Tengo 27 años, soy una persona flexible, adaptable, muchos dicen que soy un nervio pero luego tambie

12 respuestas
Tengo 27 años, soy una persona flexible, adaptable, muchos dicen que soy un nervio pero luego tambien soy muy calmado,sensible,en el fondo empatico,muy curioso, autoexigente,divertido,gracioso y muy detallista, no me considero feo,complexión normal.

Los valores que yo considero mas importantes son la honestidadad,la lealtad,el respeto y tengo mi propia filosofia de justicia.

Adoro la soledad,pero en cambio me encanta estar con gente a mi alrededor la cual me aporte esa calma paz o poder contar algo en confianza,si llego a ese punto de conexion me siento muy tranquilo.

De hobbies, me encanta ver series,peliculas,me gusta cocinar, me produce mucha tranquilidad,me gusta el gimnasio es un sitio donde puedo soltar mucha adrenalina(Aunque ahora mismo no me sienta con ganas),adoro las motos, la sensación que siento conduciendo es libertad pura,nada me produce esto similar,me gustan los videojuegos pero ultimamente tampoco tengo ganas.

Me encanta dormir,montar en moto,y hacer introspección leer mi propia filosofia de vida.

Me siento muy independiente,algo que veo positivo es mi fuerza de voluntad(Cuando la demuestro para las cosas que me interesan), soy muy perspicaz,observador,poseo un gran grado de inteligencia y agilidad mental.

Siento que toda mi vida hasta ahora los 27 años son logros,porque podia haber tirado la toalla en mcuhisimas ocasiones hace mucho tiempo,cada dia intento superarme.

MI mayor vulnerabilidad es actualmente mi entorno en el domicilio así como mi estabilidad laboral,tambien mi fisico lamentablemente he perdido mucho de como estaba.

Actualmente tampoco siento que tenga muchos amigos, conocidos si hay pero en el fondo me siento solo, no tengo a nadie realmente con quien apoyarme quitando una persona que he crecido con ella es como mi hermano.

Sentirme para mi escuchado y respetado, es simplemente dejarme dar mi punto de opinión analizarlo y llegar a un acuerdo, no necesio que se me valore positivamente, puedo equivocarme.

Mis metas y sueños van desde algo tan simple como tener una casa con un pequeño jardin (Y si pudiera ser una piscina), un garaje donde este un coche mi moto, vivir con una pareja que haya complicidad a mi lado y si puede ser un husky,como si supero esa barrera, que creo que lo hare a lo largo de mi vida,crear una empresa la cual me permita subsistir y disfrutar de viajes, experiencias,tener tiempo de calidad con el que disfrutar solo o acompañado,tengo varias ideas que me gustaria hacer realidad para poder ayudar a la gente,creo que tengo un objetivo muy grande de vida y estoy dispuesto a cumplirlo.

Llevo mucho tiempo viendo estos comportamientos en mi casa. No son de un día, son durante años, con un patrón que se repite constantemente. Indiferentemente de que yo haya desarrollado mecanismos para “evitarlos”, siento que necesito compartirlo.

Mi padre es controlador, manipulador, y en definitiva siento que no son buenos padres. Él revisa todo, incluso ha rebuscado en la basura lo que tiro, ha roto pomos de mi puerta y ha mirado mis cajones siempre que tiene la “oportunidad”. Incluso llegué a poner una cerradura en mi habitación y me la reventó. Cuando le llevo la contraria muchas veces explota y se vuelve efusivo, y yo me veo obligado a cortarle. Me duele tener que imponerme solo para que se respete mi opinión. Y, aunque en los momentos de tranquilidad a veces noto que le tiembla la mano o que se resguarda en sus palabras, la mayor parte del tiempo lo siento como una presencia que controla absolutamente todo.

Mi madre, por otro lado, está atrapada en un ciclo obsesivo con la limpieza. Puede pasarse cuatro horas al día limpiando, repitiendo varias veces las mismas tareas, y cada vez que termina vuelve a decir que “todo está lleno de polvo”. No se le puede decir nada porque inmediatamente se victimiza. Siempre utiliza frases como “porque como yo lo hago bien” o “ves, ves”, anulándome como persona y dejándome la sensación de que nunca es suficiente lo que hago. Para todo tiene un “es que…”, cualquier cosa se convierte en una excusa y en un motivo de victimización. Yo sospecho que tiene TOC, e incluso puede que algo más. El problema es que utiliza esa misma obsesión a su favor para sostener el discurso de que “ella hace todo” y que “se pasa el día limpiando”, poniéndose en un papel de sacrificio que le da autoridad para anularme.

Durante este mes que he estado solo en casa, he descubierto que puedo vivir de otra manera. Me gusta cocinar, disfruto de la tranquilidad de no escuchar gritos ni discusiones absurdas, no tengo problemas en cosas tan simples como dejar las puertas abiertas, y me siento bien sin vivir en ese clima de tensión constante. He comprobado que no hace falta barrer cuatro veces al día, ni fregar, ni vivir atrapado en ese ciclo obsesivo. Ha sido un mes donde he podido escucharme y darme cuenta de que soy muy independiente y que puedo sostener una vida normal sin esa presión.

Desde que mis padres han vuelto de vacaciones, todo ha cambiado otra vez. He vuelto a sentir ansiedad constante, me despierto tanto por la noche como de la siesta con el corazón acelerado. De cosas tan simples como pedir que traigan una barra de pan normal (una baguette, que llevo años diciendo que es el pan que me gusta) hacen un problema enorme. Solo traen hogazas, pan de pueblo, pan grande, pero nunca lo que yo pido. Y cuando lo señalo, la respuesta es que “solo quiero que se me compre lo que a mí me gusta” o que “si quiero pan, vaya yo”. Pero no es el pan lo importante, es que no hay escucha, no hay consideración, no se me da valor.

En mi casa no hay escucha activa: mi padre siempre tiene que ser por sus cojones, y mi madre porque “es su casa”. Y cuando intento poner límites, me dicen que yo no tengo que ponerlos porque “es su casa”. Eso me anula aún más, porque siento que no tengo espacio propio ni como persona.

Lo más duro para mí es sentir que vivo en un entorno donde no puedo expresarme, donde no hay respeto, donde todo lo que digo es cuestionado, minimizado o ridiculizado. Lo único que quiero es sentirme escuchado, que mi opinión valga, que se me dé un espacio donde pueda ser yo mismo sin gritos ni imposiciones.

Acudí por primera vez a una consulta de psicología, donde sentí bastante complicidad con la persona y pude expresarme con libertad. Sin embargo, decidió derivarme a una doble consulta, tanto con ella como con un psiquiatra. Yo no estoy a favor de los medicamentos y me negué, porque aunque había complicidad no me sentí del todo escuchado,tal vez comprendido, realmente me faltaba tiempo para expresar como me sentia,tambien entró en juego el echo de que me senti atraido desde el principio por esa misma persona la cual conté y mi abre por primera vez,conozco perfectamente el DSM-5 así como el codigo deontologico, asique entiendo la decisión.
(Adoro la programación neurolinguistica, y he leido mucho sobre sigmund froid, así como Platón,socrates y aristoteles)

En el ámbito laboral tampoco encuentro un espacio sano. Estoy en una empresa donde no valoran nada el trabajo que hago, al contrario, lo tiran por tierra constantemente. Trabajo prácticamente en una situación de insalubridad, llegando incluso a haber cucarachas en la oficina. Todo funciona por compadreo, y como yo no me callo y soy muy peleón —porque, como ya he dicho, tengo mi propia filosofía de justicia—, muchas veces eso me pone en contra del ambiente general,actualmente me encuentro de baja por acoso laboral.

Creo que mis problemas no se solucionan con medicación, sino con un espacio terapéutico donde pueda expresarme, trabajar mis emociones y aprender a sostener esta situación. Entiendo perfectamente que todo sería más fácil desde otra situación socioeconómica,realmente esto ayudaria mucho, pero lamentablemente eso no puedo cambiarlo ahora mismo y pensar en ello es generarme mayor presión y autoexigencia, sigo con mis objetivos establecidos para este año, pero necesito "Desahogarme"

En resumen poseo un contexto familiar invalidante, un ambiente laboral toxico que alimenta el como me siento.
Tengo una gran capacidad mental, claridad, realizo mucha introspección y sobretodo fuerda de voluntad, de por si utilizo tecnicas y recursos incluyendo TCC.
Gracias por abrirte y compartir tu experiencia con tanta profundidad. Se nota el gran nivel de reflexión e introspección que tienes, así como la fuerza de voluntad con la que a pesar de las dificultades sigues avanzando en tus metas y cuidando de ti mismo.

Lo que describes respecto a tu familia y tu entorno laboral refleja un contexto muy exigente, en el que no siempre encuentras el respeto, la validación o el espacio propio que necesitas. Es comprensible que esto te genere ansiedad, frustración y sensación de no ser escuchado. A la vez, también muestras una gran capacidad para identificar lo que sí te hace bien —la calma, la independencia, cocinar, montar en moto, rodearte de personas que aportan paz— y eso es un recurso muy valioso para seguir fortaleciéndote.

Algunas ideas que podrían ayudarte en este camino:

1. Poner límites internos y externos: incluso si en casa no respetan tus decisiones, puedes ir trabajando en cómo mantener tu propio espacio emocional, aprendiendo a no cargar con todo lo que dicen o hacen los demás.

2. Buscar y consolidar apoyos fuera del hogar: ya has visto que en otros contextos puedes sentirte más libre. Ir creando redes de confianza —aunque sean pocas pero de calidad— puede darte un gran sostén.

3. Terapia psicológica continuada: un espacio terapéutico puede ofrecerte ese lugar seguro donde expresarte sin juicios, trabajar la ansiedad, el dolor y la autoexigencia, y ayudarte a desarrollar estrategias para afrontar tanto el ambiente familiar como el laboral.

4. Cuidar tu bienestar diario: mantener rutinas que te conecten contigo (ejercicio, cocina, introspección, actividades placenteras) es clave para sostenerte en medio de la dificultad.

5. Revisar el tema de la medicación: entiendo tus reservas, y es legítimo decidirlo. Lo importante es que no lo veas como una imposición, sino como una herramienta más que puedes valorar o no en función de tu necesidad y de lo que acuerdes con los profesionales.

Has dado un paso muy valioso al buscar ayuda y expresarte. No tienes por qué cargar con todo en soledad: mereces sentirte escuchado, validado y acompañado en este proceso.

Un abrazo,

Elbire Arana
Psicóloga General Sanitaria
Colegiada M-42807
Encuentra un experto
 Yanina Parisi Faranna
Psicólogo
Girona
Gracias por compartir tu historia con tanta apertura y detalle. Se nota que tienes una enorme capacidad de introspección, claridad y fortaleza para poner en palabras todo lo que estás viviendo, algo que no es fácil de hacer. Lo que describes —el entorno familiar controlante, la falta de espacios propios, el clima de tensión, el ambiente laboral tóxico y la sensación de no ser escuchado ni valorado— puede generar una gran carga emocional, y es totalmente comprensible que estés sintiendo ansiedad, cansancio y frustración.
Quiero que sepas que en terapia podemos trabajar juntos sin presiones ni juicios, en un espacio donde puedas expresarte con libertad y encontrar estrategias para:

Gestionar la ansiedad y los efectos que este contexto tiene sobre tu bienestar emocional y físico.
Aprender a poner límites claros sin sentir culpa, fortaleciendo tu autonomía personal.
Entender y ordenar tus emociones para que puedas tomar decisiones más alineadas contigo y con tus objetivos.
Desarrollar herramientas prácticas que te ayuden a sostener tu independencia emocional en medio de un entorno complejo.
Respecto a tu inquietud sobre la medicación, es completamente respetable tu postura. Aquí no trabajamos desde la imposición; la idea es primero ayudarte a comprender lo que sientes, encontrar recursos internos y, solo si fuera necesario, evaluar opciones adicionales. El objetivo es que tengas el control sobre tu proceso.
Si te parece, podríamos agendar una primera sesión. Así podremos profundizar en lo que necesitas, ver cómo te puedo acompañar y diseñar un plan de trabajo adaptado a ti.
Si te resuena, dime qué horarios te vienen mejor y encontramos un espacio para ti.
Un abrazo,
Yanina Parisi (yaninaparisi@hotmail.com)
Psicóloga General Sanitaria — Colegiada nº 29425
Hola. Si lo he entendido bien, tienes el sueño de una vida propia construída a tu medida y con sensación de libertad, pero por ahora no te puedes permitir vivir sólo y lo haces con tus padres, con quienes sientes que no te escuchan y que te controlan. Así que creo que es muy comprensible que te sientas así, como si estuvieras atrapado en una vida que no quieres. Puede ser una buna idea trabajar sobre las cosas que más te molestan para cambiarlas, mientras vas mejorando tu situación (por ejemplo, que estés trabajando no impide que busques un trabajo mejor). Si quieres podemos hablarlo con calma para poder ayudarte. Gracias!
 Lorena Parrondo Mesa
Psicólogo
Cangas de Onis
Gracias por compartir tu historia con tanta sinceridad y detalle. Todo lo que describes refleja que eres una persona con una gran capacidad de introspección, fuerza de voluntad y un profundo deseo de mejorar tu vida. No es fácil crecer en un entorno tan controlador y poco validante, y además enfrentarse a un contexto laboral hostil, por lo que es normal que sientas ansiedad, frustración y la necesidad de desahogarte. El simple hecho de que hayas podido vivir un tiempo solo y comprobar que puedes sostener una vida tranquila y más saludable es una prueba clara de tus recursos y tu resiliencia.

Sé que ahora mismo puede parecer abrumador, pero hay algunas cosas que puedes empezar a hacer desde ya para aliviar un poco el peso que llevas:
- Escribir a diario tus pensamientos y emociones (aunque sea en pocas frases) para darles un espacio fuera de tu mente y poder verlos con más claridad.
- Practicar técnicas de relajación sencillas, como la respiración profunda (4 segundos inhalar, 6 exhalar) o meditación guiada, que pueden ayudarte a bajar la ansiedad en momentos de tensión.
- Poner pequeños límites realistas, por ejemplo, reservar un rato cada día solo para ti sin justificarlo a nadie, aunque sea para leer, cocinar o descansar.
- Enfocarte en actividades que ya sabes que te hacen bien (como cocinar o la moto), aunque empieces con pasos muy pequeños, para reconectar con esa sensación de libertad y calma que valoras tanto.
- Buscar apoyo externo seguro, ya sea un amigo de confianza o un grupo de apoyo, para no cargar todo únicamente dentro de casa.

Dicho esto, creo que lo que realmente puede marcar la diferencia es contar con un espacio terapéutico seguro, constante y sin juicios, donde puedas sentirte escuchado, validado y acompañado en este proceso. Una terapia puede ser ese punto de apoyo e inflexión desde el que empezar a trabajar lo que necesitas: autoestima, manejo de la rabia, ansiedad, poner límites claros y realistas, y empezar a construir el camino hacia la vida independiente que deseas.

Si lo deseas, puedo acompañarte en este proceso como terapeuta. Mi objetivo sería ofrecerte ese espacio donde puedas expresarte con libertad, sentirte comprendido y empezar poco a poco a transformar todo lo que ahora te pesa en recursos para crecer y avanzar. Un abarzo.
 Soraya Vivancos Montero
Psicólogo, Sexólogo
Madrid
Quiero que sepas que lo que sientes es completamente válido y lógico. Tu ansiedad, tu falta de ganas y tu agotamiento son respuestas normales a un entorno que constantemente te exige y te invalida. Es como si estuvieras intentando nadar contra una corriente muy fuerte y, aunque tienes las herramientas y la fuerza (tu introspección, tu fuerza de voluntad, tus logros), la situación te agota.

Lo que describes de tu familia no es simplemente una "mala dinámica", sino un patrón de comportamiento que ha minado tu bienestar durante años. La necesidad de control de tu padre y el ciclo de obsesión y victimización de tu madre han creado un ambiente donde no se respeta tu individualidad. La anulación que sientes cuando te dicen que "es su casa" es una forma de violencia psicológica que te priva de tu derecho a tener un espacio y una voz propios. Es lógico que te sientas como te sientes. La experiencia del mes que viviste solo te demostró de manera contundente que hay otra forma de vivir, una donde la calma y la paz son posibles.

Tu situación laboral es un reflejo de lo que vives en casa, un lugar donde tu esfuerzo no es valorado y donde tienes que luchar para que se respete tu integridad y tu sentido de la justicia. La baja por acoso laboral no es una debilidad, sino una consecuencia directa de un entorno tóxico que ha llevado al límite tu salud mental.

Un camino de validación y empoderamiento
Entiendo perfectamente tu postura sobre la medicación y tu deseo de encontrar un espacio terapéutico donde puedas trabajar tus emociones y fortalecer tus herramientas internas. Tu conocimiento de conceptos como la PNL y la TCC te da una base sólida para el trabajo terapéutico. No necesitas que te digan qué hacer, sino un lugar seguro donde puedas ser escuchado, validado y acompañado.

Tienes una gran claridad sobre tus metas y sueños. La imagen de esa casa con jardín, la moto, la pareja y el husky es un faro que te guía. No es un sueño, es tu necesidad de encontrar un lugar donde puedas ser tú mismo sin condiciones, donde tus valores de respeto, honestidad y lealtad sean correspondidos.

Aquí no se trata de "arreglarte" con medicamentos, sino de trabajar en lo que ya sabes que funciona para ti:

Validar tus sentimientos: Sentirte escuchado y respetado es lo que necesitas. Un espacio terapéutico te permitirá darte a ti mismo ese permiso.

Fortalecer tus herramientas: Ya tienes una gran capacidad de introspección. Ahora, es el momento de usarla para construir nuevas formas de relacionarte con tu entorno, sin perder tu esencia.

Prepararte para el cambio: Tu objetivo de tener tu propio espacio y crear tu propia vida es la solución a largo plazo. La terapia puede darte las herramientas para sostener tu salud mental mientras trabajas en lograrlo.
Gracias por compartir tu experiencia con tanta claridad y detalle. Se nota que tienes una gran capacidad de introspección y de poner en palabras lo que sientes y piensas. Al mismo tiempo, también reflejas mucho malestar por tu entorno familiar, laboral y personal, que parece afectarte de manera continua.

Lo que describes no son problemas puntuales, sino un conjunto de situaciones que te hacen sentir invalidado, sin espacio propio y con ansiedad casi constante. Es comprensible que, aunque hayas desarrollado recursos para sobrellevarlo, sientas que necesitas un acompañamiento más profundo.

Coincido contigo en que la medicación no siempre es la primera opción. En tu caso, parece fundamental un espacio terapéutico donde puedas expresarte libremente, trabajar la gestión emocional, fortalecer tu autoestima y encontrar estrategias para manejar mejor la convivencia familiar y el contexto laboral.

Por la complejidad de lo que compartes, lo más recomendable es un proceso continuado de psicoterapia, adaptado a tu situación. Te invito a que cojas cita conmigo para que podamos trabajar todo esto de manera estructurada, con un plan personalizado y con el tiempo que necesitas para sentirte realmente escuchado y acompañado.
 Catalina Navas Sanchez-Vizcaino
Psicólogo, Psicólogo infantil
Madrid
Lo que cuentas muestra cuánto has reflexionado sobre ti mismo y cuánto esfuerzo has puesto en sostenerte en un contexto familiar y laboral que te resulta difícil. Esa capacidad de introspección y de voluntad que mencionas puede ser un gran recurso para ti.
Aun así, se percibe el peso que tienen las dinámicas familiares y laborales sobre tu vida emocional. Donald Winnicott señalaba que “no hay salud mental sin la experiencia de un ambiente que sostenga”. Cuando ese sostén falla, el sujeto puede sentirse constantemente en lucha para defender su propio lugar.
Un espacio terapéutico puede ofrecerte la escucha que sientes que te falta, permitiéndote poner en palabras lo que vives y encontrar modos propios de sostener tu deseo, sin la necesidad de cargar solo con todo.
Hola amigo, tienes una situación muy complicada. Sólo te voy a hacer una puntualización: estando de baja, el psiquiatra te manda una medicación, y tu debes de sacarla de la farmacia, aunque no la tomes. Porque si no la sacas, te pueden dar el alta y volverías a esa situación de moving laboral.
Si no quieres no las tomes, pero no tires piedras contra tu propio tejado. Es sólo un consejo. Te mando un abrazo y piensa que si tienes las cosas tan claras, habrá un momento en que consigas tus mestas.
Entiendo tu situación: vives en un entorno familiar y laboral muy invalidante, lo que naturalmente genera ansiedad y desgaste. Aun así, muestras gran fuerza, introspección y claridad, que son tus mayores recursos. Más que medicación, necesitas un espacio terapéutico constante donde ser escuchado y trabajar límites, emociones y estrategias de afrontamiento. No eres el caos de tu entorno: eres alguien con valores y objetivos claros.
Dolo Boix
Psicóloga · CV18993
 Laura Romero
Psicólogo
Huelva
Lo que cuentas refleja el desgaste de vivir en un entorno familiar invalidante y en un trabajo tóxico, lo que explica tus niveles de ansiedad y la sensación de no tener espacio propio. Es importante que busques un espacio terapéutico estable donde puedas expresarte con libertad, trabajar tus emociones y aprender a poner límites claros. Un psicólogo clínico puede ayudarte con técnicas concretas para manejar la ansiedad y fortalecer tu autoestima, y si lo deseas también valorar junto a un psiquiatra si hace falta alguna otra intervención. No estás solo en esto: con apoyo profesional y estrategias prácticas es posible recuperar tu bienestar y avanzar hacia tus objetivos personales.
 David García Díaz
Psicólogo
Castellón de la Plana
Hola,

Gracias por confiar en mí y abrirte con tanta sinceridad. Todo lo que compartes muestra una enorme capacidad de introspección y un nivel de autoconciencia poco común. Has hecho un trabajo muy profundo de análisis de ti mismo y de tus circunstancias, y eso ya es un paso muy significativo hacia tu propio bienestar.

Entiendo perfectamente el desgaste emocional que supone vivir en un entorno tan controlador y poco empático, donde no sientes espacio para expresarte libremente. Es normal que eso te genere ansiedad, frustración y sensación de invalidez constante. Lo que describes no son simples discusiones familiares, sino un contexto que vulnera tu autonomía emocional y personal. Es lógico que, cuando viviste solo, sintieras alivio y equilibrio: eso te dio una referencia clara de lo que es la calma y la seguridad emocional, y demuestra que tienes recursos y capacidad para construir un entorno sano cuando se dan las condiciones adecuadas.

También comprendo tu desconfianza hacia la medicación; querer trabajar desde un espacio terapéutico de expresión y autoconocimiento es una elección totalmente válida. A veces lo más importante no es “anestesiar” el malestar, sino comprender su raíz y aprender a manejarlo. Has desarrollado mecanismos de reflexión, voluntad y pensamiento crítico muy sólidos, pero ahora mismo lo que más necesitas no es sostenerlo todo tú solo, sino un espacio donde puedas liberar la carga, poner orden a lo que vives y sentirte acompañado de forma estable.

La combinación de un entorno familiar invalidante y un contexto laboral tóxico puede agotar incluso a las personas más fuertes. Por eso, más que “resistir”, lo importante ahora es sanar, recuperar el equilibrio emocional y reconstruir una base sólida desde la que tomar decisiones.

Si te parece, podríamos trabajar juntos en este proceso, paso a paso: ayudándote a manejar la ansiedad que te genera el ambiente familiar, establecer límites internos más protectores, y fortalecer tu sentido de valía y dirección vital. No estás solo en esto; con acompañamiento psicológico y el enfoque adecuado, es posible encontrar claridad y estabilidad incluso en situaciones tan complejas como la tuya.

Un saludo,
David
 Rosario Crespín
Psicólogo
El Vendrell
Hola, por lo que explicas necesitas flexibilizar un poco tus creencias que parecen ser estar demasiado estructuradas, de esta manera conseguiremos que la interacción con el entorno, tanto personal como laboral sea más positiva para ti y te produzca emociones satisfactorias.
Por lo que explicas no creo que sea complicado puesto que presentas un buen autoconocimiento. Sin conocerte no puedo especificarte nada más pues me arriesgaría sin tener la suficiente información.
Te propongo que acudas a una terapia cognitivo-conductual, espero haberte podido ayudar.
Un saludo.

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