Que puedo hacer si desde que tuve experiencias transfobas con psicólogos me da miedo volver a ir a t
12
respuestas
Que puedo hacer si desde que tuve experiencias transfobas con psicólogos me da miedo volver a ir a terapia por si se vuelve a repetir? Y en el caso de que me animara a volver a ir tampoco podría comunicarme ni expresarme porque tengo mutismo selectivo desde pequeño, al final me quedo bloqueado y por más que quiera hablar no me sale la voz, igual a veces consigo decir un "si" o un "no" o palabras sueltas en general, pero han sido muy pocas veces las que he logrado eso. Nunca he conseguido tener una conversación fluida con nadie fuera de mi familia, lo que hace bastante difícil que alguien pueda ayudarme tanto de forma presencial como por videollamada. No se que hacer pero quiero poder superar esto y poder tener una vida normal
Gracias por compartir lo que te pasa, entiendo lo difícil que habrá sido ponerlo en palabras después de las experiencias negativas que comentas. Tus miedos son totalmente comprensibles: haber vivido situaciones de transfobia en un espacio que debería ser seguro puede generar mucha desconfianza, y a la vez convives con las dificultades del mutismo selectivo, que hacen aún más complejo el inicio de un proceso terapéutico.
Quiero transmitirte que existen profesionales con sensibilidad y formación específica para acompañar de manera respetuosa, libre de juicios y adaptada a tus necesidades. El mutismo selectivo no es un obstáculo para trabajar en terapia: hay muchas estrategias que no requieren únicamente la palabra hablada (uso de la escritura, recursos creativos, comunicación gradual, etc.), y se avanza a tu ritmo, sin presiones.
Lo más importante es que no tengas que volver a sentirte invalidado ni expuesto. El primer paso podría ser buscar un profesional que te genere confianza, que tenga experiencia en diversidad y que pueda ofrecerte un espacio seguro donde la comunicación pueda irse construyendo poco a poco.
El hecho de que quieras superar estas dificultades y tener una vida más plena ya es un avance muy valioso. No estás solo en esto: con el acompañamiento adecuado, es posible trabajar tanto en el miedo a acudir a terapia como en las barreras del mutismo.
Un abrazo,
Elbire Arana
Psicóloga General Sanitaria
Colegiada M-42807
Quiero transmitirte que existen profesionales con sensibilidad y formación específica para acompañar de manera respetuosa, libre de juicios y adaptada a tus necesidades. El mutismo selectivo no es un obstáculo para trabajar en terapia: hay muchas estrategias que no requieren únicamente la palabra hablada (uso de la escritura, recursos creativos, comunicación gradual, etc.), y se avanza a tu ritmo, sin presiones.
Lo más importante es que no tengas que volver a sentirte invalidado ni expuesto. El primer paso podría ser buscar un profesional que te genere confianza, que tenga experiencia en diversidad y que pueda ofrecerte un espacio seguro donde la comunicación pueda irse construyendo poco a poco.
El hecho de que quieras superar estas dificultades y tener una vida más plena ya es un avance muy valioso. No estás solo en esto: con el acompañamiento adecuado, es posible trabajar tanto en el miedo a acudir a terapia como en las barreras del mutismo.
Un abrazo,
Elbire Arana
Psicóloga General Sanitaria
Colegiada M-42807
Hola, gracias por compartir tu situación y miedo. Es cierto que se requiere cierta confianza en dar el primer paso de conectar con un psicólogo o cualquier otra persona de apoyo con el que te sientas seguro y puedas permitirte recibir apoyo, y eso va a ser cuestión de ejercitar esa confianza por tu parte, conjuntamente con hacer equipo con la persona que hagas terapia para que también te haga sentir que puedes expresarte en la medida de lo posible con la maxima apertura y trasparencia para poder ayudarte a traspasar esos miedos y bloqueos que comentas.
Siento que es importante tener en cuenta de que en el caso de que te animaras a volver a recibir apoyo terapeutico, se requiere, al menos desde mi punto de vista, mucha escucha, delicadeza y sensibilidad por parte del terapeuta para ir al ritmo de lo que tu expresión te permita, sin forzar, para que la expresión pueda permitirse salir poco a poco y con mayor fluidez, y que tu sistema nervioso pueda sentirse mas y mas seguro de poder expresarse. Quizás se podría combinar la palabra con texto escrito, para facilitarlo, abrirse a diversas formas creativas de comunicación para poder adaptarnos a lo que en tu caso facilite el desbloqueo.
Así que mi consejo seria que te animes a confiar y a abrirte a la posibilidad de que puedes recibir apoyo siempre y cuando veas que el o la terapeuta tienes ciertas cualidades que podrías necesitar en tu caso como la sensibilidad, la paciencia, la escucha, y la creatividad para poder encontrar un punto de union terapéutico para que facilite tu comunicación, superes ese miedo y bloqueo y puedas hacer vida normal.
Muchos ánimos!
Y, si necesitas cualquier cosa, no dudes en consultar.
Siento que es importante tener en cuenta de que en el caso de que te animaras a volver a recibir apoyo terapeutico, se requiere, al menos desde mi punto de vista, mucha escucha, delicadeza y sensibilidad por parte del terapeuta para ir al ritmo de lo que tu expresión te permita, sin forzar, para que la expresión pueda permitirse salir poco a poco y con mayor fluidez, y que tu sistema nervioso pueda sentirse mas y mas seguro de poder expresarse. Quizás se podría combinar la palabra con texto escrito, para facilitarlo, abrirse a diversas formas creativas de comunicación para poder adaptarnos a lo que en tu caso facilite el desbloqueo.
Así que mi consejo seria que te animes a confiar y a abrirte a la posibilidad de que puedes recibir apoyo siempre y cuando veas que el o la terapeuta tienes ciertas cualidades que podrías necesitar en tu caso como la sensibilidad, la paciencia, la escucha, y la creatividad para poder encontrar un punto de union terapéutico para que facilite tu comunicación, superes ese miedo y bloqueo y puedas hacer vida normal.
Muchos ánimos!
Y, si necesitas cualquier cosa, no dudes en consultar.
Es comprensible que después de experiencias transfóbicas tengas miedo de volver a terapia. La clave está en encontrar un espacio seguro donde tu identidad sea respetada desde el primer momento. También quiero transmitirte que el mutismo selectivo no es una barrera insalvable: en terapia se pueden usar recursos escritos, apoyos visuales o formas de comunicación no verbal, de manera que no dependas solo de hablar.
Lo importante es que no tengas que forzarte y que el ritmo lo marques tú. En mi caso, adapto el proceso a cada persona y ofrezco un entorno de respeto y confianza. Si quieres, podemos hacer una primera toma de contacto para que valores si te sientes cómodo trabajando conmigo.
Lo importante es que no tengas que forzarte y que el ritmo lo marques tú. En mi caso, adapto el proceso a cada persona y ofrezco un entorno de respeto y confianza. Si quieres, podemos hacer una primera toma de contacto para que valores si te sientes cómodo trabajando conmigo.
Gracias por compartir esto tan abiertamente. Lo que estás describiendo considero que es totalmente válido: haber tenido esas experiencias puede generar miedo y desconfianza hacia la terapia, y sumado al mutismo selectivo entiendo tu temor sobre si comenzar o no. Considero que conseguir un terapeuta con el cual sentirse comodo/a puede llevar su tiempo, pero si sientes que necesitas superar esto y generar cambios te invito a seguir probando e ir con algun psicologo/a que puedas con calma y tiempo ir sintiéndote mas comodo y adquiriendo herramientas para poder abordar los distintos problemas que uno pueda tener.
Hola,
Lamento mucho que tus experiencias de acompañamiento hayan sido dolorosas y que incluso hayas sentido discriminación. Algunas de esas situaciones podrían ser denunciables, y comprendo profundamente el miedo que puede generarte volver a confiar en profesionales de la psicología; yo misma lo tendría.
Aun así, me gustaría acercarte un atisbo de luz: existen psicólogas, piscóloges y psicólogos sensibilizados y con conciencia de las violencias estructurales que atravesamos quienes habitamos cuerpos y realidades que se alejan de una supuesta “normalidad”. Yo misma trabajo desde un compromiso firme con la dignidad de toda persona. También quiero recordarte que hay luchas sociales que colectivizan y politizan el malestar, transformándolo en una forma de denuncia frente a violencias que, muchas veces, permanecen invisibilizadas.
Al mismo tiempo, es importante respetar los propios tiempos: el decir, el nombrar o incluso el no nombrar. A veces el cuerpo actúa protegiéndonos. El silencio también habla, y las palabras no siempre llegan cuando aún se busca el sentido. Por eso, mucho amor y calma en ese silencio: primero comprenderlo, para después ver cómo gestionarlo. Y siempre, siempre, con una apuesta generosa y comprometida hacia la compasión con una misme.
Lamento mucho que tus experiencias de acompañamiento hayan sido dolorosas y que incluso hayas sentido discriminación. Algunas de esas situaciones podrían ser denunciables, y comprendo profundamente el miedo que puede generarte volver a confiar en profesionales de la psicología; yo misma lo tendría.
Aun así, me gustaría acercarte un atisbo de luz: existen psicólogas, piscóloges y psicólogos sensibilizados y con conciencia de las violencias estructurales que atravesamos quienes habitamos cuerpos y realidades que se alejan de una supuesta “normalidad”. Yo misma trabajo desde un compromiso firme con la dignidad de toda persona. También quiero recordarte que hay luchas sociales que colectivizan y politizan el malestar, transformándolo en una forma de denuncia frente a violencias que, muchas veces, permanecen invisibilizadas.
Al mismo tiempo, es importante respetar los propios tiempos: el decir, el nombrar o incluso el no nombrar. A veces el cuerpo actúa protegiéndonos. El silencio también habla, y las palabras no siempre llegan cuando aún se busca el sentido. Por eso, mucho amor y calma en ese silencio: primero comprenderlo, para después ver cómo gestionarlo. Y siempre, siempre, con una apuesta generosa y comprometida hacia la compasión con una misme.
Hola ¿qué tal? En tu situación, lo más importante es buscar un profesional especializado en psicología afirmativa LGTBI+ y con experiencia en trauma, que comprenda profundamente estos contextos y respete de manera estricta tu identidad y tus ritmos comunicativos. Un buen terapeuta se adaptará y podrá apoyarte incluso si la comunicación verbal directa es muy limitada, utilizando recursos como la escritura, dibujos, señas, tableros de comunicación o apoyos visuales. Además, podemos trabajar contigo herramientas para que poco a poco sientas más confianza y seguridad, siempre respetando tu velocidad y celebrando cada pequeño avace. También existen alternativas como la terapia online escrita, donde puedes comunicarte por chat, emails, formularios, sin obligación de hablar en voz alta, y para muchas personas con mutismo selectivo y miedo a revivir experiencias negativas esto supone un primer paso más amable. Lo he realizado en algunas ocasiones y ha sido un éxito.
En consulta, mi prioridad sería ofrecerte un espacio totalmente seguro y libre de juicios, donde la validación y el respeto sean la base para poder abordar tanto el miedo a la transfobia, como los bloqueos del mutismo selectivo, sin exigencias ni presiones; acompañaré a tu lado cada intento de comunicación, por pequeño que sea, y juntos exploraríamos poco a poco estrategias para reducir el miedo, fortalecer tu autoestima y darte herramientas para autodefensa emocional y autorregulación.
Buscar ayuda es un acto valiente y mereces una atención a tu medida, donde tu identidad y tu forma de comunicarte sean siempre respetadas. Con el acompañamiento adecuado, podrás avanzar hacia la vida auténtica y tranquila que deseas. Un saludo, Silvia.
En consulta, mi prioridad sería ofrecerte un espacio totalmente seguro y libre de juicios, donde la validación y el respeto sean la base para poder abordar tanto el miedo a la transfobia, como los bloqueos del mutismo selectivo, sin exigencias ni presiones; acompañaré a tu lado cada intento de comunicación, por pequeño que sea, y juntos exploraríamos poco a poco estrategias para reducir el miedo, fortalecer tu autoestima y darte herramientas para autodefensa emocional y autorregulación.
Buscar ayuda es un acto valiente y mereces una atención a tu medida, donde tu identidad y tu forma de comunicarte sean siempre respetadas. Con el acompañamiento adecuado, podrás avanzar hacia la vida auténtica y tranquila que deseas. Un saludo, Silvia.
Es comprensible tu miedo tras experiencias negativas. Existen profesionales con formación en diversidad y trauma que pueden ofrecerte un espacio seguro y respetuoso. El mutismo selectivo no es una barrera: podemos empezar con escritura o gestos, sin presiones. Poco a poco, con el acompañamiento adecuado, es posible avanzar y recuperar confianza.
Saludos.
Pilar Rapela
Saludos.
Pilar Rapela
Entiendo perfectamente tu miedo, sobre todo después de haber vivido experiencias dolorosas con profesionales que no te trataron con el respeto y la sensibilidad que mereces. Lo que viviste fue injusto, y es normal que ahora te cueste confiar de nuevo en la terapia. Tus miedos tienen sentido.
Al mismo tiempo, el hecho de que quieras superar esto y busques una vida más tranquila y libre ya habla de tu fuerza y de que hay una parte de ti que sigue confiando en que es posible. Ese deseo es muy valioso.
En cuanto a la dificultad para expresarte, que tengas mutismo selectivo no significa que no puedas avanzar en terapia. Existen psicólogos que están acostumbrados a trabajar con distintas formas de comunicación: puedes expresarte escribiendo, dibujando, usando notas de voz o incluso aplicaciones de texto a voz. La terapia no tiene que ser solo hablar cara a cara; puede adaptarse a ti, y un buen profesional debería estar dispuesto a hacerlo.
Quizá un primer paso, en lugar de pensar en una conversación fluida, podría ser algo más sencillo: buscar un terapeuta que tenga experiencia tanto en diversidad de género como en dificultades de comunicación, y enviarle un mensaje escrito explicando desde el principio tu situación. De esa manera sabrás de antemano si la persona está abierta a acompañarte con respeto y paciencia.
No tienes que hacerlo todo de golpe ni forzarte a hablar si no te sale. El camino puede empezar despacio, pero lo importante es que no estás solo en querer cambiar, y sí es posible encontrar a alguien que se adapte a ti y te dé la seguridad que necesitas.
Al mismo tiempo, el hecho de que quieras superar esto y busques una vida más tranquila y libre ya habla de tu fuerza y de que hay una parte de ti que sigue confiando en que es posible. Ese deseo es muy valioso.
En cuanto a la dificultad para expresarte, que tengas mutismo selectivo no significa que no puedas avanzar en terapia. Existen psicólogos que están acostumbrados a trabajar con distintas formas de comunicación: puedes expresarte escribiendo, dibujando, usando notas de voz o incluso aplicaciones de texto a voz. La terapia no tiene que ser solo hablar cara a cara; puede adaptarse a ti, y un buen profesional debería estar dispuesto a hacerlo.
Quizá un primer paso, en lugar de pensar en una conversación fluida, podría ser algo más sencillo: buscar un terapeuta que tenga experiencia tanto en diversidad de género como en dificultades de comunicación, y enviarle un mensaje escrito explicando desde el principio tu situación. De esa manera sabrás de antemano si la persona está abierta a acompañarte con respeto y paciencia.
No tienes que hacerlo todo de golpe ni forzarte a hablar si no te sale. El camino puede empezar despacio, pero lo importante es que no estás solo en querer cambiar, y sí es posible encontrar a alguien que se adapte a ti y te dé la seguridad que necesitas.
Gracias por compartir algo tan personal
Entiendo tu miedo y lo difícil que debió ser vivir esas experiencias en un espacio donde esperabas cuidado, y también lo frustrante que puede ser sentirte bloqueado cuando quieres expresarte.
Lo más importante ahora es que sepas que existen profesionales sensibles y con la formación necesaria, y que tienes derecho a un acompañamiento libre de juicios. La terapia no debería ser un lugar que te genere miedo ni te exija, sino un espacio que se adapte a lo que necesitas y a tus tiempos. Como psicólogos, podemos acompañar con recursos más allá de la palabra; escritura, dibujo, arte, música…. que pueden ayudarte a expresarte sin la presión de tener que hablar de inmediato.
El simple hecho de que pongas en palabras tu deseo de “poder tener una vida normal” muestra una parte tuya que quiere ser escuchada. En consulta, lo más valioso es darle un lugar a lo que sientes y a cómo se manifiesta, incluso en el silencio, para ir construyendo poco a poco un espacio seguro donde tu voz (de la forma que aparezca) pueda tener lugar. Te animo a que busques un espacio terapéutico en el que te sientas cómodo, cuidado y acompañado a tu propio ritmo.
Entiendo tu miedo y lo difícil que debió ser vivir esas experiencias en un espacio donde esperabas cuidado, y también lo frustrante que puede ser sentirte bloqueado cuando quieres expresarte.
Lo más importante ahora es que sepas que existen profesionales sensibles y con la formación necesaria, y que tienes derecho a un acompañamiento libre de juicios. La terapia no debería ser un lugar que te genere miedo ni te exija, sino un espacio que se adapte a lo que necesitas y a tus tiempos. Como psicólogos, podemos acompañar con recursos más allá de la palabra; escritura, dibujo, arte, música…. que pueden ayudarte a expresarte sin la presión de tener que hablar de inmediato.
El simple hecho de que pongas en palabras tu deseo de “poder tener una vida normal” muestra una parte tuya que quiere ser escuchada. En consulta, lo más valioso es darle un lugar a lo que sientes y a cómo se manifiesta, incluso en el silencio, para ir construyendo poco a poco un espacio seguro donde tu voz (de la forma que aparezca) pueda tener lugar. Te animo a que busques un espacio terapéutico en el que te sientas cómodo, cuidado y acompañado a tu propio ritmo.
Lamento mucho que hayas vivido experiencias transfóbicas en terapia; es totalmente comprensible que ahora tengas miedo de volver a pasar por lo mismo. Pero también es importante recordar que existen profesionales con formación y sensibilidad que sí pueden ofrecerte un espacio seguro, respetuoso y libre de juicios.
Respecto al mutismo selectivo, hay distintas formas de trabajar en terapia sin necesidad de que todo dependa de la voz. Por ejemplo, usar la escritura, dibujos, chats o mensajes previos a la sesión puede ser un apoyo muy útil para que puedas expresarte poco a poco y a tu ritmo. No tienes que forzarte a hablar de inmediato; el trabajo terapéutico puede empezar con herramientas alternativas que después vayan facilitando la comunicación oral.
Dar el paso es difícil, pero no imposible: empezar con un profesional que te inspire confianza, marcando desde el principio tus miedos y necesidades de comunicación, puede ayudarte a sentirte más seguro y acompañado.
Si lo deseas, puedo ofrecerte un espacio terapéutico donde trabajemos a tu ritmo, respetando tu identidad y tus formas de comunicarte, para que poco a poco recuperes confianza y avances hacia la vida que deseas construir. Un abrazo.
Respecto al mutismo selectivo, hay distintas formas de trabajar en terapia sin necesidad de que todo dependa de la voz. Por ejemplo, usar la escritura, dibujos, chats o mensajes previos a la sesión puede ser un apoyo muy útil para que puedas expresarte poco a poco y a tu ritmo. No tienes que forzarte a hablar de inmediato; el trabajo terapéutico puede empezar con herramientas alternativas que después vayan facilitando la comunicación oral.
Dar el paso es difícil, pero no imposible: empezar con un profesional que te inspire confianza, marcando desde el principio tus miedos y necesidades de comunicación, puede ayudarte a sentirte más seguro y acompañado.
Si lo deseas, puedo ofrecerte un espacio terapéutico donde trabajemos a tu ritmo, respetando tu identidad y tus formas de comunicarte, para que poco a poco recuperes confianza y avances hacia la vida que deseas construir. Un abrazo.
Entiendo tu miedo después de esas malas experiencias, pero quiero transmitirte que sí es posible encontrar un espacio seguro y respetuoso. El mutismo selectivo puede trabajarse también en la edad adulta con exposición muy gradual, comunicación escrita como primer paso y técnicas de manejo de la ansiedad. Incluso puedes iniciar la terapia escribiendo, para no sentirte forzado a hablar desde el primer momento. Lo importante es dar un paso con un profesional que trabaje desde la empatía y la experiencia en ansiedad social/mutismo. Poco a poco podrás ganar confianza y recuperar tu voz
Hola,
Gracias por compartir algo tan íntimo y valiente. Es completamente comprensible que, después de haber vivido experiencias transfóbicas en contextos terapéuticos, sientas miedo ante la idea de volver a confiar. Haber pasado por eso deja una huella profunda, y el simple hecho de que sigas buscando cómo avanzar demuestra una enorme fortaleza y deseo de sanar.
En tu caso, el mutismo selectivo y la dificultad para expresarte verbalmente no son un obstáculo insalvable. En terapia podemos construir, paso a paso, un espacio seguro y respetuoso, donde no haya juicios ni presiones, y donde puedas sentirte libre para comunicarte a tu ritmo, sin miedo a ser malinterpretado o forzado a hablar. Podemos utilizar distintos recursos para facilitar la expresión —no siempre tiene que ser con palabras—, priorizando que te sientas en control y comprendido en todo momento.
Juntos podemos construir un proceso terapéutico adaptado a ti, en el que poco a poco vayas ganando seguridad, confianza y autonomía para expresarte. No es un camino rápido ni sencillo, pero sí posible. Y con el acompañamiento adecuado, podrás ir encontrando tu propia voz, a tu manera y a tu ritmo, hasta sentir que puedes comunicarte y vivir con mayor libertad y tranquilidad.
Un saludo,
David
Gracias por compartir algo tan íntimo y valiente. Es completamente comprensible que, después de haber vivido experiencias transfóbicas en contextos terapéuticos, sientas miedo ante la idea de volver a confiar. Haber pasado por eso deja una huella profunda, y el simple hecho de que sigas buscando cómo avanzar demuestra una enorme fortaleza y deseo de sanar.
En tu caso, el mutismo selectivo y la dificultad para expresarte verbalmente no son un obstáculo insalvable. En terapia podemos construir, paso a paso, un espacio seguro y respetuoso, donde no haya juicios ni presiones, y donde puedas sentirte libre para comunicarte a tu ritmo, sin miedo a ser malinterpretado o forzado a hablar. Podemos utilizar distintos recursos para facilitar la expresión —no siempre tiene que ser con palabras—, priorizando que te sientas en control y comprendido en todo momento.
Juntos podemos construir un proceso terapéutico adaptado a ti, en el que poco a poco vayas ganando seguridad, confianza y autonomía para expresarte. No es un camino rápido ni sencillo, pero sí posible. Y con el acompañamiento adecuado, podrás ir encontrando tu propia voz, a tu manera y a tu ritmo, hasta sentir que puedes comunicarte y vivir con mayor libertad y tranquilidad.
Un saludo,
David
¿No has encontrado la respuesta que necesitabas? ¡Envía tu pregunta!
¿Tu caso es similar? Estos profesionales pueden ayudarte:
Todos los contenidos publicados en Doctoralia, especialmente preguntas y respuestas, son de carácter informativo y en ningún caso deben considerarse un sustituto de un asesoramiento médico.