Hola siento que algo estoy haciendo mal no es que me sienta culpable sino que lo he reflexionado y y

11 respuestas
Hola siento que algo estoy haciendo mal no es que me sienta culpable sino que lo he reflexionado y ya es la segunda vez que me sucede que me gusta un chico demasiado demasiado hasta el punto de decirle que me gusta que me atrae y que es una persona súper valiosa para mí a raíz de esto me he dado cuenta que o pierden el interés hacia mi persona o sencillamente no tiene nada conmigo esto me hace sentir no digamos mal porque me apetece decirlo y sería peor guardarmelo y no y no decirlo guarda la redundancia pero sé que estoy fallando en algo pero no sé en qué porque ella es la segunda vez que me sucede y luego por lo menos en el primer caso cuando le dije que estaba enamorada de él que me había enamorado y que todo lo que yo le había demostrado era cierto pero que ya el interés se había perdido obviamente pues ahora soy amiga de él pero no tenemos nada ese fue del primer chico pero con el segundo vamos por el mismo camino no sé qué hacer porque no quiero que me suceda más antes era muy callada muy introvertida y nunca decía si alguien me gustaba o no solo sé que de pronto esas personas se acercaban a mí pero sencillamente para también una relación que no vale la pena que a la final terminaría en romperse y no seguir adelante juntos todos me pone de cabezas y siento que quiero mejorar por eso te escribo quería saber en qué me puedes ayudar Saludos
Gracias por confiar en mí y abrirte con tanta honestidad. Lo que estás viviendo no es un error ni una falla de tu parte, sino una gran oportunidad de autoconocimiento. Desde la mirada de la bioneuroemoción ®, lo que vivimos en nuestras relaciones actuales muchas veces refleja memorias emocionales no resueltas del pasado, especialmente de nuestra infancia o del sistema familiar al que pertenecemos.
Es muy valioso que hoy puedas expresarte, ya que antes eras callada e introvertida. Esto es una evolución, un avance. Ahora bien, lo que podríamos explorar juntas es qué creencia inconsciente puede haber detrás de esta necesidad tan intensa de demostrar amor o de expresar lo que sientes con tanta fuerza.
A veces, cuando sentimos que debemos “demostrar” cuánto vale el otro o cuánto nos gusta, puede haber detrás una herida emocional de no haber sido suficientemente vistas, valoradas o correspondidas en el pasado, y que se activa con fuerza en relaciones donde hay mucho deseo o expectativa.
Te propongo que, juntas, revisemos:
-¿Cuál era el rol que asumías en tu familia cuando querías sentirte amada o reconocida?
-¿A quién necesitabas demostrarle que valías?
-¿Qué aprendiste sobre el amor y sobre lo que hay que hacer para recibir atención o afecto?
No estás haciendo nada "mal", pero sí estás repitiendo un patrón que se puede comprender, liberar y transformar. Cuando sanamos la raíz emocional, comenzamos a vincularnos desde otro lugar, sin tanta urgencia ni miedo a perder.
Estoy aquí para acompañarte a mirar eso con profundidad, sin juicio, y con mucho respeto por tu historia.
Un saludo
Encuentra un experto
 Mary Marchante
Psicólogo
Madrid
Hola, gracias por abrirte con tanta honestidad. Lo que estás sintiendo es más común de lo que crees, y además habla de algo muy valioso en ti: te atreves a ser auténtica, a mostrar tu interés, a reconocer lo que sientes y expresarlo. Eso no es un fallo, es un acto de valentía.

Entiendo que estés frustrada al ver que, cuando das ese paso, las cosas no salen como esperabas. Y claro, eso hace que empieces a dudar de ti, como si hubiese algo que estás haciendo mal. Pero quiero invitarte a ver esto desde otra perspectiva: mostrar lo que sientes no está mal, lo que pasa es que no siempre la otra persona está en el mismo lugar emocional que tú.

Y eso no tiene que ver con que tú valgas más o menos, ni con que estés "fallando". A veces, cuando sentimos una conexión muy intensa con alguien, podemos ir muy rápido emocionalmente, mientras que la otra persona puede necesitar más tiempo, espacio o sencillamente no estar buscando lo mismo.

Hay algo que podrías observar (sin juicio): ¿cuánto te implicas emocionalmente antes de saber si esa persona también está dispuesta a ofrecer lo mismo? Porque cuando nos damos por completo sin tener ciertos mínimos de reciprocidad, a veces terminamos desgastándonos o sintiéndonos rechazadas, aunque lo hayamos hecho con la mejor de las intenciones.

Otra pregunta que puede ayudarte es:
¿Estoy intentando que esta persona vea lo valiosa que soy, o estoy compartiéndome desde un lugar en el que yo ya sé que lo soy, con o sin su respuesta?

No se trata de callarte lo que sientes, sino de aprender a regular los tiempos, cuidar tu salud mental, y sobre todo, asegurarte de que tú también estás recibiendo lo que necesitas.

Estoy aquí para acompañarte en eso, si lo necesitas.
Un abrazo enorme.


Hola, gracias por escribirme y abrirte con tanta honestidad.

Lo que estás sintiendo tiene todo el sentido del mundo. Estás en un punto donde las relaciones te remueven, te generan dudas, a veces incluso te hacen sentir que todo se pone de cabeza… y, al mismo tiempo, tienes ese impulso genuino de querer mejorar, de entenderte mejor, de no repetir las mismas historias una y otra vez. Esa combinación —malestar y deseo de cambio— es exactamente el lugar desde donde empieza un proceso terapéutico real.

Muchas veces, cuando las relaciones nos duelen o sentimos que no avanzan, no es porque estemos rotos, sino porque arrastramos patrones invisibles que hemos aprendido, muchas veces sin darnos cuenta, desde muy temprano. Cosas que nos marcaron, que se grabaron en nuestra forma de querer, de protegernos, de alejarnos, de elegir a quién dejamos entrar… y a quién no. Y todo eso, cuando se vuelve inconsciente, puede llevarnos a repetir vínculos que no nos hacen bien, o a alejarnos incluso de quienes sí nos podrían cuidar de verdad.

En terapia no se trata de juzgarte ni de decirte lo que tienes que hacer. Se trata de entender de dónde viene lo que sientes, por qué te pasa lo que te pasa, y qué podrías hacer diferente para cuidarte mejor. Te propongo un espacio seguro, sin juicios, donde puedas ir desenredando todo esto con calma, desde la raíz, y sobre todo desde el respeto por tu historia y tu ritmo.

Si sientes que algo de esto te resuena, estaré encantado de acompañarte. Empezar terapia puede dar vértigo, pero es una de las decisiones más valientes y transformadoras que uno puede tomar. Aquí estoy, si te animas a dar ese primer paso.

Un abrazo,
Claudio Rodal
Psicólogo (Col. 27074)
Sesiones presenciales y online

 Elena Avilés Díaz
Psicólogo, Psicólogo infantil
Badajoz
Buenas tardes. Parece que tienes alguna herida de abandono, además de una indefensión de aprendida, es decir, tienes miedo de lo que te ha ocurrido en un momento y que esto vuelva a repetirse. Lo primero, en ti no hay nada malo, la expresión emocional es muy buena, sacar todo lo que tenemos dentro, si la otra persona no es lo suficientemente madura para aceptar lo que tú sientes y no desparecer, con eso no podemos hacer nada. Pero esa reacción no depende de ti, por lo cual, tú no estás haciendo nada mal. Creo que deberías trabajar la autoestima para crecer como persona y obtener una mayor confianza en ti misma. Espero haberte ayudado. Un abrazo.
Hola, gracias por escribir y por abrir con tanta sinceridad lo que estás sintiendo. Es muy valiente de tu parte permitirte mirar hacia adentro, hacerte preguntas y buscar comprender qué está ocurriendo en estas experiencias que te remueven tanto.

Lo primero que quiero decirte es que no estás haciendo nada mal por expresar lo que sientes. Al contrario, poder poner en palabras el afecto, la atracción o el valor que alguien tiene para ti es un acto de autenticidad y conexión contigo misma. Y eso no es un error, aunque a veces el resultado no sea el que esperábamos.

Entiendo que, al repetir una experiencia donde sientes que al mostrar tu interés las personas se alejan, surja la sensación de que algo estás fallando. Pero en realidad, este patrón puede estar hablándote de algo más profundo: de tus propias necesidades emocionales, de cómo te vinculas con el otro, de cómo manejás la incertidumbre del amor y del deseo de reciprocidad. No se trata de cambiar quién sos, ni de reprimir lo que sentís, sino de entender desde dónde estás entregándote, qué expectativas se ponen en juego, y cómo te cuidás emocionalmente en esos momentos de vulnerabilidad.

A veces, cuando venimos de ser muy reservadas o de tener miedo a mostrarnos, damos un gran salto hacia la expresión emocional sin aún haber construido las bases de seguridad internas. Eso puede hacer que quedemos muy expuestas emocionalmente, y que las respuestas del otro —cuando no son las que esperábamos— nos hagan sentir vacías, confundidas o incluso heridas.

Podemos trabajar juntas para ayudarte a fortalecer esos cimientos: comprender tu forma de vincularte, tus tiempos, tus deseos, y aprender a expresar lo que sentís desde un lugar que también te contenga a vos misma, no solo al otro. El amor empieza por ahí: por sostenernos internamente mientras vamos abriendo espacio al otro sin dejarnos caer si no nos responde como quisiéramos.

Gracias lanzar estas preguntas. Estoy aquí para acompañarte si decidís iniciar ese camino de autoconocimiento y crecimiento.

Con cariño,
Laura Torreblanca
 Daniel Popa
Psicólogo
Figueres
Hola, persona anónima! Asumo que eres una mujer heterosexual por estadística, si no es así corrígeme. Si tienes interés amoroso hacia un hombre, lo primero que debes empezar a hacer es actualizar tu sistema de creencias sobre la realidad de las relaciones, el amor y la atracción, porque si no entiendes algunas bases es normal que te sientas perdida, sería como tratar de leer un libro en un idioma que no conoces. Hay algunos pilares básicos fundamentales, tales como que los hombres suelen dar mucha más importancia al aspecto físico de una mujer a la hora de sentir y decidir si mantener una relación más íntima con ella (sobretodo al principio), la liga de atractivo en la que te encuentras tú y se encuentra él, y algunas cositas más que vas a tener que aprender para tener "algo que hacer al respecto". Está muy bien lo que comentas de declararte para no guardártelo, pero no es lo más relevante que está fallando aquí, por lo que puedo inferir a partir de lo que has escrito. Te estás focalizando mucho en aquello que tú sientes (lo cual está muy bien, ya que te va a permitir tratarlo por tu cuenta), pero una vez hayas resuelto tus dificultades emocionales, tendrás que empezar a focalizar en lo que el hombre (o los hombres, o las personas) que te atraen necesitan de tí para sentirse atraídos también, sino estarás intentando pescar usando caramelos como cebos.

Si quieres profundizar en ello, no dudes en contactarme! Un saludo y un abrazo para tí!
Buenas, consultante anónima. Hay muchos motivos que pueden hacer que una persona le guste o no otra. Sin embargo, teniendo en cuenta lo último que has dicho, que antes eras muy callada e introvertida. ¿Cómo te ves ahora? crees que te ves mostrando y expresando distintos niveles de cariño, de comunicación en distintos momentos y con distintas personas? Si no es el caso, es posible que la gente no esté acostumbrada a ello y quizá eso les choca. Te recomiendo empezar por aumentar las distintas formas de expresar cariño y atención, así la gente puede sentirse más conectada a tí.
Hola,
Gracias por abrirte con tanta sinceridad. Lo que describes refleja una necesidad muy humana: conectar desde lo auténtico y sentirte correspondida. No estás haciendo nada “mal” por expresar lo que sientes; al contrario, hablar desde la verdad personal es valioso y demuestra coraje. Aun así, entiendo que te sientas confundida o frustrada cuando tus sentimientos no son recibidos como esperabas.

A veces, el deseo de vincularnos puede hacer que proyectemos muchas expectativas en una relación incipiente, sin haber tenido el tiempo suficiente para construir un vínculo recíproco y sólido. Esto no significa que haya algo “malo” en ti, sino que quizá sería útil revisar cómo te estás relacionando y qué esperas del otro cuando compartes lo que sientes.

Trabajar en este tipo de vivencias puede ayudarte a comprender mejor tus necesidades afectivas, tus tiempos emocionales y cómo crear vínculos más equilibrados. Si lo deseas, podríamos abordarlo juntas en un proceso terapéutico. No estás sola en esto.

Un saludo.
Hola buenas. Entiendo tu situación, ahora mismo no lo estás pasando bien con este asunto. Yo mismo he pasado por algo así alguna vez en mi vida (empezando por las cartas del día de enamorados en primaria). Es posible que tu propia experiencia te esté enseñando qué funciona y qué no, y puedas considerar cada ocasión como una oportunidad de aprendizaje. Tal vez sea interesante reconocer/discriminar en qué situaciones y con qué personas podemos declarar abiertamente esos sentimientos, para qué lo hacemos, y qué efecto tiene; partiendo de la base de que es imposible no comunicar, ya que continuamente estamos comunicando de forma no verbal con miradas, gestos, o acciones públicamente observables. En tu caso sería interesante llevar a cabo un análisis funcional de la situación y mirar en detalle cómo te relacionas con lo que emerge (sensaciones, pensamientos, emociones) en esa situación, para qué llevas a cabo esa muestra afectiva (qué es esa urgencia por transmitir abiertamente algo que ya estás mostrando en parte de forma no verbal, y ver qué pasa cuando no lo haces), si te está siendo útil o no (si te acerca o te aleja de lo que quieres, qué obtienes después), qué te dice tu mente/coherencia y qué te dice tu experiencia… Por otro lado, sería de interés explorar cómo concibes las relaciones, por ejemplo qué hace que una relación “valga la pena”; y sobre qué tienes capacidad de control, y sobre lo que no. Espero haberte ayudado, un saludo.
Hola. Gracias por escribir. Me parece valiente y muy valioso que te atrevas a hablar de lo que te pasa y de lo que sientes. Eso ya es un paso enorme. Enhorabuena.

Me cuentas que has empezado a expresar lo que sientes hacia chicos que te gustan mucho, y que tras decirles lo importantes que son para ti, ellos se alejan o pierden el interés. Y aunque sientes que decirlo es mejor que callarlo, al final te quedas con una sensación de haber hecho algo mal. Es normal que eso te remueva por dentro.

Vamos a pensarlo juntas, desde el análisis de la conducta. Tú no estás haciendo algo mal. Estás haciendo algo que tiene sentido en función de tu historia de aprendizaje. Antes eras más callada, más introvertida, quizás como una forma de protegerte del rechazo. Ahora has aprendido a expresarte más. Y eso es valioso. El problema no está en que digas lo que sientes. El problema es cómo lo estás viviendo después.

Tú expresas amor, afecto, admiración... esperando también sentirte valiosa, sentirte querida, tener una relación que funcione. Pero si no obtienes esa respuesta que esperas, entonces interpretas que algo hiciste mal. Ahí es donde hay que poner la lupa: no en el hecho de expresarte, sino en la expectativa que se genera después.

Te hago una pregunta importante, como haría en consulta:

¿Para qué le dices a ese chico que te gusta? ¿Qué crees o esperas que ocurra después?

Porque si lo haces para sentirte libre y honesta, genial. Pero si lo haces esperando que eso garantice que él se quede, que te quiera, que tenga una relación contigo… entonces el problema no es decirlo, sino el valor que le das a su respuesta. Y ahí entramos en un terreno importante: el de tu autoestima.

Tú vales mucho, lo digas o no lo digas. Que alguien se quede o no, no cambia eso. No podemos usar el amor del otro como medida de nuestro valor. Porque entonces, cada rechazo nos hace tambalear.

Además, fíjate en algo: antes no decías nada, y te dolía no expresarte. Ahora lo haces, y duele cuando no sale como esperas. Pero eso no significa que estés fallando. Significa que estás aprendiendo. Y aprender duele. Pero también te hace crecer.

No se trata de dejar de decir lo que sientes, ni de hablar menos, ni de “gustar menos” para no asustar. Se trata de entender qué esperas cuando lo haces y cómo puedes cuidarte tú, incluso cuando la otra persona no responde como deseas.

Así que lo primero: enhorabuena por atreverte. Lo segundo: no estás haciendo nada mal. Estás aprendiendo a relacionarte desde un lugar más auténtico. Y eso lleva tiempo. Y lo tercero: si algo te duele, no significa que haya que dejar de hacerlo. Quizá haya que hacerlo diferente, con más conciencia y menos miedo.

Espero que esto te haya servido para ver un camino, donde puedes descubrir mucho más sobre tí, sobre todo lo que te está pasando. Si consideras valioso plantearte de qué manera te gustaría relacionarte contigo misma y con las personas que son importantes para tí, te animo a dar el paso de comenzar un proceso de terapia.

¡Un saludo!
Hola, lo primero gracias por compartir tu situación ya que puede ayudar a otras personas que atraviesen una situación parecida.
Expresar lo que te gusta de alguien y ser transparente es un acto valiente y auténtico. Para nada es un error. Es más, muchas personas pasan años reprimiendo emociones y luego se sienten frustradas por no haberlas dicho. Entonces, no te castigues por ser clara con tus sentimientos.
Quizá lo que puedes mejorar para futuras ocasiones, ya que lo mas importante es aprender de lo vivido.

1. Cuando damos mucho muy rápido, el otro puede sentirse abrumado.
Expresar afecto es bueno, pero si alguien aún no ha desarrollado sentimientos profundos, un mensaje muy intenso puede hacerle sentir presión. No porque no les gustes, sino porque no están al mismo ritmo emocional.

2. Confundimos conexión con compatibilidad.
Puedes sentir una conexión fuerte (atracción, admiración), pero eso no siempre significa que hay compatibilidad para una relación. Y eso no es culpa tuya.

3. Quizás estás buscando validación más que reciprocidad.
Sin darte cuenta, puede que estés tratando de llenar un vacío de reconocimiento, buscando que el otro responda a lo que tú das, en lugar de ver si hay un espacio mutuo de interés y compromiso.
Es necesario que conectes contigo e identifiques que necesites en esta área afectiva: ¿Qué estoy buscando en una relación? ¿Estoy entregándome por miedo a no ser elegida?
Fortalece tu autoestima afectiva. Cuando te valoras a ti misma, no necesitas confirmar tu valía con lo que el otro te devuelve.
Espero haberte aclarado algo tus dudas
Soraya

¿No has encontrado la respuesta que necesitabas? ¡Envía tu pregunta!

  • Tu pregunta se publicará de forma anónima.
  • Intenta que tu consulta médica sea clara y breve.
  • La pregunta irá dirigida a todos los especialistas de Doctoralia, no a uno específico.
  • Este servicio no sustituye a una consulta con un profesional de la salud. Si tienes un problema o una urgencia, acude a tu médico o a los servicios de urgencia.
  • No se permiten preguntas sobre casos específicos o segundas opiniones.
  • Por cuestiones de salud, no se publicarán cantidades ni dosis de medicamentos.

Este valor es demasiado corto. Debe contener __LIMIT__ o más caracteres.


Elige la especialidad de los médicos a los que quieres preguntar
Lo utilizaremos para notificarte la respuesta (en ningún momento aparecerá en Doctoralia)

¿Tu caso es similar? Estos profesionales pueden ayudarte:

Todos los contenidos publicados en Doctoralia, especialmente preguntas y respuestas, son de carácter informativo y en ningún caso deben considerarse un sustituto de un asesoramiento médico.