Últimamente mi imaginación a distintas situaciones las siento muy reales. Muchas veces me imagino en

Hola, te agradezco lo valiente que has sido al reconocer lo que estás experimentando y buscar ayuda para entenderlo mejor. Lo que describes puede con una ensoñación excesiva maladaptativa o simplemente con síntomas derivados de una excesiva ansiedad. Estos patrones de pensamiento pueden surgir como una forma de escapar de la realidad o de lidiar con emociones difíciles, pero con el tiempo pueden volverse abrumadores y disfuncionales.

Es importante que te des cuenta de que no estás solo en esto y que hay formas de abordar estos pensamientos intrusivos. Te sugiero considerar la posibilidad de buscar apoyo profesional de un terapeuta o psicólogo que pueda ayudarte a entender mejor tus pensamientos y emociones, así como a desarrollar estrategias para manejarlos de manera más saludable.

El tratamiento desde la terapia cognitivo-conductual, podría ayudarte a identificar y desafiar patrones de pensamiento, así como a adquirir técnicas de manejo del estrés y la ansiedad. Además, la práctica de la atención plena y la meditación pueden ser útiles para aprender a estar más presente en el momento presente y reducir la rumiación sobre escenarios imaginarios.

Recuerda que este proceso puede llevar tiempo y esfuerzo, pero es un paso importante hacia el bienestar emocional y la recuperación de tu vida cotidiana. No dudes en buscar ayuda y apoyo en este viaje hacia una salud mental más sólida.


Es clave que tengas muy en cuenta que los pensamientos no son más que eso, pensamientos, con ayuda de un proceso terapéutico puedes llegar a tomar distancia de ellos y "defusionarte", quitarles el peso y valor que te están generando malestar.

Espero haberte sido de ayuda,

Un saludo :),

Conchita

¡Buenas! Normalmente las personas tenemos ideas y pensamientos constantes, incluso cuando somos niños y niñas solemos tener pensamientos mágicos como el que usted describe. Sin embargo, cuando dichos pensamientos, ideas o deseos empiezan a ser constantes, recurrentes e interrumpen nuestro bienestar en el día a día es necesario que contactes con un especialista para resolver esas preocupaciones que nos pueden generar ansiedad y nos quitan ese bienestar en nuestra salud mental. Por lo tanto, si necesitas hablarlo y apoyo puedes contar conmigo. ¡Un abrazo!

Esos pensamientos puedes aprender a manejarlos a través de la terapia y conocer su procedencia, que también me parece una parte muy importante del proceso. Un abrazo.

Estos pensamientos que aparecen de forma intrusiva en nuestra mente, aunque son pensamientos irracionales y los identificamos como tales, nos generan un elevado grado de ansiedad, por la creencia de que pudieran ser ciertos. La clave está en observarlos y distanciarnos de ellos , y verlos como son , pensamientos y no acciones.
Al intentar eliminarlos conseguimos justo lo contrario, reforzarlos y hacerlos más fuertes. Te recomiendo que busques apoyo profesional que seguro te ayudará a aprender a manejar esos pensamientos y a gestionar tu malestar. Un abrazo

Hola, los pensamientos irracionales e intrusivos en su aparición son fuente de un profundo malestar psicológico. En ocasiones tan sólo por valorar como cierta la posibilidad de que llegaran a cumplirse. Por otra parte habrás observado que todos los intentos por evitarlos tan sólo conlleva mayor presencia e intensidad de los mismos. Creo que lo más importante es llegar al origen de porque se producen. Realizar una buena evaluación psicológica que ponga el problema en el contexto adecuado. Después de ello establecer la pauta terapéutica más conveniente. Seguro que mejorarás.
Confío en haberte ayudado.
Te deseo lo mejor.
Un saludo.

¡Hola! totalmente de acuerdo con mis compañeros en cuanto a lo comentado y ratificar que consideres hablar con un psicólogo/a que pueda ayudarte a explorar y entender mejor tus pensamientos y emociones y bucear en su origen para así entenderlo a través de la evaluación psicológica. No estás solo en esto y hay formas de abordar estos problemas, un saludo.,

Creo que has dado el paso más importante, que es buscar ayuda y te felicito por ello. Por lo que describes es posible que esos recursos imaginativos te hayan servido en la infancia probablemente para evadirte de ciertas situaciones, pensamientos y emociones… desagradables.
El problema puede surgir cuando esos recursos, que antes nos eran útiles, pueden generarnos malestar y dificultarnos nuestro día a día. Por eso es importante llegar a su origen y averiguar la función que desempeñaban en aquel entonces y por qué los sigues utilizando hoy en día y la función que desempeñan.
Es preciso evaluar más detalladamente lo que te ocurre y para ello creo que te vendría bien el apoyo de un profesional. Ánimo porque has dado el primer paso, que suele ser el que más cuesta.

Gracias por explicar con detalle lo que te ocurre. Entiendo que todavía podrías aportar más información al respecto para poder entender de una manera más concreta qué te está pasando. Es posible que para poder profundizar más necesites acudir a terapia en donde poder explayarte todavía más. Puedo observar que hay preocupación en ti por los pensamientos que estás teniendo, y he de decir que son solo eso, pensamientos. Ya sabes que son incómodos pero a su vez son inofensivos. Puede que estés pasando por un momento de cambio o de estrés elevado y tu cerebro esté intentando ayudarte dándote ideas sin parar y eso te esté costando asimilarlo.
Mucho ánimo!
Un abrazo!

Hola, muchas gracias por compartir tu caso. Requiere un gran dosis de valentía abrirte a los demás y contar tu intimidad.
Tu situación, está compuesta, tanto, por muchos factores psicológicos individuales de cada uno de los involucrados, como también por factores de relación y comunicación.
Por ello creo que cualquier respuesta acelerada puede no ser la adecuada.
Te animo a seguir ese impulso que has tenido de compartir tu problema un paso más allá y que lo hagas con un profesional de la psicología que pueda evaluar todos los factores con profundidad y ayudarte a salir de esta situación.
Te deseo lo mejor.

Sueles usar la imaginación para evadirte y escapar de la ansiedad, desde niño. Seguramente de niño fue la mejor opción que encontraste y te ayudó; pero ahora como adulto ya no te funciona.
A pesar de ir en contra de lo que haces, ahora es mejor que aprendas otras estrategias que no tengan que ver con la evitación y afrontes tu ansiedad sin evasiones. Te recomiendo terapia afrontar qué es lo que te está dando ansiedad

Escapar a través de la imaginación puede ser una forma de afrontamiento, pero si sientes que ya no lo controlas y afecta tu bienestar y relaciones, es importante explorarlo. Puede estar relacionado con la ansiedad, la idealización o la necesidad de evadir ciertas emociones. Si te preocupa, puedes trabajarlo en mi consulta para comprenderlo mejor y encontrar maneras de manejarlo.

Gracias por compartir algo tan íntimo. Lo que describes tiene nombre y fondo: puede tratarse de un uso excesivo y disociativo de la imaginación como estrategia de escape emocional, algo que a veces se vincula con lo que en psicología llamamos fantasía maladaptativa. Este fenómeno suele comenzar en la infancia como una vía de consuelo frente al dolor, la soledad o el estrés. Sin embargo, con el tiempo puede volverse una trampa, dificultando el contacto con la realidad y con las relaciones sanas.

Lo que estás sintiendo es completamente válido y merece atención profesional. El problema no es tener imaginación, sino que tu mente ha hecho de la fantasía un refugio obligatorio, y eso indica que probablemente estás atravesando una etapa con mucho malestar interno que necesita expresión, validación y reencuadre.

Este tipo de casos se pueden trabajar muy bien en terapia psicológica. No se trata de “bloquear” tu imaginación, sino de recuperar el control emocional y que tú elijas cuándo y cómo vivir cada experiencia mental. También hay técnicas de grounding, trabajo con creencias, y herramientas para desarrollar vínculos más reales y seguros con los demás y contigo mismo.

Te invito a tener una sesión online conmigo. Será un espacio confidencial y profesional donde puedas hablar con libertad, sin juicios, y donde empezaremos a entender de fondo por qué esto te sucede y cómo abordarlo paso a paso. Estás a tiempo de transformar esto. ¿Te animas a empezar? Un saludo, estoy aquí para acompañarte.

Gracias por compartir algo tan profundo y delicado. Lo que describes —imaginar escenarios vívidos, sentir que se vuelven reales, tener un amigo imaginario en la adolescencia, idealizar a una persona y perder el control sobre tus pensamientos— puede estar relacionado con un fenómeno llamado **ensoñación excesiva** (*maladaptive daydreaming*), que ha sido estudiado recientemente en psicología clínica.

### ¿Qué es la ensoñación excesiva?

La ensoñación excesiva es una forma de fantasía intensa y prolongada que interfiere con la vida cotidiana, se caracteriza por:

- Imaginación vívida y absorbente que puede durar horas.
- Creación de personajes ficticios (como tu amigo imaginario).
- Uso de música o rutinas como disparadores para entrar en ese estado.
- Dificultad para distinguir entre lo imaginado y lo real en momentos de estrés.
- Impacto negativo en la concentración, relaciones y bienestar emocional.

### ¿Es normal tener un amigo imaginario a los 18 años?

- En la infancia es común, pero en la adolescencia o adultez puede indicar una necesidad emocional no cubierta, como soledad, ansiedad o evasión.
- Si el amigo imaginario te acompaña en momentos difíciles, puede ser una forma de autorregulación. Pero si interfiere con tu vida diaria, es importante abordarlo.

### ¿Cómo puedes mejorar tu concentración y bienestar?

- **Técnicas de atención plena (mindfulness)**: Ayudan a entrenar la mente para volver al presente cuando se dispersa.
- **Estudio por bloques cortos**: Usa el método Pomodoro (25 minutos de estudio, 5 de descanso) para evitar que la mente se escape.
- **Ambiente libre de estímulos**: Evita música con letra o elementos que disparen tu imaginación mientras estudias.
- **Escritura reflexiva**: Dedica un momento del día a escribir tus escenarios imaginarios. Esto puede ayudarte a “liberarlos” antes de estudiar.
- **Consulta profesional**: Un psicólogo puede ayudarte a entender si lo que vives es ensoñación excesiva y darte herramientas para gestionarla.
**Si lo deseas, te ofrezco una consulta psicológica online gratuita para que puedas hablar con más detenimiento de lo que te preocupa.**

Lo que describes, esa sensación de que tu imaginación es más real que tu propia vida, es algo muy angustiante. Es completamente comprensible que te sientas ansioso y que esto esté afectando tus relaciones y tus momentos de paz.

Lo que describes no es un problema de imaginación, sino un mecanismo de evasión que tu mente ha desarrollado desde la niñez para lidiar con el malestar o la ansiedad. En la psicología, a este fenómeno se le conoce como ensoñación excesiva o maladaptive daydreaming.

¿Qué es la ensoñación excesiva?
No es un trastorno de conducta en sí mismo, pero sí un síntoma que a menudo está relacionado con otros problemas como la ansiedad, el trauma o la depresión. La ensoñación excesiva se caracteriza por:

Fantasías detalladas y complejas: Tu mente crea mundos y escenarios tan vívidos que son más atractivos que la realidad.

Impulso incontrolable: La necesidad de escapar a estas fantasías es tan fuerte que interfiere con tu vida, impidiéndote concentrarte y estar presente.

Angustia y culpa: El hecho de que te des cuenta de lo que haces y te sientas mal por ello es la prueba de que no es un simple pasatiempo, sino un patrón que te está causando dolor.

La idealización de tu amiga es una manifestación de esto. En lugar de vivir la relación tal como es, tu mente escapa a un escenario idealizado donde todo es perfecto.

¿Qué puedes hacer para recuperar el control?
Reconoce y acepta el problema: El primer paso, y el más valiente, es reconocer que esto te está afectando. No te juzgues. Tu mente creó este mecanismo para ayudarte a sobrellevar algo, pero ya no es funcional.

Busca ayuda profesional: Lo más importante que puedes hacer es hablar con un psicólogo. Un profesional te ayudará a entender por qué tu mente necesita evadirse y te dará herramientas para gestionar la ansiedad que causa. La terapia cognitivo-conductual (TCC) es muy útil para identificar y modificar este patrón. Te enseñará a anclarte en el presente y a manejar la incomodidad de la realidad sin tener que escapar.

Técnicas de Mindfulness: Practicar la atención plena es una forma efectiva de combatir la ensoñación. Cada vez que tu mente se evada, trae tu atención de vuelta a la realidad. Puedes centrarte en tu respiración, en los sonidos que te rodean o en las sensaciones de tu cuerpo. No se trata de eliminar la imaginación, sino de entrenar a tu mente para que tú tengas el control sobre ella, no al revés.

El hecho de que te preocupes por esto y que busques ayuda demuestra tu deseo de estar bien. Mereces vivir tu vida sin el tormento de esos pensamientos, y es absolutamente posible.

Hola,
gracias por compartirlo con tanta sinceridad. Lo que describes no es simplemente “fantasear”, sino utilizar la imaginación como vía de escape emocional desde muy pequeño, hasta el punto de que ahora se vuelve intrusiva, difícil de controlar y afecta a tu calma, tus vínculos y tu identidad. Cuando la mente crea escenarios alternativos para aliviar el dolor, al principio puede sentirse como refugio, pero con el tiempo puede convertirse en algo que genera ansiedad, confusión y culpabilidad.

No estás solo en esto ni es extraño que te preocupe: cuando las imágenes y pensamientos se vuelven tan intensos y realistas que interfieren en la vida real, las emociones se desorganizan y cuesta diferenciar lo que deseas de lo que estás idealizando. También es comprensible que te sientas inquieto al notar cómo esto influye en tus relaciones, especialmente cuando aparece la idealización o la dependencia afectiva hacia una persona.

Lo importante ahora no es juzgarte, sino entender qué función emocional han tenido estas fantasías, qué te han ayudado a evitar, y cómo podemos darte recursos para volver a sentirte presente en tu propia vida sin miedo ni desconexión.

En terapia podemos trabajar:
• regulación de la ansiedad y pensamientos intrusivos
• desconexión entre fantasía y realidad sin culpa
• construcción de identidad propia sin necesidad de “escapar”
• vínculo seguro y límites afectivos sin idealizaciones
• estrategias para volver al presente cuando la mente se va

Es un proceso tratable, y no tienes por qué sostenerlo a solas.
Si quieres, podemos comenzar juntos/as a ordenarlo y devolverte claridad y calma. Puedes pedirme cita desde aquí mismo.

Quedo a tu disposición.

María Trinidad Cruz