Sigo teniendo mucha desconfianza hacia los hombres, por eso no he querido tener una relación. Los ho

Gracias por compartir algo tan profundo. Es completamente comprensible que, después de lo que has vivido y lo que has visto en tu historia familiar, surjan temores tan intensos.

Tu desconfianza no es un error, sino una señal de que estás tratando de protegerte de más dolor. El miedo a repetir patrones y a perderte a ti misma en una relación es válido, especialmente si sientes que tu salud mental es vulnerable. Sin embargo, también es importante reconocer que no estás condenada a repetir la historia familiar. Tomar consciencia, como ya lo estás haciendo, es el primer paso para romper con esa cadena.

Las relaciones sanas existen, aunque a veces parezcan escasas. Tal vez ahora no se trata de buscar una relación, sino de seguir fortaleciéndote a ti misma, cuidando tu bienestar emocional y aprendiendo a confiar de forma segura y progresiva. No estás sola en esto, y tus miedos pueden ser escuchados, entendidos y transformados con el tiempo.

Estoy aquí si quieres seguir explorando esto juntas.

Hola.
Gracias por compartir algo tan íntimo. Lo que expresas no solo es comprensible, sino profundamente legítimo. Cuando has crecido viendo a las mujeres de tu familia sufrir en sus relaciones, es normal que se active una alarma interna. No estás loca. No eres exagerada. Estás protegiéndote.

Desconfiar no es un defecto, es una defensa. Una defensa que seguramente aprendiste como forma de supervivencia emocional. Y si, además, has vivido o visto casos de engaño, abandono o maltrato, es lógico que tu sistema afectivo esté en estado de alerta permanente. Tu cuerpo, tu mente y tus emociones han asociado el amor con el daño. Y desde ahí es difícil (y doloroso) entregarse.

También estás diciendo algo muy valiente: “no quiero alargar mi cadena intergeneracional”. Eso implica una conciencia que no muchas personas tienen. Estás detectando el patrón y, sobre todo, estás intentando romperlo. Eso no se hace de un día para otro, pero ese primer paso —el de nombrarlo— es fundamental.

El miedo a ser abandonada o a perder tu autoestima en una relación habla de una herida profunda que no tiene tanto que ver con los hombres en sí, sino con lo que representaría perderte a ti misma dentro de un vínculo. Y ahí está la clave: fortalecer tu identidad y tu amor propio hasta que ninguna relación tenga el poder de desestabilizarte.

Y sí, vivimos en una época difícil para los vínculos afectivos. La inmediatez, las redes sociales, la falta de profundidad... todo eso afecta. Pero también es cierto que hay personas maduras, honestas y emocionalmente disponibles. Aunque parezcan pocas, existen. Lo importante es que tú puedas reconocerte merecedora de una relación sana, sin tener que conformarte ni traicionarte para no estar sola.

Tu elección de no iniciar una relación por el momento es totalmente válida. De hecho, demuestra mucho autoconocimiento. Mejor sola que mal acompañada, sin duda. Pero también puede ser “mejor sola, mientras me acompaño bien a mí misma”. Y eso es lo que puede marcar la diferencia.

Tal vez sea momento de trabajar no tanto en encontrar a alguien, sino en confiar en ti. En tu intuición, en tus límites, en tu capacidad de decir “esto no me hace bien” y marcharte a tiempo. Cuando una mujer se reencuentra con su fuerza interna, cambia todo: lo que elige, lo que permite y lo que construye.

Gracias de nuevo por tu valentía. Estás despierta, y ese es siempre el primer paso hacia una historia distinta.

Un abrazo

Laura Torreblanca

Gracias por compartir algo tan íntimo.
Es completamente comprensible que sientas desconfianza hacia los hombres y temor a repetir patrones dolorosos que has visto en tu historia familiar; tu mente está intentando protegerte de experiencias que podrían lastimarte profundamente, y eso habla de tu conciencia y tu sensibilidad. Sin embargo, vivir desde el miedo puede impedirte explorar vínculos sanos que SÍ SON POSIBLES, aunque más difíciles de encontrar. Es válido elegir la soledad si así preservas tu bienestar, pero también es importante recordar que no estás condenada a repetir el pasado: tu lucidez emocional, tu capacidad de poner límites y tu trabajo interno son herramientas que pueden ayudarte a construir algo distinto, si en algún momento decides abrirte a ello.

Espero que mi respuesta te haya sido útil.

Buenos días. Tener pareja o no tenerla son dos opciones legítimas. Nadie está obligada a tener pareja, faltaría más. La cuestión es si no tienes pareja porque crees que no hace falta en tu vida, o si no la tienes porque te da miedo aunque te gustaría. Si tu situación es la segunda, es importante tener claro que tu relación con los demás es la misma relación que tienes contigo misma. Puedes desarrollar una imagen de ti misma como una mujer que no permitirá faltas de respeto, y actuar en consecuencia. Deasrrollarlo por aquí sería muy largo, y no se puede hacer sin un trabajo previo de autoconocimiento, pero si quieres tener pareja, podemos empezar con una primera visita conmigo. Si no quieres pero, de todos modos, te gustaría sentirte mejor contigo misma, también podemos hablarlo porque las faltas de respeto pueden venir de otras personas que no son tu pareja. Gracias por tu confianza al explicar este problema aquí!

Gracias por compartir algo tan profundo y sensible. Lo que expresas refleja un dilema muy real que atraviesan muchas personas hoy en día: el deseo de conectar con alguien desde un lugar sano, y al mismo tiempo el miedo legítimo de volver a sufrir, especialmente cuando hay una historia familiar que deja huella.

Lo que sientes no es exagerado ni irracional: cuando hemos visto de cerca relaciones dañinas —en tu caso, mujeres de tu familia que han vivido engaños, desvalorización o abuso— es natural que tu mente quiera protegerte del dolor repitiendo una consigna clara: “mejor sola que mal acompañada”. Y en muchos casos, esa decisión es válida y sabia. Cuidarte no es cerrar el corazón, es no dejar que te lo rompan sin conciencia.

Dicho esto, también percibo que no estás hablando solo de miedo, sino también de dolor y deseo: el dolor de lo vivido (propio o heredado) y el deseo de que las cosas puedan ser diferentes.

Tu reflexión es muy lúcida: estás identificando cómo la experiencia intergeneracional, la presión de lo social (como las redes), y tu propia vulnerabilidad emocional se entrelazan y te hacen dudar. Eso no te hace débil: te hace consciente.

Quizás, más que buscar ahora una relación o evitarla, lo más importante sea trabajar en terapia aspectos como:

1. La reparación del vínculo interno contigo misma, para que no pongas tu autoestima en manos de nadie.

2. La revisión de creencias heredadas y experiencias pasadas, que aún influyen en cómo ves a los demás (especialmente a los hombres) y el amor.

3. La construcción de límites, confianza y discernimiento, para poder relacionarte sin dejar de cuidarte.

Nadie puede prometerte que no habrá dolor, pero sí puedes fortalecer tu mundo interno para que, si decides compartirte con alguien, lo hagas desde un lugar sólido, libre y sin miedo a perderte a ti misma.

Te envío un abrazo y mucho ánimo en tu proceso. El simple hecho de hacerte estas preguntas ya es un acto profundo de autoconocimiento.

Es importante la decisión que tomes respecto a una relación. Veo que tienes claro el tipo de hombre que no quieres, pero te has de centrar en el tipo de hombre que quieres. Supongo que tienes miedo a ser engañada y eso viene por lo que manifiestas de los acontecimientos de la cadena intergeneracional femenina. Es común pensar que lo que en un principio puede ser una buena relación acabe mal. Hombres nobles y fieles los hay, pero no suelen estar en las redes sociales. Lógicamente si no encuentras a la persona que buscas mejor esperar, pero el estar sola ha de ser una decisión tomada por ti y no una resignación, pues esto te hará sentir mal. Creo que sería bueno que intentaras centrarte en la persona con la que quieres tener una relación y esperar que aparezca. En la búsqueda has de tener claras tus líneas rojas que no permites que se crucen y rechazar a aquellos que no te convencen. Es una tarea complicada pero tu decides. Espero que puedas encontrar a quien buscas.

Buenas;
Haces mención de un dilema, no sé si te refieres a estar sola o buscar pareja.
Yo también opino que más vale estar sola (single) que mal acompañada, pero también se puede estar bien acompañada.
Simplemente busca/encuentra y elige lo que deseas, a eso, nadie te lo impide, pero en general en la vida. Si no se puede crear lo que uno desea, dentro de lo que hay,elegimos o hacemos lo mejor que podamos.
Yo percibo que probablemente tu miedo es que " aparezca" alguien a quien tú consideras "mejor que tú" mientras estés en una relación y que con ello,bru pareja te deje y se vaya con esa persona.
No hay personas mejores que otras y la razón del porqué una persona decida estar con una persona y no otra no es porque sea mejor sino porque está mejor con ella....
Probablemente tengas una autoestima baja y quizás el principal problema sea esto y no como sean los demás.
Si algo no funciona, se deja. Quizás tu principal dificultad es la creencia de que si sales o eliges a alguien para salir con él no debe salir mal. Cual sería el problema de terminar con algo que no conviene?. Eso es por lo que creo que primero seria conveniente empezar. Y el mundo que sea como sea. Saludos.

Esta claro que te mueves en un contexto donde sólo hay hombres que buscan relaciones superficiales y poco duraderas, este perfil de hombres son los que nombras en tu pregunta, veo que los tienes bien identificados, además me parece una postura inteligente por tu parte desconfiar de este perfil de hombres si lo que quieres es una relación madura y responsable. Te recomiendo que cambies de contexto o lugares para conocer otro tipo de hombre que te tomen en serio y que se comprometan al tipo de relación que tu deseas.

Gracias por compartir algo tan íntimo y tan profundamente sentido. Lo que expresas no es solo un dilema, sino un cúmulo de vivencias, temores y aprendizajes que han ido dejando huella en tu forma de ver las relaciones.

Primero quiero decirte que es completamente válido tener miedo. Cuando has crecido viendo relaciones que te generan inseguridad o dolor, es natural que desarrolles un mecanismo de autoprotección, como puede ser la desconfianza o la decisión de no vincularte. No hay nada de malo en cuidarte.

También es comprensible que, viendo el panorama actual, con experiencias de otras mujeres cercanas y el reflejo distorsionado de las redes sociales, te cueste creer que una relación sana es posible. Pero eso no significa que no exista. No todas las relaciones acaban mal ni todos los hombres son como los que temes. Lo que sucede es que cuando estamos heridas o alertas, el foco se va a los peligros, no a las posibilidades.

Me gustaría que pudieras hacerte una pregunta en voz baja y sincera:
¿Es esto una decisión basada en lo que realmente quiero, o en lo que temo?
Porque a veces el deseo de amor y compañía se ve eclipsado por el miedo.
Y si sientes que ese miedo manda, entonces puede ser un buen momento para trabajarlo. No para obligarte a tener pareja, sino para liberarte del peso de los fantasmas heredados, de la desconfianza que te limita y de la idea de que una relación solo puede dañarte.

Una relación sana no te resta autoestima. Al contrario, la refuerza.
Y no es debilidad pedir ayuda psicológica si sientes que tu salud mental está en juego, es un acto de fortaleza y de amor propio.

Estás a tiempo de construir un camino distinto.
Aquí estoy si en algún momento decides caminarlo acompañada.

Un abrazo

Hola buenas. Parece que cuando te planteas conocer a alguien o la posibilidad de tener una relación con alguien emerge mucho malestar en forma de desconfianza, miedo al abandono, miedo a tener depresión, pensamientos como “los hombres son unos sucios, narcisistas, misóginos, inmaduros…”, justificaciones del tipo “no quiero alargar la cadena intergeneracional”, “las relaciones de pareja casi siempre terminan mal”, “mejor sola que mal acompañada…”. Al estar tan pegada a estas sensaciones, pensamientos y emociones tan desagradables, tu conducta está siendo evitativa. Parece que todo este cúmulo de malestar es el que está tirando de ti alejándote de tener una relación, abrirte a la posibilidad de conocer a alguien, explorar. Entiendo que si formulas aquí todo esto es porque para ti es importante conocer a otras personas, tener una vida afectivo-sexual satisfactoria, y te gustaría empezar a recorrer un camino diferente. Tal vez lo interesante no sea cambiar todas estas sensaciones, emociones y pensamientos desagradables que toman presencia (reafirmando tu propia coherencia y anticipando el dolor de dar el paso), ya que lo más probable es que aparezcan de forma automática y sigan acompañándote por un tiempo. Si esto es algo que te importa, tal vez tengas que asumir responsabilidad, asumir el riesgo de equivocarte al elegir y explorar (incluso en presencia de dudas y miedos). Es posible que des con personas afines, y también es posible que des con perfiles que no sean los indicados para tener la relación que quieres tener. Sin embargo, en un estado de parálisis y dándole vueltas, ya conoces lo que hay ¿Quieres mandar tú sobre este malestar, acercándote a lo que quieres incluso en su presencia, o vas a seguir permitiendo que este malestar sea el que mande sobre ti y te mantenga en una posición de defensa/evitación (zona de confort/alivio)? Un saludo

Lo que estás viviendo es un intento muy comprensible de protegerte. Pero estar constantemente en modo defensivo, aunque nos protege a corto plazo, también nos encierra en una soledad que no siempre elegimos libremente.

Existen formas de trabajar todo esto sin tener que remover el pasado una y otra vez. Por ejemplo, con un psicoterapeuta que use el modelo breve estratégico, puedes aprender a salir de este círculo de miedo y defensa sin necesidad de una terapia interminable. Este enfoque no se enfoca tanto en entender el pasado, sino en cambiar cómo se mantiene el problema en el presente. Es concreto, respetuoso, no invasivo, y busca ayudarte a recuperar el control en menos tiempo.

No se trata de lanzarte a una relación mañana. Se trata de ayudarte a sentirte libre de elegir, sin que el miedo decida por ti. La idea no es que confíes ciegamente en los demás, sino que vuelvas a confiar en ti misma, en tu criterio, tu valor y tu capacidad de protegerte sin aislarte.

Buscar ayuda no te hace parte de esa cadena que quieres romper. Al contrario: es el primer paso para transformarla. Si necesitas cualquier información no dudes en contactarme.

Hola, ¿qué tal? Agradezco mucho que compartas tus sentimientos tan sinceramente, porque reconocer miedos y heridas profundas es un paso fundamental para poder sanarlos. La desconfianza hacia los hombres que sientes está vinculada no solo a experiencias propias o ajenas, sino también a patrones familiares dolorosos que has observado a lo largo de generaciones.

En consulta, trabajaríamos en fortalecer tu autoestima y en desarrollar herramientas para poner límites claros y cuidar tu bienestar, en caso de que decidas abrirte a la posibilidad de una relación en el futuro. Asimismo, te apoyaría en crear un mapa emocional que te permita tomar decisiones conscientes, desde el autocuidado y el conocimiento profundo de ti misma, más que desde el miedo o la resignación.
Venir a terapia conmigo te ayudaría a comprender y sanar esas heridas intergeneracionales, a recuperar confianza en ti y en tus elecciones, y a encontrar un equilibrio donde no tengas que renunciar a tus necesidades afectivas por miedo. No se trata de apresurarse a tener pareja, sino de hacer las paces con tu historia para construir relaciones saludables si así lo decides, o disfrutar de tu vida siendo plena y completa en solitud. Estoy aquí para acompañarte en ese camino personal, apoyándote siempre para que tu bienestar y tu felicidad sean lo primero. Un saludo, Silvia.