Tiendo a mirar el suelo cuando camino por la calle aunque intento no hacerlo. No se si es una cierta
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Tiendo a mirar el suelo cuando camino por la calle aunque intento no hacerlo. No se si es una cierta patología ello. Y es la incomodidad al cruzarse con gente por la calle y el contacto visual. En especial, con gente que mira mucho de frente. Hay personas que caminan y da la sensación de que van a lo suyo. Pero con otras personas que fijan totalmente el mirar de frente en todo momento, pues me molesta la situación. En estas personas leo que puede haber altivez, arrogancia o simplemente otras veces van a lo suyo y caminan así.
Podría tratarse de un estimulo de fobia social muy concreto. Habría que evaluar que causas cercanas lo provocan e implementar algunas técnicas especificas para reducir el malestar y no provocar la conducta de evitación de mirar al suelo.
Lo que describes es mucho más común de lo que parece, y no necesariamente indica una patología, aunque sí puede estar relacionado con ciertos rasgos de ansiedad social o hipervigilancia interpersonal. Es decir, el hecho de mirar al suelo puede ser una estrategia que has desarrollado —quizá de forma automática— para evitar situaciones incómodas: el cruce de miradas, sentirte observado, evaluado o “interpelado” por otras personas en el espacio público.
Sentir incomodidad ante el contacto visual sostenido, especialmente con personas que parecen mirar intensamente o con rigidez, puede estar vinculado con interpretaciones internas que haces de esa mirada. Como mencionas, puedes llegar a leer altivez, juicio, desafío o incluso una actitud invasiva en quienes sostienen mucho la mirada. Y aunque eso puede ser cierto en algunos casos, también puede estar mediado por tu propia sensibilidad y tu sistema de alerta.
Hay personas que, efectivamente, caminan como si fueran atravesando el mundo sin prestar atención a los demás, y eso puede sentirse neutro o incluso liberador. Pero hay otras cuya mirada firme o directa puede activarte porque inconscientemente interpretas que hay una expectativa, una evaluación o incluso un juicio.
No es raro que estas sensaciones estén asociadas a experiencias previas en las que uno ha sentido que era observado, evaluado o incluso ridiculizado. A veces, hay una historia de haber sido señalado o de haber tenido que protegerse mucho de las miradas ajenas (por timidez, por bullying, por inseguridades, por hipersensibilidad a la crítica, etc.). Lo importante no es tanto si estas personas realmente te miran con arrogancia o no, sino qué despierta eso en ti.
Intentar forzar no mirar al suelo está bien si lo haces desde un lugar amable contigo mismo, no como una autoexigencia. Quizá puedas ir probando, poco a poco, con pequeñas prácticas de sostener brevemente la mirada al pasar por al lado de alguien, o simplemente levantar la cabeza sin sentir que tienes que hacer contacto visual. A veces basta con sentirte tú “presente” en el espacio sin estar a la defensiva.
Si te parece, puedo ayudarte a explorar más esto y darte algunas estrategias psicológicas para trabajarlo (desde el enfoque del apego, la ansiedad social o incluso desde ejercicios más corporales de seguridad personal). ¿Te gustaría?
Sentir incomodidad ante el contacto visual sostenido, especialmente con personas que parecen mirar intensamente o con rigidez, puede estar vinculado con interpretaciones internas que haces de esa mirada. Como mencionas, puedes llegar a leer altivez, juicio, desafío o incluso una actitud invasiva en quienes sostienen mucho la mirada. Y aunque eso puede ser cierto en algunos casos, también puede estar mediado por tu propia sensibilidad y tu sistema de alerta.
Hay personas que, efectivamente, caminan como si fueran atravesando el mundo sin prestar atención a los demás, y eso puede sentirse neutro o incluso liberador. Pero hay otras cuya mirada firme o directa puede activarte porque inconscientemente interpretas que hay una expectativa, una evaluación o incluso un juicio.
No es raro que estas sensaciones estén asociadas a experiencias previas en las que uno ha sentido que era observado, evaluado o incluso ridiculizado. A veces, hay una historia de haber sido señalado o de haber tenido que protegerse mucho de las miradas ajenas (por timidez, por bullying, por inseguridades, por hipersensibilidad a la crítica, etc.). Lo importante no es tanto si estas personas realmente te miran con arrogancia o no, sino qué despierta eso en ti.
Intentar forzar no mirar al suelo está bien si lo haces desde un lugar amable contigo mismo, no como una autoexigencia. Quizá puedas ir probando, poco a poco, con pequeñas prácticas de sostener brevemente la mirada al pasar por al lado de alguien, o simplemente levantar la cabeza sin sentir que tienes que hacer contacto visual. A veces basta con sentirte tú “presente” en el espacio sin estar a la defensiva.
Si te parece, puedo ayudarte a explorar más esto y darte algunas estrategias psicológicas para trabajarlo (desde el enfoque del apego, la ansiedad social o incluso desde ejercicios más corporales de seguridad personal). ¿Te gustaría?
El mirar al suelo no es en si patológico, pero si te sientes incomodidad al cruzarte con gente por la calle es posible que tengas algo de ansiedad social. Piensa si hay otras situaciones sociales en tu vida que te incomoden, y en que nivel. Las personas con ansiedad social pueden sentirse inseguras al comer delante de gente a la que conocen poco, al conocer gente nueva o ir a una fiesta, y tienden a darle muchas vueltas a lo que dijeron o hicieron en una reunión o encuentro determinado, ¿te resuena?.
Y ¿por qué algunas personas miran al frente o incluso te miran a los ojos al caminar? puede ser mucho más útil para ti encontrar una respuesta positiva o neutra para esto ,ya que es lo que va a influir sobre tus emciones, y al fin y al cabo, lo que pasa por la mente de los demás es algo que no podemos saber a ciencia cierta. Pensar que van a lo suyo es bastante realista y neutro por ejemplo, también podría ser que tengan prisa, o que estén de buen humor, o de mal humor, que estén tranquilos... ¿se te ocurre alguna otra razón positiva o neutra para la gente que fija la mirada al frente?
Más allá de esto, nuestra postura corporal también puede influir en como nos sentimos, así que, aunque no pasa nada por mirar al suelo al andar de vez en cuando, piensa qué diferencia emocinal y de actitud puede haber entre mirar hacia el suelo, o hacia delante y hacia lo que te rodea. Mirar al suelo puede tener que ver con un estado más melancólico, pero también reflexivo, y a veces reflejar timidez. Mirar al frente puede transmitir confianza o despreocupación, apertura a conectar con el entorno...Prueba las dos formas de andar en un lugar tranquilo y fíjate si te producen sensaciones diferentes. Con el lenguaje corporal mostramos cosas a los demás pero también nos estamos dando un mensaje a nosotros mismos.
Y ¿por qué algunas personas miran al frente o incluso te miran a los ojos al caminar? puede ser mucho más útil para ti encontrar una respuesta positiva o neutra para esto ,ya que es lo que va a influir sobre tus emciones, y al fin y al cabo, lo que pasa por la mente de los demás es algo que no podemos saber a ciencia cierta. Pensar que van a lo suyo es bastante realista y neutro por ejemplo, también podría ser que tengan prisa, o que estén de buen humor, o de mal humor, que estén tranquilos... ¿se te ocurre alguna otra razón positiva o neutra para la gente que fija la mirada al frente?
Más allá de esto, nuestra postura corporal también puede influir en como nos sentimos, así que, aunque no pasa nada por mirar al suelo al andar de vez en cuando, piensa qué diferencia emocinal y de actitud puede haber entre mirar hacia el suelo, o hacia delante y hacia lo que te rodea. Mirar al suelo puede tener que ver con un estado más melancólico, pero también reflexivo, y a veces reflejar timidez. Mirar al frente puede transmitir confianza o despreocupación, apertura a conectar con el entorno...Prueba las dos formas de andar en un lugar tranquilo y fíjate si te producen sensaciones diferentes. Con el lenguaje corporal mostramos cosas a los demás pero también nos estamos dando un mensaje a nosotros mismos.
Gracias por compartir lo que estás sintiendo; es un paso importante poder expresarlo con tanta claridad.
Lo que comentas no necesariamente indica una patología en sí misma, pero sí puede estar relacionado con ciertos aspectos de tu mundo emocional o social que sería útil explorar más a fondo.
La incomodidad con el contacto visual es algo que muchas personas experimentan, especialmente si hay cierta inseguridad social, ansiedad o hipersensibilidad al juicio externo. Mirar al suelo puede ser una estrategia (aunque inconsciente) para evitar la exposición o el enfrentamiento a miradas que se perciben como intensas, invasivas o amenazantes. En algunos casos, esto puede estar vinculado a experiencias previas, creencias sobre uno mismo, o simplemente a un estilo de relación más introspectivo o reservado.
No estás solo en esto, y no hay nada "mal" en ti por sentirlo así. El hecho de que lo estés observando, que te lo cuestiones, y que busques entenderlo, es un signo de salud emocional.
Podríamos trabajar juntos , ¿Te gustaría que profundicemos en alguno de estos aspectos?
Lo que comentas no necesariamente indica una patología en sí misma, pero sí puede estar relacionado con ciertos aspectos de tu mundo emocional o social que sería útil explorar más a fondo.
La incomodidad con el contacto visual es algo que muchas personas experimentan, especialmente si hay cierta inseguridad social, ansiedad o hipersensibilidad al juicio externo. Mirar al suelo puede ser una estrategia (aunque inconsciente) para evitar la exposición o el enfrentamiento a miradas que se perciben como intensas, invasivas o amenazantes. En algunos casos, esto puede estar vinculado a experiencias previas, creencias sobre uno mismo, o simplemente a un estilo de relación más introspectivo o reservado.
No estás solo en esto, y no hay nada "mal" en ti por sentirlo así. El hecho de que lo estés observando, que te lo cuestiones, y que busques entenderlo, es un signo de salud emocional.
Podríamos trabajar juntos , ¿Te gustaría que profundicemos en alguno de estos aspectos?
Es completamente comprensible sentirse así, y es genial que estés consciente de tus propias reacciones y sensaciones. La calle puede ser un lugar lleno de imputs y formas de interactuar, y cada uno tenemos nuestra forma de canalizarlo en la que nos sentimos más cómodos. Mirar al suelo puede ser una forma de protegerse y sentirse más seguro en esos momentos, y no hay nada malo en ello. También, es interesante observar cómo diferentes personas se comportan en la vía pública; algunos llevan una actitud más abierta y receptiva, mientras que otros parecen centrados en su propio camino. Lo importante es que tú encuentres la mejor forma de sentirte bien en esas situaciones y sigas siendo auténtico contigo mismo. ¡Ánimo y sigue cuidando tu bienestar!
Hola, buenos días, normalmente la gente cuando va por la calle caminando, va mirando pero sin fijar la atención en nada, suelen ir pendientes de llegar a algún sitio, de no pisar porquerías por el suelo, de no tropezar con gente, de los semáforos y, además, suelen ir pensando en sus cosas personales. Por eso normalmente miran, pero no ven a quien tienen delante.
Es posible que estés dando un valor emocional a esas miradas y que sólo sean eso, miradas. Puede que tengas la autoestima baja y estés interpretando en los demás algún tipo de inseguridad que tu tengas.
Te animo a que hables con un especialista sobre lenguaje verbal y no verbal, para que te ayude a mejorar esas inseguridades.
Un abrazo
Es posible que estés dando un valor emocional a esas miradas y que sólo sean eso, miradas. Puede que tengas la autoestima baja y estés interpretando en los demás algún tipo de inseguridad que tu tengas.
Te animo a que hables con un especialista sobre lenguaje verbal y no verbal, para que te ayude a mejorar esas inseguridades.
Un abrazo
Hola! Siento que lo que estás viviendo se vuelve incapacitante para ti. Parece que cuando caminas por la calle te sientes prejuzgada por las personas que van caminando, además comentas que te incomoda el contacto visual. Desde luego que mereces caminar por la calle tranquil@ y sin sentirte así. A veces creemos que las personas nos están juzgando pero obviamos que no sabemos nada de lo que están experimentando realmente, simplemente nuestra mente hace suposiciones y conjeturas. Esto es algo que podrías trabajar en terapia si lo deseas y creo que obtendrás mucho bienestar y liberación de poder caminar por la calle sin esta preocupación. Estoy segura de que lograrás hacerlo, ¡mucho ánimo!
Hola, es posible que tengas una percepción bastante afinada en cuanto a la comunicación no verbal, y que esta percepción te altere tu estado interno. Esta sensibilidad a las sutilezas, propio de (y no exclusivo de) las personas PAS (Personas Altamente Sensibles), puede conllevar a una sobreestimación del sistema nervioso y a una consecuente desregulación (ansiedad, tensión, nerviosismo...). Si es así, creo que es beneficioso poder conocerte en este rasgo y, conjuntamente a trabajar tu autoestima, poder llegar al objetivo de sostenerte en suficiente calma ante las experiencias que comentas. Saludos y ánimo!
Hola. Quizás seas una persona introvertida, insegura, suspicaz o incluso pudieras tener cierta ansiedad social. Habría que analizar por qué te sucede esto, desde cuándo, si hubo en el pasado alguna situación que pudiera explicar este comportamiento cuando vas por la calle. A partir de ahí, trabajar terapéuticamente para ir reduciendo o eliminando esa sensación que vivencias.
Gracias por tu consulta. Lo que describes es una experiencia más común de lo que parece, y no necesariamente indica una patología, pero sí puede estar relacionado con ciertos rasgos o dificultades, especialmente vinculadas a la ansiedad social o a una sensibilidad especial al juicio externo.
Sentir incomodidad al cruzarse con otras personas, evitar el contacto visual o interpretar sus gestos como amenazantes o altivos puede ser una forma de protección frente a una sensación de vulnerabilidad o exposición. A veces, estas conductas se desarrollan como una estrategia para evitar el malestar o la tensión interna que generan ciertas interacciones sociales, incluso breves.
Es positivo que seas consciente de ello y que estés intentando cambiarlo, pero si sientes que esta incomodidad interfiere en tu día a día o te genera malestar sostenido, puede ser útil explorar su origen con ayuda profesional. En terapia es posible trabajar la gestión del malestar en espacios públicos, la interpretación de señales sociales y el fortalecimiento de la seguridad personal.
Si lo deseas, puedes reservar una sesión online a través de mi perfil. Estaré encantada de acompañarte en este proceso.
Sentir incomodidad al cruzarse con otras personas, evitar el contacto visual o interpretar sus gestos como amenazantes o altivos puede ser una forma de protección frente a una sensación de vulnerabilidad o exposición. A veces, estas conductas se desarrollan como una estrategia para evitar el malestar o la tensión interna que generan ciertas interacciones sociales, incluso breves.
Es positivo que seas consciente de ello y que estés intentando cambiarlo, pero si sientes que esta incomodidad interfiere en tu día a día o te genera malestar sostenido, puede ser útil explorar su origen con ayuda profesional. En terapia es posible trabajar la gestión del malestar en espacios públicos, la interpretación de señales sociales y el fortalecimiento de la seguridad personal.
Si lo deseas, puedes reservar una sesión online a través de mi perfil. Estaré encantada de acompañarte en este proceso.
Buenos días.
Es posible que esa situación sea tal y como expresas o puede ser que sea una percepción tuya influida por tus miedos, inseguridades o experiencias previas.
De cualquier manera está claro que es una situación que te hace sufrir.
No dudes en acudir a terapia para mejorar tu calidad de vida, ya que esta situación puede estar afectandote en tu día a día.
Si te puede ayudar en algo no dudes en contactar conmigo.
Un saludo
Es posible que esa situación sea tal y como expresas o puede ser que sea una percepción tuya influida por tus miedos, inseguridades o experiencias previas.
De cualquier manera está claro que es una situación que te hace sufrir.
No dudes en acudir a terapia para mejorar tu calidad de vida, ya que esta situación puede estar afectandote en tu día a día.
Si te puede ayudar en algo no dudes en contactar conmigo.
Un saludo
Hola ¿qué tal? Es habitual sentir incomodidad al cruzarse con personas que mantienen una mirada fija o intensa en la calle, y que eso te lleve a evitar el contacto visual mirando al suelo. Este comportamiento no necesariamente indica una patología, sino que puede estar relacionado con la ansiedad social o simplemente con la preferencia personal por evitar situaciones que generen malestar o sensación de vulnerabilidad.
En consulta, trabajaríamos para entender mejor qué te genera esa incomodidad y cómo afecta a tu vida cotidiana. Te ayudaría a desarrollar estrategias para manejar la ansiedad o incomodidad en situaciones de contacto visual, mejorando gradualmente tu confianza en esos encuentros sociales. También exploraríamos patrones de pensamiento que pueden estar amplificando tus interpretaciones y te enseñaría técnicas para reestructurarlos y afrontar la realidad con más calma y objetividad. Te permitiría transformar esa molestia en una mayor seguridad personal, favoreciendo que puedas interactuar con los demás de forma más cómoda y libre. Así, recuperarás el bienestar al caminar y relacionarte socialmente, sin que el miedo o la incomodidad condicionen tu día a día. Un saludo, Silvia.
En consulta, trabajaríamos para entender mejor qué te genera esa incomodidad y cómo afecta a tu vida cotidiana. Te ayudaría a desarrollar estrategias para manejar la ansiedad o incomodidad en situaciones de contacto visual, mejorando gradualmente tu confianza en esos encuentros sociales. También exploraríamos patrones de pensamiento que pueden estar amplificando tus interpretaciones y te enseñaría técnicas para reestructurarlos y afrontar la realidad con más calma y objetividad. Te permitiría transformar esa molestia en una mayor seguridad personal, favoreciendo que puedas interactuar con los demás de forma más cómoda y libre. Así, recuperarás el bienestar al caminar y relacionarte socialmente, sin que el miedo o la incomodidad condicionen tu día a día. Un saludo, Silvia.
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