuestas
Perdi a mi padre hace menos de un mes y han sido días muy difíciles para mi, veo sus cosas y me duele mucho su ausencia, siento pocas ganas de hacer las cosas que hacía antes... a veces siento un miedo hasta las huesos y mucha desmotivavion lo mejor para mi es cuando duermo, pero no se que hacer que para motivarme ya que no quiero que mi mamá me vea así y se sienta más mal ya que ella tambien esta pasando este duelo , estuvieron casados por más de 45 años... no sé qué hacer para levantar cabeza por ella y mi bebé..
Una de las experiencias más dolorosas que podemos atravesar, es la perdida d e nuestros progenitores y es completamente natural que sientas un vacío tan profundo que incluso las actividades que antes disfrutabas ahora parezcan sin sentido. Desde nuestro enfoque, el duelo es un proceso interno en el que nuestro mundo emocional se reconfigura tras la ausencia de alguien que ha sido fundamental en nuestra historia. A veces, el dolor se expresa no solo con tristeza, sino con miedo, ansiedad o incluso una sensación de parálisis, como si el tiempo se hubiera detenido. Es importante que no te castigues por sentirte así. Tu mente y tu corazón están intentando encontrar una nueva forma de vivir con esta pérdida, vacío y eso toma tiempo.

Desde nuestra experiencia terapéutica sabemos que, el duelo no es lineal ni tiene una duración fija. Puedes encontrarte en una fase de profunda tristeza y, al mismo tiempo, sentirte culpable por cómo esto afecta a tu madre y a tu bebé. Pero recuerda: transitar el duelo no significa que los estás abandonando, sino que te estás permitiendo sanar. La tristeza que sientes es el reflejo del amor que tenías por tu padre, y honrarlo no significa evitar el dolor, sino aprender a transformarlo. En este momento, es probable que estés en la fase de depresión, donde el mundo se siente pesado y la motivación se desvanece. Sin embargo, esta etapa no es el final del camino, sino una parte esencial de la reconstrucción de tu vida sin su presencia física.

Sé que hay una parte de ti que quiere levantarse, que quiere encontrar fuerzas por tu madre y tu bebé. Pero no necesitas cargar con todo el peso de este duelo sola. Hablar, compartir tu dolor y permitirte llorar no te hace débil, sino humana. Quizá puedas empezar con pequeños gestos: escribirle una carta a tu padre, escuchar su música favorita, encenderle una vela. A veces, permitirnos recordar sin miedo nos ayuda a integrar su ausencia de una manera menos desgarradora. No se trata de olvidar, sino de aprender a convivir con su recuerdo sin que el dolor te ahogue.

Poco a poco, sin prisa, la luz comenzará a entrar en esos días oscuros. No porque dejes de extrañarlo, sino porque aprenderás a llevar su amor de otra manera. Levantar cabeza no significa dejar de llorar o forzarte a estar bien, sino encontrar momentos de paz en medio del duelo. Confía en que, así como tu padre dejó huellas imborrables en ti, tú también dejarás las tuyas en quienes amas. Y eso, con el tiempo, será suficiente motivo para seguir adelante. Con gusto te podemos acompañar es este momento.

Un abrazo.
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Siento mucho tu pérdida. Perder a un padre es una de las experiencias más dolorosas que podemos atravesar, y lo que sientes es completamente normal. El duelo es un proceso difícil, con altibajos, momentos de tristeza profunda y otros de mayor calma. No te exijas sentirte bien de inmediato ni ocultar tu dolor. Es natural que ahora mismo te cueste encontrar motivación y que el sueño sea un refugio.

Lo más importante en este momento es darte permiso para sentir, sin juzgarte. No tienes que estar fuerte todo el tiempo ni "levantar cabeza" de golpe. Tu mamá también está viviendo su duelo, y aunque te preocupe su bienestar, compartir lo que sientes con ella, sin cargarla, puede ser una forma de apoyarse mutuamente. A veces, el simple hecho de hablar y recordar a tu padre puede ser sanador.

Para encontrar algo de motivación, empieza con pasos pequeños. No pienses en recuperar tu rutina completa, sino en darte momentos de conexión con lo que antes te hacía bien, aunque sea en pequeñas dosis: salir a caminar, escuchar música, escribir sobre lo que sientes, hacer algo con tu bebé que te reconforte. A veces, la acción viene antes que la motivación: aunque no tengas ganas, hacer algo pequeño puede generar un cambio en cómo te sientes.

Y si en algún momento sientes que este dolor te está bloqueando demasiado o te cuesta sobrellevarlo, pedir ayuda profesional puede ser un gran apoyo. No tienes que pasar por esto sola.

Aquí estoy si necesitas desahogarte. Te mando un abrazo fuerte.
 Beatriz Castro
Psicólogo
Las Palmas de Gran Canaria
Hola, en primer lugar, siento muchísimo tu pérdida. En el proceso de duelo, atravesamos por muchos estados emocionales, entre ellos, evidentemente, la tristeza. Se considera un proceso natural, ante el vacío que deja la persona en nuestras vidas. Cuando alguien fallece, no sólo perdemos a esa persona, perdemos lo que nos hacía sentir, perdemos su mirada, de alguna manera, también perdemos algo en nosotros. Necesitas permitirte atravesar este doloroso proceso, sin culpa y sin obligarte a estar bien. Hace apenas un mes de su pérdida, así que vas a necesitar tiempo. Tu madre necesita atravesar este dolor, al igual que tú. Es importante que no te sientas responsable de rescatar a otras personas de algo que simplemente necesitan sentir. En todo caso, por momentos, puedes dejarte acompañar por otras personas que puedan servir de apoyo, hacer cosas que te gustan, e ir dando pasos para afrontar la ausencia de tu padre, eso son aspectos que te pueden ayudar a aliviar por momentos el dolor. Y en todo caso, si lo necesitas, sentirte acompañada por un profesional también podría serte de gran ayuda. Un abrazo
Estás en pleno duelo, eso significa que tus síntomas son naturales. Los tres primeros meses lo mejor es no luchar contra ellos y aceptarlos. Si a partir del tercer mes no notas una mejoría, que puedes empezar a hacer algunas cosas, es mejor acudir a un profesional. En cuanto a no compartir tus sentimientos con tu madre si no sirve hacerlo puedes dedicar una hora al día a escribir sobre recuerdos con toda la intensidad que puedas aunque te cueste un poco, luego tratar de hacer alguna tarea cotidiana y dejarlo aparcado hasta el día siguiente. Cuando escribas sobre tus recuerdos al principio sólo serán penosos, pero trata, pasado un tiempo, de escribir algo bonito que pasaste con esa persona a la vez. También te aconsejaría que tuvieras presente cualquier cosa que te alivie, bien de otros o cosas que puedas hacer. Puede ser desde una actividad o el contacto con otra persona...mucho ánimo.
 María Inmaculada Muñoz Delgado
Psicólogo, Psicólogo infantil
Badajoz
Buenas;
Siento mucho la pérdida de tu padre y vuestro dolor. Es natural que ahora te encuentres así, es un duelo. Sería muy probablemente deseable que tu mamá y tu pudiérais compartir las emociones, esto suele dar descanso, alivio. También es deseable que no fuerces o te sientas mal por no tener ahora mismo la motivación que echas de menos, lleva su tiempo sobreponerse o recuperarse. Cuidate mucho, eso sí, pero sin prisas por la mejoría. Te puede venir bien dar un paseo diario, con tu bebé, tener momentos con compañía y momentos a solas para ir procesando emocionalmente. No condenes ni evites tus emociones, aunque puedas ir buscando cosas que te vayan haciendo sentir mejor. Intenta salir todos los días a la calle un ratito, comer y dormir bien. Poco a poco al ritmo de cada uno. Todo mi apoyo. Saludos.
 Cecilia Díaz Garrigues
Psicólogo
Carcaixent
Hola. Siento mucho tu pérdida. Todo lo que cuentas es normal en un proceso de duelo. Hace muy poquito que pasó. Permítete pasar el duelo. Eso quiere decir que no te exijas conseguir hacer lo que hacías antes, por el momento, poco a poco irás recuperándote. Intenta comunicarte con tu mamá para apoyaros en esto, aunque cada persona vive su duelo de diferente manera, porque tampoco le va a ayudar que finjas estar bien y para ti debe ser un esfuerzo muy grande.

Yo siempre recomiendo darse abrazos largos, sin necesidad de hablar. También puede ayudar hacerse una lista de tareas indispensables e ir haciéndolas para descargar en la lista las tareas pendientes y no tener que ir recordándolas.

Espero haberte ayudado.
Antes que nada, lo siento mucho por tu pérdida, no me imagino el dolor que estás pasando... Es muy normal que en un proceso de duelo nos sintamos apagados, sin motivación, como si nos pesara el mundo. Otros días, nos sentiremos enfadados, con rabia o incluso con mucho miedo. Es un proceso que conlleva tiempo, paciencia y mucha amabilidad con nosotros mismos. Entiendo que no quieras ser una preocupación para tu madre, pero evitar mostrarte triste ante ella solo te generará a ti una mayor presión y un mayor malestar. Crea un espacio con ella donde ambas se sientan cómodas para expresar libremente sus emociones, sus pensamientos... Abrácense y dense mucho amor. Es mejor compartir el peso de una mochila pesada. Aparte de eso, te recomiendo ir a terapia.
¡Un abrazo!
¡Buenos días! Es una situación díficil y dolorosa, te recomiendo qeu acudas a un psicólogo que te pueda ayudar en este proceso. Muchas gracias y ánimo.
 Marta Fusté
Psicólogo
Barcelona
Hola, te encuentras en estos momentos en pleno proceso de duelo por una pérdida importante en tu vida y es normal que tengas sentimientos y emociones que duelen como: miedo, tristeza, vacío, incluso puede ser rabia. Es importante que des espacio y tiempo a estas emociones para poco a poco ir transitando esta fase. Seguramente todavía estás en proceso de aceptación de lo ocurrido, pero poco a poco y con el tiempo, estas emociones y sentimientos van a ir evolucionando. Si ves que te cuesta mucho el llevar tu día a día, a veces la ayuda profesional te puede servir para sentirte acompañada y adquirir herramientas que te ayuden a gestionar mejor esta etapa inicial.
 Andrés Adargoma Nuez González
Psicólogo
Las Palmas de Gran Canaria
Lamento mucho la pérdida de tu padre. Perder a un ser querido, especialmente un padre, es un dolor profundo y transformador. Lo que sientes es completamente normal y válido. No hay una manera "correcta" de vivir el duelo, pero quiero ofrecerte algunas ideas que pueden ayudarte a sobrellevar este proceso y encontrar pequeños momentos de calma y motivación.

1. Date permiso de sentir
El duelo no es lineal, y habrá días en los que te sentirás mejor y otros en los que el dolor será más fuerte. No te juzgues por sentir tristeza, miedo o desmotivación. Permitirte sentir es parte del proceso de sanación.

Hablar de tu dolor no es una carga para los demás. Tu mamá también está sufriendo, pero compartir sus sentimientos puede ayudarles a sostenerse mutuamente.

2. Mantén pequeños momentos de conexión con él
Sabes que físicamente ya no está, pero su amor y su esencia siguen contigo. Algunas ideas para mantener esa conexión sin que duela tanto:

Escribe una carta a tu padre contándole cómo te sientes, lo que extrañas y lo que has vivido desde que partió.
Guarda un objeto significativo en un lugar especial, algo que te recuerde su amor más que su ausencia.
Habla con él en tu mente o en voz alta cuando lo necesites. Puede ser un desahogo valioso.
3. Apóyate en rutinas simples
Sé que la motivación es difícil en este momento, pero intenta hacer al menos una cosa pequeña cada día que te ayude a seguir adelante: Levantarte y hacer tu cama
Salir a caminar un rato
Escuchar una canción que te recuerde buenos momentos
Preparar tu comida favorita o algo sencillo pero nutritivo
Escribir en un diario lo que sientes

Cada pequeño paso cuenta. No tienes que hacerlo todo de golpe.

4. Tu mamá y tu bebé: Motivos para seguir
Tu madre está pasando por el mismo dolor, pero no tienes que ser fuerte todo el tiempo por ella. A veces, ser vulnerable y permitir que compartan su tristeza puede ayudar más que fingir estar bien.

Tu bebé te necesita presente, y aunque ahora sientas que no tienes ganas de nada, eres su refugio y su mayor amor. Tal vez no sientas fuerzas hoy, pero piensa que él o ella es un pedacito de amor que sigue creciendo gracias a ti.

Piensa en pequeños momentos de alegría que puedas compartir con tu bebé. Su risa, su abrazo o simplemente verlo dormir pueden recordarte que aún hay amor y belleza en la vida.

5. No tienes que hacerlo sola
Si sientes que la tristeza te abruma demasiado, buscar apoyo psicológico puede ayudarte. No es un signo de debilidad, sino de amor propio. Un terapeuta puede acompañarte en este proceso de sanación sin que te sientas sola.

También puedes hablar con amigos o familiares que te escuchen sin juzgar. A veces, solo decir lo que sientes en voz alta ya es un alivio.

6. El tiempo no borra, pero transforma
Sé que ahora el dolor es intenso, pero con el tiempo aprenderás a vivir con su recuerdo sin que duela tanto. No se trata de olvidar, sino de integrar su amor en tu vida de una nueva manera.

Tu padre querría verte sonreír otra vez. Cuando te sientas perdida, pregunta en tu corazón qué te diría si pudiera hablarte ahora. Probablemente te recordaría lo fuerte y valiosa que eres.
Lamento mucho tu pérdida. El duelo es un proceso único y desafiante, y es completamente normal sentir miedo, tristeza y desmotivación en estos momentos. Es importante que te permitas sentir lo que estás viviendo, sin juzgarte. Aunque desees ser fuerte por tu madre y tu bebé, recuerda que cuidar de ti misma también es esencial para poder estar presente para los demás. Si sientes que necesitas apoyo adicional para manejar estas emociones, no dudes en buscar ayuda profesional. La sanación lleva tiempo, y cada paso, por pequeño que sea, es valioso.

La pérdida de un padre es una de las experiencias más dolorosas que se pueden vivir, y es totalmente normal que te sientas así. Lo que describes —el dolor al ver sus cosas, la falta de ganas, el miedo y la desmotivación— no son signos de debilidad, sino síntomas del duelo.

No te culpes por sentirte de esta manera. Estás en un proceso natural y necesario. El duelo no tiene un manual de instrucciones, ni un tiempo límite.

Entendiendo tu duelo
El dolor que sientes es el reflejo del amor que le tenías a tu padre. Es un proceso de sanación. La sensación de que "lo mejor es cuando duermo" es porque, en el sueño, tu mente y tu cuerpo se desconectan temporalmente de ese dolor, lo cual es un mecanismo de defensa. Sin embargo, no puedes quedarte ahí.

Lo que puedes hacer para gestionar el duelo
Entiendo tu deseo de ser fuerte por tu madre y tu bebé, pero la fortaleza no significa esconder el dolor, sino aprender a gestionarlo. Si te fuerzas a "levantar cabeza" sin procesar la pérdida, el dolor se guardará en tu interior y podría manifestarse más adelante en forma de ansiedad, depresión o problemas físicos.

Aquí tienes algunas ideas que pueden ayudarte:

Habla con tu madre sobre tu dolor: En lugar de esconder tus sentimientos para protegerla, compártelos con ella. Ella también está en duelo y probablemente siente lo mismo. El hecho de que se puedan acompañar en el dolor los unirá más y les permitirá vivir el duelo de forma conjunta. Podrías decirle: "Mamá, me siento muy triste, veo las cosas de papá y lo echo mucho de menos". Esto le dará permiso a ella para expresarse también.

Date permiso para sentir: Permítete llorar cuando lo necesites, sin juicios. No hay nada de malo en sentirte triste. Llorar es una forma de liberar la presión emocional. No hay que ser fuerte todo el tiempo.

No te aísles: Aunque sientas pocas ganas de hacer cosas, intenta mantener un mínimo de contacto social. Llama a amigos, a familiares... no tienes que hablar de tu dolor si no quieres, simplemente estar en contacto con otras personas te ayudará a no sentirte solo.

Crea una nueva rutina: No te presiones para volver a ser la persona que eras antes, pero sí puedes intentar crear una nueva rutina, incorporando actividades que te gusten, por mínimas que sean. Esto le dará estructura a tu día y te ayudará a sentirte más en control.

Honra la memoria de tu padre: En lugar de evitar sus cosas, podrías empezar a honrar su recuerdo. Por ejemplo, viendo sus fotos y recordando anécdotas felices. La idea es que las cosas de tu padre dejen de ser un recordatorio de la pérdida y se conviertan en un símbolo de la vida que compartió contigo.

El duelo es un camino largo, pero no tienes que recorrerlo en soledad. Buscar ayuda profesional, como un psicólogo especializado en duelos, también es una excelente opción.

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