Hola buenas noches o días, quisiera saber sus opiniones de mi caso en particular, qué difícil es viv
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Hola buenas noches o días, quisiera saber sus opiniones de mi caso en particular, qué difícil es vivir una vida en la que solamente llevo pensando ya casi un mes y medio. Que pienso y pienso y sobre pienso todo el día, todo el rato, cada hora. Del cielo, de lo grande que es, de que arriba está el universo, que es infinito. De repente me empieza a entrar un miedo así, de la nada, de que me estoy volviendo loco, de que voy a perder el control de la mente. Me siento como si estuviera todo vacío alrededor por la inmensidad del universo, que somos una bolita, un planeta chiquito. Y todo el tiempo estoy pensando en eso, en eso, no se me partan los pensamientos. Ya casi no me puedo concentrar en otras cosas. Me siento con miedo, siento siempre una desesperación en el pecho, una intranquilidad en el cuerpo, una desesperación. Esto ya no es vida, esto definitivamente ya no es vida, porque yo nunca había tenido este tipo de pensamientos así tan repetidos, que no me dejan en paz desde que despierto hasta que me vuelvo a dormir en la madrugada. Y a veces puedo dormir, porque casi siempre siento estas sensaciones feas en mi cuerpo. Me tomo la presión, a cada rato me estoy tomando la presión porque siento que se me sube del miedo y a veces sale un poquito alto, pero la mayoría de veces siempre sale bien. Y ya no puedo vivir tranquilo, o sea, yo lo que me pregunto es ¿Qué le pasa a mi mente? ¿Por qué se me hizo tan feo? ¿Por qué tengo estos pensamientos que no me dejan en paz? ¿Qué me puede estar pasando y qué puedo hacer? De antemano, pues muchas gracias.
Hola,
Bueno, lo primero es expresar que puedo percibir en tus palabras el gran sufrimiento que estás pasando. Entiendo perfectamente la incomprensión de esos pensamientos y el miedo que te generan.
Es común que la mente, en momentos de miedo, estrés, ansiedad... fabrique pensamientos catastróficos. Pensamientos de lo peor que podría pasar. Es una forma de intentar controlar y prever las cosas que podrían pasar para intentar reducir el miedo. Paradójicamente sucede al revés. Cuanto más vuela la mente y fabrica esos pensamientos, mas miedo tenemos...
Te cuento esto porque normalmente la mente piensa escenas y situaciones en relación a lo que emocionalmente está pasando en nosotros. Por ejemplo, si me da ansiedad conducir, la mente pensará en el peor accidente.
Por lo que dices, haces muy buena referencia a una sensación de desesperación en tu pecho y a una intranquilidad en tu cuerpo... tu mente está pensando en la grandeza del universo y entiendo que precisamente incremente esa sensación de desesperación que comentas.
Más allá de los pensamientos sobre el universo, ¿Qué está pasando en tu vida o qué ha pasado para que haya esa desesperación.... esa intranquilidad? quizá no encuentres fácilmente una respuesta. Es normal también ... pero quizá haya algo con lo que tú lo relacionas... aunque sea una intuición
Por otro lado, te recomiendo que hagas ejercicios de respiración con música relajante. Una música tranquila que te aporte paz.
Al principio será complejo pero ve centrándote en tu respiración. En como entra y sale el aire.... pon tu atención en la respiración, en la música, y ve haciendo respiraciones de 2-3 segundos cada una. Si te ayuda puedes poner una mano en tu pecho y en tu barriga para anclarte y ayudarte en la respiración.
También estaría bueno que pudieras hablar de esto que te está pasando. Quizás comenzar a ir a terapia.
Lo que te está pasando te causa mucho sufrimiento y puede parecer desde ti que estás loco porque es algo nuevo que no has experimentando antes, pero la mente intenta lidiar con las cosas que nos pasan de maneras que a veces nos cuesta entender.
Espero haberte ayudado o haberte aportado una visión un poco más tranquilizadora.
un abrazo,
Bueno, lo primero es expresar que puedo percibir en tus palabras el gran sufrimiento que estás pasando. Entiendo perfectamente la incomprensión de esos pensamientos y el miedo que te generan.
Es común que la mente, en momentos de miedo, estrés, ansiedad... fabrique pensamientos catastróficos. Pensamientos de lo peor que podría pasar. Es una forma de intentar controlar y prever las cosas que podrían pasar para intentar reducir el miedo. Paradójicamente sucede al revés. Cuanto más vuela la mente y fabrica esos pensamientos, mas miedo tenemos...
Te cuento esto porque normalmente la mente piensa escenas y situaciones en relación a lo que emocionalmente está pasando en nosotros. Por ejemplo, si me da ansiedad conducir, la mente pensará en el peor accidente.
Por lo que dices, haces muy buena referencia a una sensación de desesperación en tu pecho y a una intranquilidad en tu cuerpo... tu mente está pensando en la grandeza del universo y entiendo que precisamente incremente esa sensación de desesperación que comentas.
Más allá de los pensamientos sobre el universo, ¿Qué está pasando en tu vida o qué ha pasado para que haya esa desesperación.... esa intranquilidad? quizá no encuentres fácilmente una respuesta. Es normal también ... pero quizá haya algo con lo que tú lo relacionas... aunque sea una intuición
Por otro lado, te recomiendo que hagas ejercicios de respiración con música relajante. Una música tranquila que te aporte paz.
Al principio será complejo pero ve centrándote en tu respiración. En como entra y sale el aire.... pon tu atención en la respiración, en la música, y ve haciendo respiraciones de 2-3 segundos cada una. Si te ayuda puedes poner una mano en tu pecho y en tu barriga para anclarte y ayudarte en la respiración.
También estaría bueno que pudieras hablar de esto que te está pasando. Quizás comenzar a ir a terapia.
Lo que te está pasando te causa mucho sufrimiento y puede parecer desde ti que estás loco porque es algo nuevo que no has experimentando antes, pero la mente intenta lidiar con las cosas que nos pasan de maneras que a veces nos cuesta entender.
Espero haberte ayudado o haberte aportado una visión un poco más tranquilizadora.
un abrazo,
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Hola, gracias por compartir lo que estás viviendo. Entiendo lo difícil y abrumador que debe ser enfrentar estos pensamientos constantes y la sensación de miedo y desesperación. Lo que describes podría estar relacionado con ansiedad generalizada o un trastorno obsesivo-compulsivo (TOC), donde los pensamientos repetitivos e intrusivos generan un gran malestar.
La obsesión con la inmensidad del universo y el miedo a perder el control son señales de que tu mente está atrapada en un ciclo de preocupación. Estos pensamientos no son peligrosos, pero sí generan ansiedad intensa, y es importante saber que hay formas de manejarlos.
Primero, te recomendaría buscar ayuda profesional, ya que un terapeuta puede enseñarte técnicas para manejar estos pensamientos intrusivos y las sensaciones físicas que los acompañan. La terapia cognitivo-conductual (TCC) es especialmente útil para aprender a desafiar estos pensamientos y reducir su impacto.
Mientras tanto, algunos pasos que podrías tomar incluyen:
Reconocer los pensamientos sin luchar contra ellos. Intenta observarlos como algo pasajero, en lugar de buscarles un significado profundo.
Practicar técnicas de relajación. Ejercicios como la respiración profunda o la meditación guiada pueden ayudarte a reducir la sensación de desesperación.
Reducir los chequeos de presión arterial. Esto puede reforzar la ansiedad. Si ya consultaste con un médico y los resultados suelen estar bien, es poco probable que el problema sea físico.
Recuerda que no estás solo y que esto tiene solución. Con el tratamiento adecuado y tiempo, puedes recuperar tu tranquilidad. Escríbeme si necesitas más orientación o ejercicios prácticos.
La obsesión con la inmensidad del universo y el miedo a perder el control son señales de que tu mente está atrapada en un ciclo de preocupación. Estos pensamientos no son peligrosos, pero sí generan ansiedad intensa, y es importante saber que hay formas de manejarlos.
Primero, te recomendaría buscar ayuda profesional, ya que un terapeuta puede enseñarte técnicas para manejar estos pensamientos intrusivos y las sensaciones físicas que los acompañan. La terapia cognitivo-conductual (TCC) es especialmente útil para aprender a desafiar estos pensamientos y reducir su impacto.
Mientras tanto, algunos pasos que podrías tomar incluyen:
Reconocer los pensamientos sin luchar contra ellos. Intenta observarlos como algo pasajero, en lugar de buscarles un significado profundo.
Practicar técnicas de relajación. Ejercicios como la respiración profunda o la meditación guiada pueden ayudarte a reducir la sensación de desesperación.
Reducir los chequeos de presión arterial. Esto puede reforzar la ansiedad. Si ya consultaste con un médico y los resultados suelen estar bien, es poco probable que el problema sea físico.
Recuerda que no estás solo y que esto tiene solución. Con el tratamiento adecuado y tiempo, puedes recuperar tu tranquilidad. Escríbeme si necesitas más orientación o ejercicios prácticos.
Por lo que cuentas, parece que, en ocasiones, estás en bucle con tu malestar. Siento mucho que estés pasando por esto. Parece que presentas bastante rumiación y desesperanza. Posiblemente, te sería de gran ayuda poder disponer de un buen acompañamiento emocional y terapéutico. Una persona sensible, comprometida y disponible que pueda aportarte una mirada amable y que te ayude a calmarte en tu soledad. Mucho ánimo
Buenas noches
Todos los días tenemos millones de pensamientos, algunos de ellos son irracionales, otros son recurrentes, otros son intrusivos... la inmensa mayoría de ellos, nunca se van a hacer realidad. El problema ocurre cuando estos pensamientos interfieren significativamente en nuestra vida persobal, laboral, académica, familiar... Si esté es el caso, la mejor recomendación es que acuda a un psicologo que le haga una buena exploración, con una adecuada evaluación diagnóstica para que pueda confirmar o descartar si hay algún tipo de patología detrás de ello
Saludos
Todos los días tenemos millones de pensamientos, algunos de ellos son irracionales, otros son recurrentes, otros son intrusivos... la inmensa mayoría de ellos, nunca se van a hacer realidad. El problema ocurre cuando estos pensamientos interfieren significativamente en nuestra vida persobal, laboral, académica, familiar... Si esté es el caso, la mejor recomendación es que acuda a un psicologo que le haga una buena exploración, con una adecuada evaluación diagnóstica para que pueda confirmar o descartar si hay algún tipo de patología detrás de ello
Saludos
Buenos días.
Primero que todo quiero agradecerte por contarnos tu situación y felicitarte por pedir ayuda.
Los pensamientos intrusivos e incontrolables pueden estar causados por muchas situaciones (experiencia traumática, cambios importantes en la vida, problemas sociales o financieros, enfermedades físicas, alteraciones mentales...) y afectan de forma significativa a la salud física y mental de las personas, por ejemplo, en tu caso, están causando manifestaciones clínicas de ansiedad.
Es importante que sepas que tu malestar tiene solución. Te recomiendo que promuevas tu autocuidado (alimentación sana, descanso adecuado, actividad física diaria, establece límites en las relaciones... en definitiva, escucha atentamente a tu cuerpo).
Sin embargo, si se mantienen los síntomas, te invito a pedir ayuda profesional, pues a través de la terapia se fomenta el autoconocimiento y la comprensión de la situación y se genera un mecanismo de respuesta más adaptativo a todo aquello que te está generando malestar.
Un saludo.
Primero que todo quiero agradecerte por contarnos tu situación y felicitarte por pedir ayuda.
Los pensamientos intrusivos e incontrolables pueden estar causados por muchas situaciones (experiencia traumática, cambios importantes en la vida, problemas sociales o financieros, enfermedades físicas, alteraciones mentales...) y afectan de forma significativa a la salud física y mental de las personas, por ejemplo, en tu caso, están causando manifestaciones clínicas de ansiedad.
Es importante que sepas que tu malestar tiene solución. Te recomiendo que promuevas tu autocuidado (alimentación sana, descanso adecuado, actividad física diaria, establece límites en las relaciones... en definitiva, escucha atentamente a tu cuerpo).
Sin embargo, si se mantienen los síntomas, te invito a pedir ayuda profesional, pues a través de la terapia se fomenta el autoconocimiento y la comprensión de la situación y se genera un mecanismo de respuesta más adaptativo a todo aquello que te está generando malestar.
Un saludo.
¡Hola! Gracias por compartir lo que estás viviendo. Puedo imaginar lo difícil y agotador que debe ser estar atrapado en estos pensamientos y sensaciones. Quiero decirte que no estás solo y que lo que describes tiene sentido dentro de cómo funciona nuestro cerebro.
Recuerda que los pensamientos no son hechos, solo eventos en tu mente. En lugar de luchar contra ellos, intenta observarlos como si fueran nubes en el cielo, dejando que estén ahí sin engancharte a ellos. En relación a esas sensaciones en el cuerpo, prueba a buscar un sitio tranquilo, respirar profundo y decirte a ti mismo: “Esto es incómodo, pero es temporal”.
Lo más importante es que no tienes que enfrentarlo todo tú solo. Hay estrategias muy efectivas que pueden ayudarte a reconectar con el presente y a reducir el impacto de estos pensamientos y sensaciones.
Te mando un abrazo :)
Recuerda que los pensamientos no son hechos, solo eventos en tu mente. En lugar de luchar contra ellos, intenta observarlos como si fueran nubes en el cielo, dejando que estén ahí sin engancharte a ellos. En relación a esas sensaciones en el cuerpo, prueba a buscar un sitio tranquilo, respirar profundo y decirte a ti mismo: “Esto es incómodo, pero es temporal”.
Lo más importante es que no tienes que enfrentarlo todo tú solo. Hay estrategias muy efectivas que pueden ayudarte a reconectar con el presente y a reducir el impacto de estos pensamientos y sensaciones.
Te mando un abrazo :)
Entiendo profundamente lo angustiante que debe ser vivir con pensamientos tan persistentes y con esa sensación de miedo y desesperación constante. Primero, quiero felicitarte por buscar ayuda y expresar tus emociones de manera tan clara, ya que es el primer paso hacia una mayor comprensión y alivio.
Lo que describes son pensamientos intrusivos y una rumiación constante que te llevan a sentirte atrapado en un ciclo de ansiedad. Este patrón puede intensificarse porque, al intentar encontrar respuestas inmediatas o evitar estos pensamientos, les damos más poder. Tu mente está intentando lidiar con la inmensidad y lo desconocido, algo que es abrumador por naturaleza, pero esto no significa que estés perdiendo el control o que algo esté "mal" contigo.
Un enfoque inicial para manejar esta situación es aprender a aceptar estos pensamientos como algo que no necesitas resolver. En lugar de luchar contra ellos o buscar respuestas definitivas, prueba observarlos como si fueran una película que pasa frente a ti. Puedes decirte a ti mismo: “Es solo un pensamiento, no una realidad.” Esto ayuda a reducir su intensidad y a cambiar tu relación con ellos.
Además, técnicas como la respiración profunda y pausada o ejercicios de mindfulness pueden ayudarte a calmar la sensación de inquietud en tu cuerpo. Dedicar unos minutos al día para estar en el momento presente puede empezar a romper el ciclo de ansiedad. Si te sientes cómodo, buscar apoyo de un terapeuta especializado en ansiedad o terapia cognitivo-conductual (TCC) sería muy beneficioso. Este tipo de terapia te enseñará a identificar patrones de pensamiento negativos y a reestructurarlos de manera que no generen tanto malestar.
Recuerda que no estás solo en esto y que tu mente no está fallando; simplemente está reaccionando de forma intensa a un estímulo abrumador. Con las herramientas y el apoyo adecuados, es completamente posible recuperar la calma y la claridad mental. Por ahora, céntrate en pequeños pasos y ten paciencia contigo mismo. Tu bienestar es alcanzable.
Lo que describes son pensamientos intrusivos y una rumiación constante que te llevan a sentirte atrapado en un ciclo de ansiedad. Este patrón puede intensificarse porque, al intentar encontrar respuestas inmediatas o evitar estos pensamientos, les damos más poder. Tu mente está intentando lidiar con la inmensidad y lo desconocido, algo que es abrumador por naturaleza, pero esto no significa que estés perdiendo el control o que algo esté "mal" contigo.
Un enfoque inicial para manejar esta situación es aprender a aceptar estos pensamientos como algo que no necesitas resolver. En lugar de luchar contra ellos o buscar respuestas definitivas, prueba observarlos como si fueran una película que pasa frente a ti. Puedes decirte a ti mismo: “Es solo un pensamiento, no una realidad.” Esto ayuda a reducir su intensidad y a cambiar tu relación con ellos.
Además, técnicas como la respiración profunda y pausada o ejercicios de mindfulness pueden ayudarte a calmar la sensación de inquietud en tu cuerpo. Dedicar unos minutos al día para estar en el momento presente puede empezar a romper el ciclo de ansiedad. Si te sientes cómodo, buscar apoyo de un terapeuta especializado en ansiedad o terapia cognitivo-conductual (TCC) sería muy beneficioso. Este tipo de terapia te enseñará a identificar patrones de pensamiento negativos y a reestructurarlos de manera que no generen tanto malestar.
Recuerda que no estás solo en esto y que tu mente no está fallando; simplemente está reaccionando de forma intensa a un estímulo abrumador. Con las herramientas y el apoyo adecuados, es completamente posible recuperar la calma y la claridad mental. Por ahora, céntrate en pequeños pasos y ten paciencia contigo mismo. Tu bienestar es alcanzable.
Buenas tardes, primero quiero agradecerte por compartir lo que estás viviendo. Reconozco lo valiente que es expresar algo tan profundo y complejo. Puedo imaginar lo difícil que debe ser para ti enfrentar esta situación, con pensamientos que parecen no darte tregua y esa sensación constante de inquietud que describes.
Es un paso significativo buscar ayuda y poner en palabras lo que sientes, ya que no siempre es sencillo explicar algo tan abstracto y cargado emocionalmente. Desde mi perspectiva, esos pensamientos intrusivos y repetitivos podrían estar relacionados con un intento de obtener respuestas o control sobre aspectos de la vida que, en el fondo, sabemos que no siempre podemos dominar. Este esfuerzo constante por buscar respuestas tal vez sea una manera de aliviar, aunque sea momentáneamente, la incertidumbre o la ansiedad. Sin embargo, ese mismo mecanismo puede terminar atrapándote en un ciclo que incrementa el malestar.
Desde el enfoque del análisis funcional de la conducta, podemos explorar los factores que están en el origen y mantienen el problema. Esto implica identificar las situaciones o estímulos que desencadenan estos pensamientos, las emociones y sensaciones asociadas, y las conductas o estrategias que utilizas para enfrentarlos. Por ejemplo, esos intentos de buscar respuestas o controlar lo incontrolable pueden estar reforzándose porque ofrecen una sensación momentánea de alivio o control. Sin embargo, a largo plazo, podrían estar contribuyendo al mantenimiento del problema.
Este análisis nos permitirá comprender no solo qué está sucediendo, sino también cómo intervenir de manera específica para interrumpir el ciclo y desarrollar estrategias más efectivas y saludables para gestionar la ansiedad y los pensamientos intrusivos.
Creo que abordar este tema en sesión sería de gran ayuda para ti. Si decides dar ese paso, estaré encantada de acompañarte en el proceso.
Es un paso significativo buscar ayuda y poner en palabras lo que sientes, ya que no siempre es sencillo explicar algo tan abstracto y cargado emocionalmente. Desde mi perspectiva, esos pensamientos intrusivos y repetitivos podrían estar relacionados con un intento de obtener respuestas o control sobre aspectos de la vida que, en el fondo, sabemos que no siempre podemos dominar. Este esfuerzo constante por buscar respuestas tal vez sea una manera de aliviar, aunque sea momentáneamente, la incertidumbre o la ansiedad. Sin embargo, ese mismo mecanismo puede terminar atrapándote en un ciclo que incrementa el malestar.
Desde el enfoque del análisis funcional de la conducta, podemos explorar los factores que están en el origen y mantienen el problema. Esto implica identificar las situaciones o estímulos que desencadenan estos pensamientos, las emociones y sensaciones asociadas, y las conductas o estrategias que utilizas para enfrentarlos. Por ejemplo, esos intentos de buscar respuestas o controlar lo incontrolable pueden estar reforzándose porque ofrecen una sensación momentánea de alivio o control. Sin embargo, a largo plazo, podrían estar contribuyendo al mantenimiento del problema.
Este análisis nos permitirá comprender no solo qué está sucediendo, sino también cómo intervenir de manera específica para interrumpir el ciclo y desarrollar estrategias más efectivas y saludables para gestionar la ansiedad y los pensamientos intrusivos.
Creo que abordar este tema en sesión sería de gran ayuda para ti. Si decides dar ese paso, estaré encantada de acompañarte en el proceso.
Buenos días, por lo que comentas es posible que estés atravesando una situación personal difícil para tí. A veces se van acumulando distintas dificultades en la vida de una persona, sin que se de cuenta, hasta que llega a un punto que el malestar le desborda. Los pensamientos obsesivos suelen estar relacionados con esta situación de malestar, ya que proporcionan cierta sensación de control, al menos inicialmente. Cuando el pensamiento obsesivo se mantiene, produce un incremento en el malestar bastante importante, que es a lo que tú haces referencia cuando hablas de esas sensaciones displacenteras que experimentas en el pecho y el resto del cuerpo. Parece además que estás experimentando ataques de pánico fruto de todo este malestar y el miedo al mismo.
Este es un problema que se puede abordar de forma muy eficaz en terapia por psicólogos expertos en ansiedad. De forma que se podría ir afrontando tanto las sensaciones de malestar, como los pensamientos obsesivos y los problemas que estés encontrando en tu vida.
Si quieres puedes pasarte por mi perfil para conocerme mejor, tengo amplia experiencia en este tipo de problemas y podría ayudarte si lo deseas. Un saludo.
Este es un problema que se puede abordar de forma muy eficaz en terapia por psicólogos expertos en ansiedad. De forma que se podría ir afrontando tanto las sensaciones de malestar, como los pensamientos obsesivos y los problemas que estés encontrando en tu vida.
Si quieres puedes pasarte por mi perfil para conocerme mejor, tengo amplia experiencia en este tipo de problemas y podría ayudarte si lo deseas. Un saludo.
Lamento mucho que estés pasando por esta situación, es evidente la intensidad de lo que describes y cuánto te está afectando. Lo que mencionas, esos pensamientos repetitivos, el miedo constante y las sensaciones físicas de desesperación, pueden estar relacionados con episodios de ansiedad generalizada o con un tipo de trastorno obsesivo-compulsivo, donde los pensamientos intrusivos generan mucha angustia y parecen incontrolables.
Es importante que sepas que no estás volviéndote loco ni vas a perder el control de tu mente. Lo que te ocurre tiene explicación, y no eres la única persona que lo ha experimentado. A veces, la mente se queda atrapada en pensamientos recurrentes (como la inmensidad del universo o lo pequeño que somos) que generan una especie de “bucle mental”. Cuanto más luchamos contra ellos o intentamos evitarlos, más presentes y persistentes se vuelven.
Te recomendaría que buscaras apoyo profesional lo antes posible, un psicólogo especializado en ansiedad o TOC puede ayudarte a comprender qué está sucediendo y darte herramientas para manejar estos pensamientos. La terapia cognitivo-conductual (TCC) es muy efectiva para casos como el tuyo.
Lo más importante es que esto tiene solución. No estás solo en esto, y con ayuda profesional podrás recuperar la calma y el control sobre tu vida. Pedir ayuda es el primer paso para sentirte mejor.
Es importante que sepas que no estás volviéndote loco ni vas a perder el control de tu mente. Lo que te ocurre tiene explicación, y no eres la única persona que lo ha experimentado. A veces, la mente se queda atrapada en pensamientos recurrentes (como la inmensidad del universo o lo pequeño que somos) que generan una especie de “bucle mental”. Cuanto más luchamos contra ellos o intentamos evitarlos, más presentes y persistentes se vuelven.
Te recomendaría que buscaras apoyo profesional lo antes posible, un psicólogo especializado en ansiedad o TOC puede ayudarte a comprender qué está sucediendo y darte herramientas para manejar estos pensamientos. La terapia cognitivo-conductual (TCC) es muy efectiva para casos como el tuyo.
Lo más importante es que esto tiene solución. No estás solo en esto, y con ayuda profesional podrás recuperar la calma y el control sobre tu vida. Pedir ayuda es el primer paso para sentirte mejor.
Lo que describes suena a un episodio de ansiedad intensa, que está afectando profundamente tu bienestar y tu capacidad de disfrutar de tu vida cotidiana. La constante preocupación y el miedo, junto con la sensación de vacío y desesperación, son señales claras de un nivel elevado de ansiedad. A veces, este tipo de pensamientos repetitivos y abrumadores, conocidos como "rumiación", son una forma en la que la mente se queda atrapada en un ciclo de preocupación sin poder liberarse.
Es muy importante que no te enfrentes a esto solo. Estos pensamientos y sensaciones no indican que te estés "volviendo loco", sino que tu mente está reaccionando al estrés y la ansiedad, lo cual es tratable. Como primer paso, es fundamental que busques apoyo profesional para poder comprender lo que está sucediendo y aprender herramientas para gestionar estos pensamientos y emociones. En consulta, podemos trabajar en técnicas que te ayuden a liberar esa tensión constante, a manejar los pensamientos intrusivos y a recuperar el control sobre tu mente y cuerpo.
Es muy importante que no te enfrentes a esto solo. Estos pensamientos y sensaciones no indican que te estés "volviendo loco", sino que tu mente está reaccionando al estrés y la ansiedad, lo cual es tratable. Como primer paso, es fundamental que busques apoyo profesional para poder comprender lo que está sucediendo y aprender herramientas para gestionar estos pensamientos y emociones. En consulta, podemos trabajar en técnicas que te ayuden a liberar esa tensión constante, a manejar los pensamientos intrusivos y a recuperar el control sobre tu mente y cuerpo.
Buenas, consultante anónimo. Gracias por compartir tu experiencia. La experiencia que comentas tiene una explicación general, aunque siempre es recomendable hacer un análisis individualizado para trabajar en ello. Sin embargo, para facilitar su comprensión, permítame usar una metáfora:
Imagine que su vida fuera como un jardín, donde se encuentran las parcelas importantes de su vida, como su familia, amigos, pareja, trabajo. Y usted como jardinero se dedicara a cuidarlo, a regarlo, a cultivar cada planta que se encuentra en cada jardín.
Sin embargo, empiezan a aparecer pensamientos y sensaciones, como pájaros que llegan volando y piando en ese jardín, molestos, ruidosos y aleteando por todos lados. Puesto que son molestos y distraen, es fácil querer espantarlos, esforzándose en echarlos, en no pensar en ellos, en poner otros pensamientos que los contrarresten, etc. También como no paran de piar y molestar, puedes intentar alimentarlos para que se callen, siguiendo su lógica, su razonamiento, entrando en el bucle. Y quizá así se calmen, se vayan, sin embargo vuelven más fuertes, más alimentados, más grandes. Y así en bucle, intentando echarles y saciarles.
Pero somos seres humanos, no podemos estar en todos los sitios a la vez. Se acuerda del jardín de antes, donde quedó el cuidado?
¿A qué estaría dedicando su tiempo? ¿a cuidar las facetas de la vida que le importan? ¿o a no pensar ciertas cosas o tener ciertos pensamientos? ¿A cuidar su jardín o a espantar pájaros?
Curiosamente, en lo referente a la mente surge una paradoja, muchas veces la "solución" al problema acaba siendo el verdadero problema. Por lo que si es una situación que le incapacita mucho en su día a día le recomiendo ponerse en manos de un psicólogo contextual para recuperar el foco en lo valioso para usted. En dedicar la energía en lo que a usted le importa y no a los pensamientos y emociones que vienen y van en nuestra mente.
Imagine que su vida fuera como un jardín, donde se encuentran las parcelas importantes de su vida, como su familia, amigos, pareja, trabajo. Y usted como jardinero se dedicara a cuidarlo, a regarlo, a cultivar cada planta que se encuentra en cada jardín.
Sin embargo, empiezan a aparecer pensamientos y sensaciones, como pájaros que llegan volando y piando en ese jardín, molestos, ruidosos y aleteando por todos lados. Puesto que son molestos y distraen, es fácil querer espantarlos, esforzándose en echarlos, en no pensar en ellos, en poner otros pensamientos que los contrarresten, etc. También como no paran de piar y molestar, puedes intentar alimentarlos para que se callen, siguiendo su lógica, su razonamiento, entrando en el bucle. Y quizá así se calmen, se vayan, sin embargo vuelven más fuertes, más alimentados, más grandes. Y así en bucle, intentando echarles y saciarles.
Pero somos seres humanos, no podemos estar en todos los sitios a la vez. Se acuerda del jardín de antes, donde quedó el cuidado?
¿A qué estaría dedicando su tiempo? ¿a cuidar las facetas de la vida que le importan? ¿o a no pensar ciertas cosas o tener ciertos pensamientos? ¿A cuidar su jardín o a espantar pájaros?
Curiosamente, en lo referente a la mente surge una paradoja, muchas veces la "solución" al problema acaba siendo el verdadero problema. Por lo que si es una situación que le incapacita mucho en su día a día le recomiendo ponerse en manos de un psicólogo contextual para recuperar el foco en lo valioso para usted. En dedicar la energía en lo que a usted le importa y no a los pensamientos y emociones que vienen y van en nuestra mente.
Hola, siento muchísimo por lo que estas pasando, en ocasiones la mente nos juega malas pasadas y esto puede tener consecuencias mucho mas graves en el futuro sino hacemos nada por solucionarlo. Lo que parece que te ocurre es que te invaden pensamientos obsesivos o intrusivos.
Te doy un poco de información:
Los pensamientos obsesivos son ideas, imágenes o impulsos que aparecen de forma repetitiva, intrusiva y no deseada en la mente de una persona. Aunque todos podemos tener pensamientos molestos de vez en cuando, los obsesivos se caracterizan por generar un alto nivel de ansiedad y malestar, especialmente cuando la persona siente que no puede controlarlos ni detenerlos.
### Características principales
- **Intrusivos**: Surgen sin que la persona los quiera o los busque.
- **Repetitivos**: Se repiten constantemente, incluso cuando se intenta ignorarlos.
- **Ansiógenos**: Provocan angustia, miedo o culpa.
- **Egodistónicos**: Van en contra de los valores o deseos de la persona (por ejemplo, pensar en hacer daño a alguien sin querer hacerlo).
- **Dificultad para neutralizarlos**: La persona puede intentar “compensarlos” con rituales o conductas repetitivas (como en el TOC).
### Ejemplos comunes
- Miedo a perder el control o volverse loco.
- Miedo a contaminarse o ensuciarse.
- Pensamientos violentos o sexuales no deseados.
- Dudas constantes sobre decisiones tomadas.
- Sospechas infundadas de infidelidad.
- Necesidad de que todo esté en orden o simétrico.
### ¿Cómo gestionarlos?
- **Aceptar el pensamiento**: No luchar contra él, sino observarlo sin juzgar.
- **Técnicas de relajación**: Respiración consciente, meditación o mindfulness.
- **Terapia psicológica**: Especialmente la terapia cognitivo-conductual (TCC), que ha demostrado ser muy eficaz.
- **Evitar rituales de neutralización**: Aunque parezcan aliviar, refuerzan el ciclo obsesivo.
Si quieres, puedo ayudarte a explorar técnicas específicas para manejar tus propios pensamientos obsesivos o entender si están interfiriendo en tu bienestar. ¿Te gustaría que profundizáramos en eso? Resérvame una consulta psicológica online gratuita y lo hablamos.
Te doy un poco de información:
Los pensamientos obsesivos son ideas, imágenes o impulsos que aparecen de forma repetitiva, intrusiva y no deseada en la mente de una persona. Aunque todos podemos tener pensamientos molestos de vez en cuando, los obsesivos se caracterizan por generar un alto nivel de ansiedad y malestar, especialmente cuando la persona siente que no puede controlarlos ni detenerlos.
### Características principales
- **Intrusivos**: Surgen sin que la persona los quiera o los busque.
- **Repetitivos**: Se repiten constantemente, incluso cuando se intenta ignorarlos.
- **Ansiógenos**: Provocan angustia, miedo o culpa.
- **Egodistónicos**: Van en contra de los valores o deseos de la persona (por ejemplo, pensar en hacer daño a alguien sin querer hacerlo).
- **Dificultad para neutralizarlos**: La persona puede intentar “compensarlos” con rituales o conductas repetitivas (como en el TOC).
### Ejemplos comunes
- Miedo a perder el control o volverse loco.
- Miedo a contaminarse o ensuciarse.
- Pensamientos violentos o sexuales no deseados.
- Dudas constantes sobre decisiones tomadas.
- Sospechas infundadas de infidelidad.
- Necesidad de que todo esté en orden o simétrico.
### ¿Cómo gestionarlos?
- **Aceptar el pensamiento**: No luchar contra él, sino observarlo sin juzgar.
- **Técnicas de relajación**: Respiración consciente, meditación o mindfulness.
- **Terapia psicológica**: Especialmente la terapia cognitivo-conductual (TCC), que ha demostrado ser muy eficaz.
- **Evitar rituales de neutralización**: Aunque parezcan aliviar, refuerzan el ciclo obsesivo.
Si quieres, puedo ayudarte a explorar técnicas específicas para manejar tus propios pensamientos obsesivos o entender si están interfiriendo en tu bienestar. ¿Te gustaría que profundizáramos en eso? Resérvame una consulta psicológica online gratuita y lo hablamos.
Hola. Siento mucho el gran sufrimiento que estás experimentando. La angustia que describes, ese ciclo interminable de pensamientos y ese miedo a perder el control, es una carga muy pesada que te impide vivir. Quiero que sepas que lo que te está pasando es una situación muy común, aunque no lo parezca, y que no te estás volviendo loco.
Lo que describes encaja perfectamente con un cuadro de Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC), posiblemente en una de sus variantes existenciales o filosóficas. Tu mente se ha quedado atrapada en un bucle de pensamientos intrusivos sobre la inmensidad del universo, la vida o la existencia, y estos pensamientos te generan una ansiedad extrema. El miedo a "volverte loco" es una de las obsesiones más comunes en este tipo de trastorno.
Lo que está pasando en tu mente
Obsesiones (los pensamientos): Tu mente se ha enganchado a preguntas sobre el universo, la inmensidad y tu lugar en el mundo. Son ideas que, aunque son abstractas, tu mente las percibe como una amenaza real, lo que te genera una ansiedad abrumadora. El pensamiento más temido, "me estoy volviendo loco", es una meta-obsesión; es la obsesión sobre tu propia obsesión, y es lo que realmente te paraliza.
Compulsiones (las acciones): Aunque no son rituales como lavarse las manos, las compulsiones en tu caso son principalmente mentales y conductuales. El "sobrepensar" y el intentar "resolver" el problema dándole vueltas a los pensamientos es tu principal compulsión. También lo es tomarte la presión constantemente, ya que es un intento de buscar control sobre la sensación de miedo en tu cuerpo.
El ciclo vicioso: El ciclo funciona así: la obsesión (el universo infinito) te causa miedo. El miedo te lleva a sobrepensar o a buscar control (compulsión). La compulsión solo alivia la ansiedad por un momento, pero a largo plazo, fortalece la obsesión y te hace sentir aún más atrapado.
¿Qué puedes hacer?
La buena noticia es que este ciclo se puede romper. Sin embargo, es algo muy difícil de hacer sin ayuda profesional.
Busca ayuda psicológica especializada. Este es el paso más importante y urgente. Debes buscar un psicólogo con experiencia en TOC. La terapia más efectiva para esto es la Terapia de Exposición y Prevención de Respuesta (EPR). Un terapeuta te guiará para que te expongas gradualmente a tus miedos (por ejemplo, a los pensamientos sobre el universo) sin realizar la compulsión de sobrepensar. Esto le enseña a tu cerebro que la ansiedad es manejable y que disminuye por sí sola.
Comprende que el problema no son los pensamientos. Los pensamientos sobre el universo son ideas abstractas que casi todo el mundo tiene en algún momento. La diferencia es que, en tu caso, tu mente ha interpretado que esas ideas son peligrosas. La solución no es dejar de pensar en el universo, sino cambiar la relación que tienes con esos pensamientos.
No busques respuestas ni consuelo. La respuesta a la pregunta "¿por qué me pasa esto?" es que tienes un patrón de pensamiento obsesivo-compulsivo. Si buscas la certeza de que no te estás volviendo loco, solo alimentarás el ciclo. La clave es aprender a vivir con la incertidumbre y aceptar el hecho de que no puedes controlar todos tus pensamientos.
Tu mente no se ha "estropeado". Simplemente, ha entrado en un ciclo que la ha sobrecargado. Con la ayuda adecuada, puedes recuperar el control sobre tu vida y tu paz mental.
Un saludo,
Pilar Rapela
Lo que describes encaja perfectamente con un cuadro de Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC), posiblemente en una de sus variantes existenciales o filosóficas. Tu mente se ha quedado atrapada en un bucle de pensamientos intrusivos sobre la inmensidad del universo, la vida o la existencia, y estos pensamientos te generan una ansiedad extrema. El miedo a "volverte loco" es una de las obsesiones más comunes en este tipo de trastorno.
Lo que está pasando en tu mente
Obsesiones (los pensamientos): Tu mente se ha enganchado a preguntas sobre el universo, la inmensidad y tu lugar en el mundo. Son ideas que, aunque son abstractas, tu mente las percibe como una amenaza real, lo que te genera una ansiedad abrumadora. El pensamiento más temido, "me estoy volviendo loco", es una meta-obsesión; es la obsesión sobre tu propia obsesión, y es lo que realmente te paraliza.
Compulsiones (las acciones): Aunque no son rituales como lavarse las manos, las compulsiones en tu caso son principalmente mentales y conductuales. El "sobrepensar" y el intentar "resolver" el problema dándole vueltas a los pensamientos es tu principal compulsión. También lo es tomarte la presión constantemente, ya que es un intento de buscar control sobre la sensación de miedo en tu cuerpo.
El ciclo vicioso: El ciclo funciona así: la obsesión (el universo infinito) te causa miedo. El miedo te lleva a sobrepensar o a buscar control (compulsión). La compulsión solo alivia la ansiedad por un momento, pero a largo plazo, fortalece la obsesión y te hace sentir aún más atrapado.
¿Qué puedes hacer?
La buena noticia es que este ciclo se puede romper. Sin embargo, es algo muy difícil de hacer sin ayuda profesional.
Busca ayuda psicológica especializada. Este es el paso más importante y urgente. Debes buscar un psicólogo con experiencia en TOC. La terapia más efectiva para esto es la Terapia de Exposición y Prevención de Respuesta (EPR). Un terapeuta te guiará para que te expongas gradualmente a tus miedos (por ejemplo, a los pensamientos sobre el universo) sin realizar la compulsión de sobrepensar. Esto le enseña a tu cerebro que la ansiedad es manejable y que disminuye por sí sola.
Comprende que el problema no son los pensamientos. Los pensamientos sobre el universo son ideas abstractas que casi todo el mundo tiene en algún momento. La diferencia es que, en tu caso, tu mente ha interpretado que esas ideas son peligrosas. La solución no es dejar de pensar en el universo, sino cambiar la relación que tienes con esos pensamientos.
No busques respuestas ni consuelo. La respuesta a la pregunta "¿por qué me pasa esto?" es que tienes un patrón de pensamiento obsesivo-compulsivo. Si buscas la certeza de que no te estás volviendo loco, solo alimentarás el ciclo. La clave es aprender a vivir con la incertidumbre y aceptar el hecho de que no puedes controlar todos tus pensamientos.
Tu mente no se ha "estropeado". Simplemente, ha entrado en un ciclo que la ha sobrecargado. Con la ayuda adecuada, puedes recuperar el control sobre tu vida y tu paz mental.
Un saludo,
Pilar Rapela
Hola! Gracias por compartir cómo te sientes. Lo que describes —pensamientos repetitivos sobre el universo, miedo a “volverte loco”, sensación de vacío e intranquilidad física— es algo que muchas personas experimentan cuando están ansiosas. La mente, bajo estrés, puede volverse muy obsesiva: se engancha en un tema (en tu caso, la inmensidad del universo) y le da vueltas sin parar, generando miedo y síntomas físicos. Eso no significa que te estés “volviendo loco”; suele ser un cuadro de ansiedad con pensamientos intrusivos.
La ansiedad puede intensificar sensaciones corporales (como palpitaciones o presión alta) y eso alimenta aún más el miedo. Es un círculo.
Algunas cosas que pueden ayudarte mientras buscas apoyo profesional:
* Reconocer que los pensamientos no son peligrosos aunque sean incómodos; vienen de la ansiedad.
* Limitar el tiempo de rumiación (por ejemplo, posponerlos: “ya pensaré en esto a las 5 pm por 10 minutos” y luego volver a tus actividades).
* Practicar técnicas de respiración y relajación para calmar el cuerpo (respirar lento y profundo activa el sistema nervioso parasimpático).
* Buscar ayuda profesional: un psicólogo especializado en ansiedad puede enseñarte herramientas para salir de ese ciclo, y un médico puede descartar causas físicas y, si hace falta, prescribir medicación para estabilizar.
No estás solo ni “mal de la cabeza”; es la ansiedad la que hace que todo parezca tan intenso. Con acompañamiento y estrategias adecuadas, esto se puede revertir y recuperar la calma.
Un abrazo
La ansiedad puede intensificar sensaciones corporales (como palpitaciones o presión alta) y eso alimenta aún más el miedo. Es un círculo.
Algunas cosas que pueden ayudarte mientras buscas apoyo profesional:
* Reconocer que los pensamientos no son peligrosos aunque sean incómodos; vienen de la ansiedad.
* Limitar el tiempo de rumiación (por ejemplo, posponerlos: “ya pensaré en esto a las 5 pm por 10 minutos” y luego volver a tus actividades).
* Practicar técnicas de respiración y relajación para calmar el cuerpo (respirar lento y profundo activa el sistema nervioso parasimpático).
* Buscar ayuda profesional: un psicólogo especializado en ansiedad puede enseñarte herramientas para salir de ese ciclo, y un médico puede descartar causas físicas y, si hace falta, prescribir medicación para estabilizar.
No estás solo ni “mal de la cabeza”; es la ansiedad la que hace que todo parezca tan intenso. Con acompañamiento y estrategias adecuadas, esto se puede revertir y recuperar la calma.
Un abrazo
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