Tengo un problema que no puedo controlar. Cuando conozco a alguien y me gusta, me empiezo a obsesion

Hola, muchas gracias por dejar tu pregunta.
En primer lugar decirte que hasta cierto punto cuando aparecen cambios en nuestra vida es normal querer controlar, sin embargo el primer punto que creo que es positivo que te preguntes es "¿Para qué quiero controlar todo esto?", posiblemente la respuesta te de algunas claves.
Por otra parte creo que es importante que valores qué quieres y como esperas que sean tus relaciones de pareja, y así decidas que componentes quieres que estén presentes o no en ellas.
Por último, me gustaría invitarte a que si esta situación se repite puedas buscar ayuda profesional, si así lo decidieses estaría encantado de poder ayudarte.
Espero haberte podido ayudar, un saludo.

Buenos días.
Ante todo, debería ud saber si estos pensamientos recurrentes de tipo obsesivo le ocurren sólo en esta situación o también en otras parecidas o, incluso, diferentes. Es necesario que acuda a un profesional para que realicen una buena entrevista psicológica y una evaluación y para confirmar o descartar la presencia de algún tipo de posible patología que le llevara a tener este tipo de pensamientos.
Saludos.

Hola!
Cuando aparecen pensamientos obsesivos, intrusivos o que nos generan malestar, es importante observarlos sin resistencia, es decir, sin obligarlos a salir de nuestra cabeza, reñirnos por ello, evitarlos o bien actuar "dando la razón" a este pensamiento y por lo tanto generando que se mantenga.

Normalmente estos pensamientos aparecen de experiencias previas, algunas tempranas, que han ido generando distintas creencias y que ahora no resultan funcionales.

Te invito a poder trabajar todo esto.

Saludos.

Hola! Estoy con el compañero en la pregunta a hacerte para reflexionar, ¿Para que controlar?. Hay una frase que ayuda mucho en cuanto a las obsesiones y es "Aceptar las cosas que no puedo cambiar, tener valor para cambiar las que si puedo y sabiduría para reconocer la diferencia." Como tu dices, intentas controlar lo que esta sucediendo, incluso intentando anticipar lo que puede ocurrir con pensamientos como " no va a llegar a nada" y preparándote para el desastre. Esto muchas veces creemos que funciona para defendernos de aquello que tememos (que salga mal) y es una posible función de los pensamientos irracionales, que creemos que nos ayudan a defendernos de posibles consecuencias negativas, pero nada más lejos de la realidad, te hacen sufrir durante el proceso, preparándote para el desastre y no dejándote disfrutar y al final, queriendo saber que es lo que has hecho "mal" para que haya terminado así. Tal como te digo al principio, hay cosas que puedes cambiar y cosas que no, una de las que sí es pedir ayuda y dejarte sostener por un profesional que pueda acompañarte en tu proceso. Mucho ánimo y espero haber podido ayudarte un poco. Para cualquier cosa, quedo a tu disposición. ¡Un saludo!

Hola! Aunque te resulte complicado ahora mismo los pensamientos obsesivos pueden reducirse si se cambian ciertos hábitos. Probablemente esos pensamientos obsesivos se disparen en situaciones concretas y al intentar controlarlos o evitarlos se vuelven más fuertes y persistentes.
Una vez se identifiquen las situaciones en las que ocurre se tratará de generar respuestas alternativas que disminuyan tu nivel de ansiedad y poco a poco esos pensamientos se mitiguen. Si por ejemplo comienzas a prestar mucha atención a las personas que sigue o las interacciones que tiene con otras personas en las redes quizás te ayude el tomar distancia con el teléfono móvil. Para ayudarte en este proceso e identificar cuáles son las situaciones que disparan tu ansiedad siempre puedes contar con la ayuda de un profesional. Saludos!

Buenas;
Cierto es que no son las situaciones, sino nuestros pensamientos, los responsables de nuestras emociones y conductas.
Esos pensamientos si son irracionales, como bien has identificado, son los responsables de tus conductas disfuncionales.
Sería deseable que cambiaras esos pensamientos por otros racionales.
Intentar evitar pensamientos obsesivos cuando te vienen
la cabeza probablemente no resulte eficaz y te vuelvan otra vez.
Intentar controlar las situaciones no es útil, es casi imposible y más cuando las situaciones son acciones de los demás.
Podrías probar cambiar las conductas disfuncionales que llevas haciendo hasta ahora, aunque coexistan los pensamientos irracionales. Probablemente así obtendrás resultados diferentes que te ayudarán a su vez a tener pensamientos alternativos y funcionales, útiles, que te acerquen a tus objetivos.
Si te gusta un chico intenta hacer conductas que te den probabilidad de acercamiento sin hacer caso a pensamientos catastrofistas. Cuando veas resultados que quizás no esperabas y para bien, probablemente iras eliminando los pensamientos obsesivos y obteniendo otros más racionales y hasta nuevas creencias
Si no lo consigues tú sola, podrías acudir a un psicólogo@ que te podría ayudar
Ánimo!.

¡Hola! Parece que tienes una estrategia que te asegura el no arriesgarte en absoluto en temas de amor, ya que si tú decides de antemano que la relación no va a prosperar no te arriesgas a sufrir el desamor. Quizás tengas cierto miedo a poder enamorarte o a tener una relación más profunda con una persona (esto solamente es una hipótesis).
Me parece importante que te puedas plantear el comenzar un proceso psicoterapéutico y así poder entender mejor cómo te sientes, cómo es tu proceso a la hora de enamorarte, etc.
Espero haberte ayudado o por lo menos ampliado tus hipótesis.
¡Un saludo!

Gracias por compartir con nosotros su preocupación.

He leído las siete respuestas de mis compañeros de Santiago de Compostela, Badalona, Valencia, Bilbao, Barcelona, Sevilla y Badajoz. Sus reflexiones le habrán ayudado a conocer mejor qué es la obsesión y cuál es su significado. Describen –con gran acierto- que la obsesión es un estado de hiperreflexividad, o bucle ante una situación determinada, esto le habrá ayudado a conocer mejor qué es la obsesión y cuál es su significado. De aquí que nos diga:

“Es una situación que me sobrepasa, me genera rabia e impotencia porque no entiendo porque por el simple hecho de que me pueda llamar alguien la atención me pase todo eso y se cree todo eso en mi cabeza, cosa que me hace tener que alejarme para frenarlo.”

Por nuestra parte, partiendo del concepto de síntoma como estrategia de supervivencia. Trataremos de explicarle cómo se producen las obsesiones.

Comenzaremos nuestra reflexión formulando una pregunta:

¿Qué convierte un problema de la vida –por ejemplo, “conocer a alguien que me gusta”- en un problema psicológico o psiquiátrico?:

Respuesta: la hiperreflexividad.

Cuando la lógica reflexividad (atención, preocupación) requerida por un problema de la vida –por ejemplo, decidirme a salir o no con alguien que me gusta- deja de ser clarificadora de los que nos pasa y de servir para alguna solución y, en lugar, nos mete en un bucle o situación que nos envuelve, empezamos a tener un problema clínico.

¿Por qué puedo crear un problema clínico por el hecho de que “alguien me guste”?

Porque “conocer a un chico que le guste” y mostrarse autentica –ser uno mismo-implica asumir un riesgo.

Cada nuevo encuentro con un chico que le guste es una posibilidad que puede aceptar o rechazar. La vida hay que hacerla con riesgo y puede equivocarse al tomar la decisión de aceptarlo o rechazarlo.

Si la situación en la que la vida le coloca, forzándola a elegir no fuese permanente, la vida le parecería espeluznante. Porque conoce siempre el riesgo de preferir no ser usted misma, la más autentica, y en tal caso la decisión de acercarse al chico equivale –a largo plazo- a un suicidio, a una suplantación.

Entendemos entonces bien, que la decisión de comprometerme con el chico puede hacerse con zozobra y angustia, temerosamente –con obsesión-. Puede dudar sobre cual debe ser su decisión –si avanzar o no en la nueva relación-, puede que no quiera arriesgarse, pero la vida le empuja, le obliga a decidirse –porque prefiere la compañía a la soledad-.

Si decide no tomar ninguna decisión, puede no hallar modo de sostenerse sobre e mar de dudas en que ha caído –la hiperreflexión- y, en efecto, caer hasta el fondo. El fondo es la desesperación, y para defenderse de esa desesperación y angustia recurre a distintas técnicas como son los psicofármacos -usted dice: “Esto me causa ansiedad, insomnio, y me tomo unas pastillas que supuestamente me ayudan a dejar de sobrepensar”-.

Pero existe un modo positivo de enfrentarse a la angustia, la calma. Debe de calmarse en medio de la congoja y el apuro cuando al sentirse perdida –por las dudas- se grite a sí misma ¡calma¡. No es la “angustia”, sino es “calma” que la supera y pone en ella orden, donde verdaderamente toma posesión de su vida y, en efecto, sentir que controla su vida.

Decidirse –acercarse o alejarse del chico-, no significa, por lo tanto tomar una decisión cualquiera, simplemente actuar. Quiere decir, que debe realizar una acción concreta y personal –comprometerse con el paso que se dé y asumir la responsabilidad del éxito o fracaso-.

Desde esta perspectiva antropológica y existencial, es fácil comprender por qué un problema de la vida termina convirtiéndose en un problema clínico –en este caso obsesivo-.

¿Qué camino debo seguir?

Debe pues elegir una postura concreta –aceptarlo o rechazarlo-. Hay en la persona la ineludible impresión de que su vida es algo que tiene que ser elegido, y esto que nos vemos obligados a elegir, no es otra cosa que la carrera de nuestra existencia.

Pero no siempre es fácil esta elección porque al temor de la decisión se une el temor a la soledad. Por lo tanto, el planteamiento de nuestra vida debemos contemplarlo como un desarrollo personal que va forjándose mediante elecciones, elegir no hacer nada, aferrarnos a la hiperreflexividad, es lo opuesto a la salud mental.

Espero y deseo que mi reflexión haya podido ayudarla.

Un saludo,
Juan José Regadera, Murcia.

Hola! Entiendo el malestar que te puede generar esta situación y la valentía por tu parte de compartirlo con todos nosotros. Evaluar cómo han sido tus relaciones hasta ahora (tanto de pareja, como amistades, al igual que las relaciones familiares) podría ser interesante para poder dilucidar dónde puede haberse creado esta conducta y cómo se ha ido desarrollando en el tiempo. Esto nos ayudaría a poder empezar a trabajar en ello. También el entrenamiento en habilidades sociales para poder dejar atrás poco a poco esa evitación que haces ante estos acontecimientos creo que te sería de gran ayuda, por lo que te animo a que te pongas en contacto con un profesional para trabajar juntos en ello. Quedo a tu disposición. ¡Un saludo!

Habría que explorar en terapia cómo es su relación con los hombres, qué parejas tuvo anteriormente, si eso le sucede también en otras relaciones (familiares, etc.) No consiste en borrar o detener tales pensamientos, ojalá fuera tan fácil pero no, se trata de explorar sus sentimientos, situaciones pasadas que le recuerden a los hechos actuales y su historia de vida en general. Todo ello con el objetivo de llegar a las causas y raíces de su malestar actual; una vez culminado ese proceso, seguramente usted podrá gozar de un amor más "sano", menos sufriente ante la adversidad

Lo que estás experimentando parece ser una forma de ansiedad y pensamientos obsesivos en tus relaciones personales. Es importante hablar con un profesional de la salud mental, para explorar estas preocupaciones y desarrollar estrategias para manejar tus pensamientos y emociones de manera más saludable. No estás solo en esto, y la ayuda profesional puede ser efectiva para superar estos patrones de comportamiento.

Hola, creo por las respuestas de mis compañeros que se ha podido hacer una idea clara de la obsesión. Ahora es importante determinar porque se produce, que tipo de circunstancias le llevan a ello, no de manera genérica sino profundizando en la raíz del problema. Tomar la decisión adecuada no es fácil, por supuesto, determinar nuestro planteamiento de vida, asumirlo y realizarlo es sin duda uno de las decisiones personales más difíciles de tomar.
Contar con la ayuda adecuada te ayudará tomar la decisión, asumirla y ponerla en práctica, eliminando las obsesiones y el malestar que generan.
Confío en haberte ayudado.
Te deseo lo mejor.
Un saludo.