Cuando una relación larga y significativa termina, como la tuya, que duró 9 años, es completamente n
11
respuestas
Cuando una relación larga y significativa termina, como la tuya, que duró 9 años, es completamente natural que haya un proceso de duelo. Este proceso implica aceptar la pérdida, adaptarse a una vida sin esa persona, reubicar emocionalmente a ese vínculo, y eventualmente abrirse a nuevas experiencias.
Pero cuando el duelo no se resuelve completamente (por múltiples razones: dolor profundo, vínculos no cerrados, idealización de la relación, o incluso traumas en esa relación), pueden quedarse "atascadas" ciertas emociones. Y eso se manifiesta en lo que estás describiendo en el día a día en cosas como:
-Bloqueo emocional: como si una parte de ti todavía estuviera ligada a ese pasado.
-Ambivalencia con el amor: quieres abrirte, pero algo te frena o te fastidia.
-Rechazo o apatía hacia nuevas relaciones: a veces es una forma inconsciente de protegerse del dolor, del abandono o de repetir patrones. Te propongo que explores esta parte que puede estar sucediendo e impidiéndote rehacer tu vida.
Si sientes que necesitas ayuda para transitar esto no dudes en ponerte contacto conmigo y concertar una cita, estoy aquí para ayudarte.
Pero cuando el duelo no se resuelve completamente (por múltiples razones: dolor profundo, vínculos no cerrados, idealización de la relación, o incluso traumas en esa relación), pueden quedarse "atascadas" ciertas emociones. Y eso se manifiesta en lo que estás describiendo en el día a día en cosas como:
-Bloqueo emocional: como si una parte de ti todavía estuviera ligada a ese pasado.
-Ambivalencia con el amor: quieres abrirte, pero algo te frena o te fastidia.
-Rechazo o apatía hacia nuevas relaciones: a veces es una forma inconsciente de protegerse del dolor, del abandono o de repetir patrones. Te propongo que explores esta parte que puede estar sucediendo e impidiéndote rehacer tu vida.
Si sientes que necesitas ayuda para transitar esto no dudes en ponerte contacto conmigo y concertar una cita, estoy aquí para ayudarte.
Perdona pero es una respuesta ya dada lo que compartes. Un abrazo!
Que me da algo
Cuando una relación larga y significativa termina, como la tuya tras 9 años, es normal atravesar un proceso de duelo. Pero cuando ese duelo no se cierra del todo (por el dolor, la idealización, o heridas no resueltas) pueden quedar bloqueos emocionales que se manifiestan en el presente: dificultad para abrirse al amor, apatía ante nuevas relaciones o una sensación de estar anclado al pasado.
Estas reacciones no son fallos, sino mecanismos de protección frente al miedo a repetir el sufrimiento. Explorar este proceso puede ayudarte a entender qué te frena y a recuperar tu capacidad de conectar de forma sana y libre.
Estas reacciones no son fallos, sino mecanismos de protección frente al miedo a repetir el sufrimiento. Explorar este proceso puede ayudarte a entender qué te frena y a recuperar tu capacidad de conectar de forma sana y libre.
Entiendo que en este momento puedes estar experimentando muchas emociones difíciles, y quiero que sepas que esto es completamente válido. Desde un enfoque integrador y basado en trauma y apego, mi objetivo es ofrecerte un espacio seguro donde puedas explorar estas emociones sin juicio. Trabajaremos juntos para comprender cómo tus experiencias pasadas pueden estar influyendo en tus relaciones actuales, tus respuestas emocionales y tu sentido de seguridad. Esto nos permitirá reconstruir vínculos más seguros y fortalecer tu capacidad para regular el estrés y conectar de manera más auténtica con los demás y contigo mismo/a.
Hola
Entiendo muy bien lo que describes… después de una relación tan larga como la tuya, es normal sentirse emocionalmente bloqueada o desconectada. A veces, una parte de nosotros sigue ligada a ese pasado, y eso puede hacernos rechazar nuevas relaciones o sentirnos frustradas sin saber por qué.
Si sientes que hay algo ahí que todavía no ha podido cerrarse del todo, podemos ayudarte a explorarlo con calma y sin juicios. Somos un equipo de tres psicólogas, Anna, Judit y Berta, y estaremos encantadas de conocerte y acompañarte en este proceso.
Un abrazo,
Entiendo muy bien lo que describes… después de una relación tan larga como la tuya, es normal sentirse emocionalmente bloqueada o desconectada. A veces, una parte de nosotros sigue ligada a ese pasado, y eso puede hacernos rechazar nuevas relaciones o sentirnos frustradas sin saber por qué.
Si sientes que hay algo ahí que todavía no ha podido cerrarse del todo, podemos ayudarte a explorarlo con calma y sin juicios. Somos un equipo de tres psicólogas, Anna, Judit y Berta, y estaremos encantadas de conocerte y acompañarte en este proceso.
Un abrazo,
Requiere una psicoterapia de resolucion del conflicto y liberar la pérdida.
Entiendo que terminar una relación de 9 años no es algo menor, y lo que estás sintiendo es completamente válido. Es muy probable que estés atravesando un duelo no resuelto, y eso puede generar bloqueos emocionales, rechazo a nuevas relaciones o una especie de ambivalencia afectiva. Estas reacciones muchas veces son mecanismos de defensa: intentan protegerte del dolor, del abandono o de repetir experiencias pasadas. No significa que no seas capaz de amar de nuevo, sino que hay heridas que quizás aún necesitan ser miradas y procesadas. Te invito a explorar esto en un espacio terapéutico. Si sentís que solo no podés, no estás fallando: es un paso de autocuidado pedir ayuda. Estoy acá para acompañarte cuando estés listo.
Hola, leo una respuesta aunque tengo suponer una situación dolorosa de ruptura emocional con tu pareja.
Que triste, siempre es mejor decir las cosas que negarlas, aunque quizás sea importantísimo decir aquello que más cuesta y que no recuerdas inmediatamente. Las palabras… son las herramientas más poderosas frente al dolor emocional, ese que se puede escuchar sin necesidad de anestesiarse con fármacos. Ellas son las que abren tu mundo… hacia los pensamientos que se oponen a la aceptación y superación. Quizás hay una subestimación propia o una idealización de algún rasgo de tu ex… o incluso ha habido una negación prolongada…
Claro que has hecho un camino largo con esta persona, pero no imposible de desandar y descubrir lo que libera tu vida y deseos.
He comentado lo de “las palabras” porque lo esencial es que te escuches en tu manera de vivir, los sentimientos que el conflicto significa y por alguien que te oriente en tu propio deseo - un psicoanalista, alguien que trabaja con el deseo, los conflictos reprimidos y las subjetividades.
La espero si desea consultar o comunicarse.
Ánimo,
Saludos, Francisco
Que triste, siempre es mejor decir las cosas que negarlas, aunque quizás sea importantísimo decir aquello que más cuesta y que no recuerdas inmediatamente. Las palabras… son las herramientas más poderosas frente al dolor emocional, ese que se puede escuchar sin necesidad de anestesiarse con fármacos. Ellas son las que abren tu mundo… hacia los pensamientos que se oponen a la aceptación y superación. Quizás hay una subestimación propia o una idealización de algún rasgo de tu ex… o incluso ha habido una negación prolongada…
Claro que has hecho un camino largo con esta persona, pero no imposible de desandar y descubrir lo que libera tu vida y deseos.
He comentado lo de “las palabras” porque lo esencial es que te escuches en tu manera de vivir, los sentimientos que el conflicto significa y por alguien que te oriente en tu propio deseo - un psicoanalista, alguien que trabaja con el deseo, los conflictos reprimidos y las subjetividades.
La espero si desea consultar o comunicarse.
Ánimo,
Saludos, Francisco
Entiendo lo doloroso que puede ser atravesar el final de una relación tan larga y significativa. Es normal que, tras 9 años compartidos, aparezca un gran vacío y un profundo miedo a la soledad. El duelo implica aceptar la pérdida, adaptarse a la vida sin esa persona y, con el tiempo, abrirse a nuevas experiencias.
Cuando este proceso queda incompleto, pueden quedar emociones atascadas que se manifiestan en bloqueos emocionales, ambivalencia hacia el amor o rechazo a nuevas relaciones. En muchos casos, ese miedo a la soledad también está relacionado con patrones aprendidos en el pasado (como experiencias de abandono, inseguridad o falta de apoyo emocional) que dificultan la confianza y el avance. No obstante, cada caso es único, y estos factores pueden expresarse de manera distinta en cada persona.
Trabajar en terapia estas emociones y patrones puede ayudarte a reconciliarte con la soledad como parte natural de la vida, comprender qué te frena y recuperar la confianza tanto en ti misma como en la posibilidad de crear vínculos más sanos. Con acompañamiento, este miedo puede transformarse en una oportunidad de crecimiento y fortaleza personal.
Cuando este proceso queda incompleto, pueden quedar emociones atascadas que se manifiestan en bloqueos emocionales, ambivalencia hacia el amor o rechazo a nuevas relaciones. En muchos casos, ese miedo a la soledad también está relacionado con patrones aprendidos en el pasado (como experiencias de abandono, inseguridad o falta de apoyo emocional) que dificultan la confianza y el avance. No obstante, cada caso es único, y estos factores pueden expresarse de manera distinta en cada persona.
Trabajar en terapia estas emociones y patrones puede ayudarte a reconciliarte con la soledad como parte natural de la vida, comprender qué te frena y recuperar la confianza tanto en ti misma como en la posibilidad de crear vínculos más sanos. Con acompañamiento, este miedo puede transformarse en una oportunidad de crecimiento y fortaleza personal.
Cuando una relación larga termina es normal vivir un proceso de duelo. A veces, ese duelo queda “atascado” por la intensidad del vínculo, la idealización o el dolor vivido, y entonces aparecen bloqueos emocionales, apatía hacia nuevas relaciones o ambivalencia con el amor. Esto no significa que no puedas rehacer tu vida, sino que necesitas trabajar esas heridas para liberarte. Si lo deseas, puedo ayudarte en terapia a transitar este proceso y recuperar tu bienestar.
Quiero que sepas, antes de nada, que lo que estás viviendo no significa que estés rota ni que haya algo “mal” en ti. Cuando una relación larga, profunda y significativa llega a su fin —como la tuya, después de 9 años— tu mundo interno necesita tiempo para reorganizarse. Y ese proceso no es lineal, no es rápido y tampoco sigue un calendario fijo. No estás fallando: estás transitando algo que requiere coraje, paciencia y mucho amor propio.
Es normal que, tras una ruptura así, aparezca el miedo a la soledad. No como un capricho, sino como una reacción natural del ser humano: venimos de construir un proyecto, de compartir rutinas, sueños, intimidad y seguridad; de repente ese pilar desaparece y tu mente intenta protegerte de cualquier posible dolor futuro. Por eso pueden aparecer el bloqueo, la apatía, o ese sentir que no te ilusiona nadie o que algo dentro de ti se cierra justo cuando te gustaría abrirte.
Muchas veces, cuando el duelo no ha terminado de resolverse, queda una parte emocional “enganchada” al pasado: a cómo fueron las cosas, a lo que pudo haber sido o incluso a lo que significaba esa persona en tu vida. Y esa parte sigue actuando hoy. Se manifiesta en ambivalencia, en dudas, en un cansancio emocional que te agota sin que tú entiendas por qué.
Pero lo importante aquí es lo siguiente: esto se puede trabajar, y tú tienes dentro todas las capacidades necesarias para avanzar. No estás condenada a quedarte donde estás. El miedo a la soledad no es un enemigo: es un indicador, un mensaje que te dice dónde necesitas fortalecer tu amor propio, dónde puedes crecer y dónde puedes reconstruir tu seguridad interna.
Este momento puede convertirse en un punto de inflexión muy poderoso si lo afrontas desde el compromiso contigo misma. Y tú eres capaz de hacerlo. Tienes recursos, tienes sensibilidad, tienes conciencia de lo que te pasa, y eso ya es un paso enorme. Muchas personas tardan años en lograr simplemente poner en palabras lo que tú ya has identificado.
Te animo a que empieces poco a poco a reconectar contigo:
A dedicar tiempo a ti, a tus intereses, a tus deseos.
A reforzar tu círculo social, a cultivar amistades sanas y espacios donde te sientas acompañada.
A entrenar tus habilidades sociales desde la calma: conversar, abrirte, permitir que otras personas te conozcan sin expectativas ni presiones.
A recordarte cada día que no necesitas una relación para sentirte completa; necesitas sentirte completa para elegir, con libertad, la relación adecuada.
Y sobre todo, quiero transmitirte confianza: confianza en tu capacidad para sanar, para avanzar, para reconectar con la vida y con el amor desde un lugar más sereno, más maduro y más auténtico. Lo que hoy sientes como miedo, mañana puede convertirse en fuerza. Lo que hoy te bloquea, con trabajo personal, puede abrir camino a una libertad emocional que ahora mismo te cuesta imaginar.
Es normal que, tras una ruptura así, aparezca el miedo a la soledad. No como un capricho, sino como una reacción natural del ser humano: venimos de construir un proyecto, de compartir rutinas, sueños, intimidad y seguridad; de repente ese pilar desaparece y tu mente intenta protegerte de cualquier posible dolor futuro. Por eso pueden aparecer el bloqueo, la apatía, o ese sentir que no te ilusiona nadie o que algo dentro de ti se cierra justo cuando te gustaría abrirte.
Muchas veces, cuando el duelo no ha terminado de resolverse, queda una parte emocional “enganchada” al pasado: a cómo fueron las cosas, a lo que pudo haber sido o incluso a lo que significaba esa persona en tu vida. Y esa parte sigue actuando hoy. Se manifiesta en ambivalencia, en dudas, en un cansancio emocional que te agota sin que tú entiendas por qué.
Pero lo importante aquí es lo siguiente: esto se puede trabajar, y tú tienes dentro todas las capacidades necesarias para avanzar. No estás condenada a quedarte donde estás. El miedo a la soledad no es un enemigo: es un indicador, un mensaje que te dice dónde necesitas fortalecer tu amor propio, dónde puedes crecer y dónde puedes reconstruir tu seguridad interna.
Este momento puede convertirse en un punto de inflexión muy poderoso si lo afrontas desde el compromiso contigo misma. Y tú eres capaz de hacerlo. Tienes recursos, tienes sensibilidad, tienes conciencia de lo que te pasa, y eso ya es un paso enorme. Muchas personas tardan años en lograr simplemente poner en palabras lo que tú ya has identificado.
Te animo a que empieces poco a poco a reconectar contigo:
A dedicar tiempo a ti, a tus intereses, a tus deseos.
A reforzar tu círculo social, a cultivar amistades sanas y espacios donde te sientas acompañada.
A entrenar tus habilidades sociales desde la calma: conversar, abrirte, permitir que otras personas te conozcan sin expectativas ni presiones.
A recordarte cada día que no necesitas una relación para sentirte completa; necesitas sentirte completa para elegir, con libertad, la relación adecuada.
Y sobre todo, quiero transmitirte confianza: confianza en tu capacidad para sanar, para avanzar, para reconectar con la vida y con el amor desde un lugar más sereno, más maduro y más auténtico. Lo que hoy sientes como miedo, mañana puede convertirse en fuerza. Lo que hoy te bloquea, con trabajo personal, puede abrir camino a una libertad emocional que ahora mismo te cuesta imaginar.
Expertos
Preguntas relacionadas
- Mi ex y yo tuvimos una relación que duró seis años y estemos separados, le pedí otra oportunidad y que ves lo que la terapia me ha ayudado a ser, y no me dice que no o que si, solo saca todos los errores que cometí, y le dije te entiendo muy bien, si no deseas nada solo dímelo directamente, y me dijo…
- Me afecta psicológicamente no tener pareja. Soy una chica soltera de larga duración. Llevo sin pareja 6 años y durante este tiempo, no he conseguido salir más de 1 mes con un chico. En los primeros años de estar soltera no me afectaba pero últimamente siento que me está afectando mucho porque no me siento…
- Mi ex me dice que me quiere pero le cuesta volver conmigo y según el no sabe el por qué, eso me lo dice por chat pero cuando me ve personal me trata como su pareja, a qué se debe eso ?
- Llevo 4 años soltera y tengo un bloqueo para lograr entrar en una nueva relación, cabe resaltar que solo he tenido 1 novio con el cual dure 9 años, no se a veces quisiera abrirme al amor pero como que todo me fastidia
- Hola tengo 70 años no tengo hermanos y estoy soltero tengo miedo de morir solo que puedo hacer?
- Mi ex me dejó después de 4 años de relación de un día para otro, le pregunto que si tiene otro y me dice que no que quiere estar sola, no sé si sea verdad, o tenga otro realmente, será que vuelve ?
¿Quieres enviar tu pregunta?
Nuestros expertos han respondido 7 preguntas sobre Miedo a la soledad
¿Tu caso es similar? Estos profesionales pueden ayudarte:
Todos los contenidos publicados en Doctoralia, especialmente preguntas y respuestas, son de carácter informativo y en ningún caso deben considerarse un sustituto de un asesoramiento médico.