Qué puedo hacer con mis pensamientos, siempre se ponen en lo peor. Llevo mucho tiempo así, he llegad

¿Has acudido a terapia? La medicación es un buen apoyo en algunas ocasiones, una herramienta que complementa la terapia ya que, por si misma, la medicación no soluciona nada. De manera que te animo a empezar terapia psicológica para poder gestionar todos esos pensamientos y bucles, que entiendo que son muy desestabilizantes y te hacen la vida más difícil. Ya verás como en terapia puedes aprender a trabajar en técnicas que te ayudarán a reducir su frecuencia e intensidad, para que puedas retomar el control de tu vida y de tus fuerzas.

Gracias por abrirte y compartir algo tan profundo. Puedo imaginar lo duro que ha sido sostener tanto durante tanto tiempo, intentando ser fuerte por todos, mientras por dentro sientes que ya no puedes más.
Lo primero que quiero decirte es que no estás solo/a, y que tus palabras muestran algo muy valioso: el deseo de salir de ese dolor, aunque ahora parezca imposible. Eso ya es un primer paso importante.

A veces, cuando llevamos años viviendo para los demás, sin permitirnos sentir o expresarnos libremente, el cuerpo y la mente empiezan a pedir atención de formas muy intensas. No porque estemos “mal”, sino porque hay partes de nosotros que necesitan ser escuchadas y comprendidas.

Puede ayudarte comenzar a observar qué emoción hay detrás de esos pensamientos: ¿culpa, tristeza, miedo, agotamiento…? En lugar de luchar contra ellos, intenta escucharlos como un mensaje de una parte tuya que pide comprensión, descanso o ternura.
Pregúntate:

“¿Desde cuándo me siento así?”
“¿Qué necesitaba en ese momento que no pude darme?”

Estas preguntas no buscan culpables, sino abrir un espacio de conciencia y compasión hacia ti.

Entiendo que ahora las circunstancias no te permitan dejar el trabajo ni hacer grandes cambios externos, pero sí puedes empezar con algo pequeño: reconocerte, permitirte sentir, buscar apoyo profesional o emocional, y darte el permiso de poner un poco de atención en ti cada día.

Tu historia no termina en lo que has vivido hasta ahora. Lo que hoy duele tanto puede transformarse cuando empiezas a mirar tu vida con comprensión, no con exigencia.

Hola. Quiero que sepas que siento mucho el inmenso dolor y la carga que estás sintiendo en este momento. Es completamente comprensible que te sientas agotada y desesperada después de llevar tanto tiempo con esos pensamientos y sintiendo que tienes que cargar con todo. Lo que describes es una situación de mucho sufrimiento, y es muy valiente de tu parte haber escrito esto y estar buscando una salida a ese bucle.

Es importante que sepas que hay ayuda disponible y que puedes salir de este estado.

Por favor, la prioridad absoluta en este momento es tu seguridad. Dado que mencionas autolesiones y pensamientos de hacerte daño, te pido que busques ayuda inmediatamente. No tienes que pasar por esto sola ni un minuto más.

Para salir de este bucle, lo más importante es buscar ayuda profesional de forma continuada. Un profesional de la salud mental (psicólogo, psiquiatra) puede proporcionarte las herramientas necesarias para manejar tus pensamientos negativos, trabajar en la culpa y la carga, y encontrar maneras de vivir tu propia vida.

Mucho ánimo.

Con el tema de hacer parar a la mente... poco hay que se pueda hacer. Es decir, la mente siempre está en modo Resolución de Problemas.
La pregunta importante es que cosas has intentado hacer para callar esos pensamientos y cuanto coste te ha supuesto intentar acallar a la mente.
"Si no lo tienes, lo tendrás" ese es el lema de nuestras cabezas. Cuanto más luchas, más te hundes. Es como las arenas movedizas.
El trabajo no es fácil, desde este punto de vista, pero es realista llegar a convivir con esos pensamientos y a pesar de ello, seguir haciendo aquello que es importante para ti.

Antes que nada, lamento muchísimo por todo lo que estás pasando. Has llevado una carga enorme durante años y es normal sentirte agotada, no puedes más y es licito sentirlo. No tienes que enfrentarlo sola, honestamente te animo a que, con ayuda profesional puedas trabajar ese bucle y recuperar la calma poco a poco.
Si te animas, te sugiero que cojas hora para una primera valoración, y así empezar a cuidar también de ti.

Lo que estás viviendo no es algo que una persona pueda sostener sin desgaste. Has cargado con responsabilidades muy grandes, durante mucho tiempo, sin un espacio real donde poder soltar, y eso agota profundamente. Cuando el cuerpo y la mente han tenido que estar tanto tiempo en alerta y sosteniendo a otros, es normal que aparezcan pensamientos que se van a lo peor y sensaciones de que ya no puedes más. No es falta de capacidad, es agotamiento.
Ahora mismo lo que necesitas no es exigirte más ni “ser fuerte”. Necesitas un lugar donde tú también puedas ser cuidado/a. Un espacio donde puedas expresar lo que sientes sin miedo a desbordarte, donde puedas sentir que alguien está contigo mientras atraviesas esto. Y eso es algo que sí se puede trabajar.
En terapia vamos a ir poco a poco: ayudando a que tu mente pueda calmarse, aprendiendo a reconocer y sostener tus emociones sin que te arrastren, y sobre todo recuperando tu propio lugar, sin tener que anularte por los demás. También iremos trabajando los límites, para que puedas seguir estando para los que quieres, pero sin desaparecer tú.
Para que este proceso funcione, es importante hacerlo en sesiones de manera regular. No se trata de cambiarlo todo de golpe, ni de presionarte. Es un acompañamiento paso a paso, con presencia real, para ayudarte a recuperar tu energía, tu ánimo y tu manera de habitar tu vida sin sentirte solo/a con todo.
Podemos empezar cuando estés preparado/a. Yo voy a estar ahí en ese recorrido, contigo.

Entiendo tu malestar. Cuando llevamos muchos años sosteniéndolo todo —familia, trabajo, responsabilidades— es normal que aparezca agotamiento emocional y pensamientos negativos. No es que “no puedas”, es que has tenido que ser fuerte demasiado tiempo y tu mente está saturada.

En terapia trabajamos en tres líneas:

Calmar el bucle de pensamientos sin luchar contra ellos.

Recuperar espacio para ti, aunque sea poco a poco.

Reorganizar cargas para que no tengas que hacerlo todo sola.

No estás rota. Estás cansada, y eso tiene tratamiento. Un profesional de la psicología puede ayudarte.

Un saludo.

Pilar Rapela.

Hola,

Gracias por abrirte de una forma tan honesta. No es fácil poner en palabras tanto dolor, sobre todo cuando llevas tanto tiempo aguantando, tirando hacia adelante por todos, sin apenas espacio para ti. Se nota el cansancio, la saturación emocional, y esa sensación de no poder más. No hay nada débil en lo que sientes; es una reacción muy humana ante años de sobrecarga y soledad emocional.

Cuando la mente se acostumbra a vivir en modo supervivencia, termina interpretando cada cosa desde el miedo o el agotamiento. Por eso, esos pensamientos tan oscuros no son el problema en sí, sino una señal del sufrimiento que llevas acumulando. No hay que luchar contra ellos a la fuerza, sino aprender a comprenderlos y a cuidar la parte de ti que los está sosteniendo desde hace tanto.

Sería importante que pudieras tener un espacio de acompañamiento psicológico, donde poco a poco vayas soltando ese peso, y aprendiendo a cuidar de ti con la misma entrega con la que siempre has cuidado de los demás. No tienes por qué hacerlo sola; pedir ayuda es una forma de comenzar a sanar.

Un saludo,
David

Siento mucho todo lo que estás viviendo. Por lo que describes, llevas muchos años sosteniendo una carga muy grande sin apenas espacio para ti, y eso termina dejando al cuerpo y a la mente sin energía. Es comprensible que te sientas atrapada y agotada.

Cuando los pensamientos se van siempre “a lo peor” y aparecen ideas de hacerte daño o de no poder más, es importante no afrontarlo sola. Te animo a pedir ayuda profesional cuanto antes: contactar con tu médico o acudir a urgencias si sientes riesgo de hacerte daño. También puedes llamar a los teléfonos de atención inmediata (024, gratuito y disponible 24 h).

A nivel psicológico, el primer paso no es cambiar los pensamientos de golpe, sino entender qué emociones los sostienen y empezar a recuperar espacios de autocuidado y calma. A veces basta con que alguien te acompañe a ordenar todo lo que llevas dentro para que empiece a aliviarse un poco.

Si lo deseas, puedes pedirme una cita online y trabajaremos juntas para que recuperes seguridad, descanso y una sensación de vida propia, no solo de responsabilidad constante. No tienes que hacerlo sola, y pedir ayuda es ya una forma de empezar a salir del bucle.

Hola, gracias por tu mensaje. Describes una situación continuada de supervivencia en solitario. Sin duda eso lleva a un estado interno de preocupación permanente, como si siempre hubiera una amenaza a la que combatir. Nuestro cuerpo es muy sensible a los hábitos, principalmente a los que funcionan. Esa preocupación continua, en un sentido primario, ha servido para que sigáis en pie. Digo en un sentido primario porque sólo ocurre en términos de supervivencia, es decir, sobrevives, pero no vives plenamente. Una parte tuya siente que te tiene que estar preocupando constantemente para que sigas manteniendo la atención a eso que ha conseguido que sobrevivas. Los pensamientos negativos y catastrofistas no son tus enemigos, son una herramienta que funcionó (y funciona) sólo en un sentido. Otras partes de ti desean vivir sin esa carga y lo reclaman de todas las formas, incluyendo las más dañinas para ti como la autolesión. Esa polarización debería ser tratada en terapia para conseguir un acercamiento y una reducción del conflicto interno. Si el contexto aprieta, es natural que siga cierta preocupación, sin embargo, no tiene que ser catastrofista ni alarmante, sino adecuada a la situación.
Espero que estas palabras te ayuden en algún sentido, si necesitas más acompañamiento, aquí me tienes, mucho ánimo

Hola buenas tardes.

Entiendo que estás sufriendo mucho con estos pensamientos recurrentes y que entras en bucle y no puedes salir.Esto te genera ansiedad.
Según pensamos nos sentimos.Si piensas en negativo acabas magnificando y distorsionando la realidad.
La terapia cognitiva- conductual es la que mejor ha demostrado la eficacia en el tratamiento de un caso como el tuyo
Te aconsejo acudas a un psicologo que trabaje desde esta linea para ayudarte en estos momentos de tu vida dandote herramientas que te ayuden afrontar y reconducir estos pensamientos.Tambien te puede ayudar ejercicios de relajación y meditación.
Espero haberte orientado.
Saludos

Hola. Es necesario a aprender a manejar tus pensamientos para que no llegues a una situación límite con tus ideas. Es un proceso de cambio que lleva tiempo y a veces ayuda, si no puedes controlarlo y afecta a tu ánimo.
Y si sientes que tu vida, ya no es la tuya, será necesario recuperarla, para priorizarte y encontrar los límites adecuados ante los demás o situaciones de tu vida.
A veces es importante pedir ayuda para no seguir cargando con todo el peso solo.

ChatGPT Plus

Lamento mucho todo lo que estás atravesando. Has cargado con muchísimo durante años, y es comprensible que te sientas agotada y sin salida. Es importante que no sigas afrontando esto solo: esos pensamientos tan duros y el cansancio emocional necesitan un espacio seguro donde puedas hablar y recibir apoyo profesional. Hay formas de aliviar ese peso y empezar a reconstruirte poco a poco. Si quieres, podemos trabajarlo juntos en consulta, para que puedas encontrar calma y recuperar fuerzas para ti mismo, no solo para los demás.

Hola, gracias por compartir tu situación, lamento que estés viviendo una situación tan complicada. Es importante, con el tema de los pensamientos, algo que ya estás haciendo, que es que los estás comenzando a identificar. Es decir, saber que es una voz que no eres tú y que está mediando tu sentir y comportamiento. Cuando te expresas "qué puedo hacer con los pensamientos, siempre me ponen en lo peor", esto habla de que te estás empezando a desidentificar de ellos y ese es el primer paso para poder abordarlos. Luego sería realizar un trabajo profundo de cuestionamiento de los mismos y poder transformarlos, poniéndolos en duda, cuestionando mi mente y en ese sentido no dejarme arrastrar por los escenarios que va creando. En el trabajo terapéutico que desarrollo en mi consulta, el manejo de los pensamientos es una cuestión primordial que abordo en uno u otro momento de la terapia, porque no se pueden promover o mantener cambios significativos si no hay aparejado un cambio en nuestros pensamientos. En este sentido, si quisieras hacer cambios significativos y profundos en tu vida te invito a comenzar un proceso psicoterapéutico y empezar a coger las riendas de tu vida. Si quieres podemos acordar sesión y empezar a ello. Gracias. Un abrazo grande

La respuesta sería mirar más para adentro tuyo para poder conectar con lo que tu necesitas, empezar a vivir más para ti y no darle tanto poder a esos pensamientos negativos que no te ayudan a vivir de una manera satisfactoria y plena.

Lamento mucho que estés pasando por algo tan doloroso. Lo que cuentas es muchísimo para pasarlo sola. No tienes por qué llevarlo tú sola y lo que estás sintiendo merece atención inmediata y apoyo real. Es muy importante que si estás teniendo pensamientos de hacerte daño ahora mismo o de acabar con todo, por favor busca ayuda urgente. Puedes llamar al 112 y sobre todo habla con alguien cercano sobre esto. También puedes llamar a una línea de apoyo emocional como el 024 en España (atención 24 horas, gratuita y confidencial), te ayudarán a ventilar emocionalmente.
A veces, cuando llevamos muchos años cuidando de nuestro entorno es completamente normal sentirse agotado y sin fuerzas. Tus pensamientos negativos no son una señal de debilidad, sino una señal de saturación emocional profunda. Como medidas iniciales para intentar encontrarte algo mejor (sin exigirte un resultado inmediato y enorme) se me ocurren: permitirte decir “hoy no puedo con esto”, agendarte 15 minutos al día sin culpa o pedir ayuda en pequeñas funciones a un familiar. Es muy importante sacar los pensamientos catastróficos de tu cabeza, escribirlos o decírselo a alguien en quine confíes hace que pierdan fuerza. Lo que no se dice, pesa más. Y por supuesto coger cita con un profesional para reflexionar sobre qué ha ocurrido desde esa fecha de 1999 que mencionas. Un abrazo, Reyes.