Haciendo un resumen de mi situación, tengo ansiedad desde pequeño pero jamás he experimentado esto,

Hola, gracias por compartir tu experiencia conmigo. Lo primero que quiero decirte es que es completamente válido que sientas miedo y confusión; tus síntomas pueden ser muy angustiantes, pero ya has dado un paso muy importante al buscar ayuda.

Por lo que describes, es posible que estés enfrentándote a una fobia de impulsión combinada con un alto grado de sugestión y ansiedad relacionada con la hiperobservación de tus pensamientos. Esto es más común de lo que crees, especialmente en personas que tienden a preocuparse por su salud mental o física. La búsqueda compulsiva de información en internet puede haber alimentado tus temores, algo que en psicología llamamos "cibercondría".

El hecho de que seas plenamente consciente de que esos pensamientos no tienen sentido o no reflejan tu realidad es una señal importante: indica que hay una distancia crítica entre tú y esos pensamientos, algo que no ocurre en condiciones más graves como las que mencionas (por ejemplo, la esquizofrenia). Esto refuerza la idea de que lo que estás experimentando tiene más que ver con ansiedad y obsesiones que con una enfermedad psicótica.

Quiero invitarte a que enfoquemos el trabajo en algunos aspectos clave:

1. Reducir la búsqueda de información en internet sobre enfermedades mentales. Este hábito puede estar reforzando tus miedos y aumentando la sugestión.


2. Técnicas de manejo de pensamientos intrusivos: podemos explorar estrategias como la aceptación sin juicio o el distanciamiento cognitivo para aprender a no reaccionar con miedo ante esos pensamientos.


3. Trabajo terapéutico en la raíz de tu ansiedad: a veces, estos episodios surgen como una respuesta a estrés acumulado o a una sensibilidad emocional no resuelta desde hace tiempo.



Te aseguro que con un enfoque adecuado y herramientas terapéuticas personalizadas es posible reducir significativamente estos síntomas y recuperar tu bienestar. Estoy aquí para acompañarte en este proceso y ayudarte a encontrar calma y claridad.

Si tienes más dudas o necesitas algo en particular, no dudes en decírmelo. Estoy aquí para apoyarte.

Un abrazo,
Indira Alcalá

Buenas tardes
Ante todo, le desaconsejo totalmente hacer busquedas en Google, cuando tenga estos pensamientos intrusivos ya que con ello solo hace que el bucle pensamiento intrusivo, conducta compulsiva, alivio, aumento de la ansiedad, se haga infinito y además, se acelere.
Es probable que esto le esté ocurriendo desde pequeño, posiblemente, en otras formas y es muy probable que no tenga nada que ver con la esquizofrenia ni con la paranoia
Le aconsejo que acuda a un psicologo especialista quien le va a hacer una entrevista extensa, seguida de una evaluación diagnóstica y, a partir de aquí, se puede establecer un diagnóstico correcto a partir del cual poder empezar un tratamiento
Saludos!!

Hola de lo que comentas se desprende que lo estás pasando muy mal. Para poder entender por qué estás tan peleado contigo se requeriría más información. Seria bueno acudir a un terapeuta y así poder entender lo que hay detrás un saludo

Entiendo el malestar que estás experimentando, y quiero que sepas que los pensamientos intrusivos que describes son comunes en casos de ansiedad elevada o trastorno obsesivo. Estos pensamientos no definen quién eres, sino que son el resultado de un ciclo impulsado por la ansiedad y el miedo. La búsqueda compulsiva de información en Google puede parecer útil, pero solo refuerza el problema. Es importante romper ese patrón, trabajar en aceptar los pensamientos sin reaccionar emocionalmente y aprender a restarles poder. Técnicas como la reestructuración cognitiva, el mindfulness y el enfoque en el presente pueden ayudarte a gestionar mejor tu ansiedad. Te recomiendo que sigas trabajando con un terapeuta especializado, ya que este proceso lleva tiempo, pero es posible recuperar el control y reducir significativamente tu angustia.

Hola. Mi recomendación es que dejes de buscar información por tu cuenta en Google, foros, etc... Aunque en ocasiones pueda calmarte, olvídalo. La clave está en la paciencia, confía en el tratamiento profesionales que te están tratando, cíñete a sus recomendaciones y no pierdas la esperanza. Con el tiempo y el enfoque adecuado, es posible aprender a manejar esos pensamientos y reducir significativamente el impacto en tu vida.

Un saludo.

Es completamente comprensible que te sientas preocupado y confundido ante esta situación, especialmente considerando lo angustiante que pueden ser los pensamientos intrusivos y las dudas constantes sobre su origen. Los pensamientos intrusivos, como los que describes, son comunes en trastornos de ansiedad, especialmente en lo que se conoce como fobia de impulsión. Este tipo de fobia se caracteriza por el miedo intenso a perder el control y hacer algo que va en contra de tus valores o deseos, lo cual genera un ciclo de miedo y vigilancia constante.

La búsqueda excesiva de información, aunque inicialmente parece una estrategia para calmar la ansiedad, suele reforzar el ciclo obsesivo. Es importante entender que estos pensamientos no son señales de una enfermedad grave como la esquizofrenia, sino una manifestación de ansiedad y obsesiones. La autoconciencia que mencionas (saber que los pensamientos no tienen sentido o no reflejan tu realidad) es una buena señal y se opone a las características de un trastorno psicótico, donde generalmente no existe esta capacidad crítica.

En nuestra clínica, trabajamos con tratamientos basados en evidencia, como la terapia cognitivo-conductual, que incluyen técnicas como la exposición con prevención de respuesta y la reestructuración cognitiva. Estas herramientas te ayudarán a reducir los pensamientos intrusivos, manejar la ansiedad y romper el ciclo de compulsiones. También te apoyamos para aprender a tolerar la incertidumbre y disminuir la necesidad de buscar información de forma compulsiva.

Si sientes que estas estrategias podrían ayudarte, no dudes en contactarnos. Estamos aquí para ofrecerte el apoyo necesario y acompañarte en este proceso hacia una mejor calidad de vida.

Buenas tardes, las persones vivimos situaciones en las que estamos sometidos a mayor estrés o los niveles de ansiedad se elevan. Cuando la ansiedad es muy elevada, a veces pueden aparecer este tipo de pensamientos que explicas -pensamientos intrusivos y pensamientos obsesivos- que encajan con la fobia de compulsión que te comentan los especialistas que has visitado. Estos pensamientos son más frecuentes de lo que crees, no te asustes. Es normal sentir miedo cuando tenemos niveles altos de ansiedad. A veces pueden estar relacionados con incidencias o traumas pasados, pero otras veces no tiene por qué. Estos pensamientos son automáticos e involuntarios, pero con trabajo psicoterapéutico puedes lograr a controlarlos, evitando así gran parte del sufrimiento que seguramente padeces al tenerlos. Te invito a que visites a un especialista, pero no solo para poner nombre a lo que te pasa, sobretodo para reflexionar de donde puede provenir tu miedo y también aprender herramientas que te ayuden a disipar estos pensamientos.
Si te interesa trabajar éste aspecto, estaré encantada de atenderte online. Un saludo.

Hola, gracias por compartir tu experiencia conmigo. Lo que describes refleja una lucha intensa con pensamientos intrusivos y ansiedad, que claramente te han estado afectando profundamente. Es importante que sepas que no estás solo en esto y que muchas personas experimentan algo similar, especialmente cuando la mente se queda atrapada en ciclos de preocupación e hipervigilancia.

Lo que mencionas sobre los pensamientos intrusivos y el miedo a desarrollar una enfermedad como la esquizofrenia es algo que aparece frecuentemente en personas que tienen ansiedad o fobias de impulsión. Estos pensamientos suelen ser el resultado de una mente sobrecargada y no necesariamente indican la presencia de un trastorno grave. De hecho, el hecho de que seas plenamente consciente de que estos pensamientos no tienen fundamento es un indicador importante de que estás lidiando con ansiedad y no con un trastorno psicótico.

En terapia, podemos trabajar en reducir la ansiedad asociada con estos pensamientos, desactivar el bucle compulsivo de buscar información, y ayudarte a desarrollar herramientas para gestionar mejor tus preocupaciones y miedos. Es un proceso que lleva tiempo, pero con el enfoque adecuado, puedes recuperar la tranquilidad y aprender a manejar estos pensamientos de una manera más saludable.

Si sientes que necesitas apoyo para superar este momento, estaré aquí para acompañarte. Lo más importante es que no tienes que enfrentarlo solo.

Gracias por compartir lo que estás viviendo. Es evidente que esta situación te genera mucho malestar, pero quiero que sepas que no estás solo y que lo que describes tiene explicación desde una perspectiva psicológica. Vamos a analizarlo:

Lo que describes es muy compatible con una fobia de impulsión y ansiedad obsesiva
Fobias de impulsión: Son un tipo de trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) caracterizado por pensamientos intrusivos relacionados con el miedo a perder el control y hacer daño a uno mismo o a otros. La clave aquí es que estos pensamientos generan un profundo rechazo y miedo, porque van completamente en contra de tus valores y deseos.
Sugestión e hipervigilancia: Cuando leíste sobre esquizofrenia, tu mente comenzó a hiperfocalizarse en los síntomas que aprendiste. Es común que, al conocer los signos de una enfermedad, te vuelvas extremadamente sensible a ellos, generando incluso una respuesta obsesiva. Esto no significa que tengas esa enfermedad, sino que tu ansiedad está amplificando tus preocupaciones.
Diferencias clave entre fobia de impulsión y trastornos psicóticos
Un punto tranquilizador es que las características que describes no encajan con un trastorno psicótico como la esquizofrenia. Algunas diferencias clave:

Reconocimiento de los pensamientos: Tú reconoces que los pensamientos no tienen sentido y te generan miedo. En la esquizofrenia, los delirios suelen ser vividos como reales y no cuestionados.
Miedo al daño: En las fobias de impulsión, el miedo a hacer daño es precisamente una señal de que no deseas hacerlo. Este miedo intenso es incompatible con una intención real.
Autocontrol: A pesar del malestar, no has perdido el control ni has actuado en base a estos pensamientos.
Contexto de los síntomas: Los pensamientos y percepciones surgen en el contexto de la ansiedad y la obsesión por los síntomas de la esquizofrenia, no de una desconexión de la realidad.
Por qué estás atrapado en este ciclo
El ciclo se mantiene por tres factores principales:

Evitación y búsqueda de tranquilidad: Leer en Google o foros te calma momentáneamente, pero a largo plazo refuerza el miedo.
Hipervigilancia: Al estar constantemente pendiente de lo que piensas, ves o escuchas, tu mente crea interpretaciones ansiosas.
Culpabilidad e inseguridad: Sentir que “algo grave puede pasar” te lleva a cuestionarte constantemente.
Cómo empezar a romper el ciclo
Evita buscar información compulsivamente
Es un paso difícil, pero fundamental. Consultar Google perpetúa la obsesión y alimenta el miedo. En lugar de eso, enfócate en confiar en los profesionales que ya te han evaluado y en sus conclusiones.

Acepta los pensamientos intrusivos
No luches contra ellos ni intentes sustituirlos. Por ejemplo:

Si aparece un pensamiento intrusivo, di mentalmente: “Es solo un pensamiento, no una realidad”.
Practica dejar pasar el pensamiento como si fuera una nube en el cielo: lo observas, pero no te quedas atrapado en él.
Reestructura tus pensamientos
Cuando sientas miedo de que algo grave ocurra, pregúntate:

¿Qué evidencia tengo de que esto es real?
¿Qué diría un amigo si le contara esto?
Busca un tratamiento especializado
Ya que has consultado con psicólogos y psiquiatras, asegúrate de trabajar con alguien que tenga experiencia en TOC y fobias de impulsión. Técnicas como la terapia cognitivo-conductual (TCC) y la exposición con prevención de respuesta son muy efectivas.

Practica la atención plena (mindfulness)
Te ayudará a reducir la hipervigilancia y a reconectar con el presente en lugar de quedarte atrapado en tus pensamientos. Por ejemplo, dedica unos minutos al día a concentrarte en tu respiración o en las sensaciones corporales sin juzgarlas.

Conclusión
Por lo que describes, todo apunta a que estás lidiando con ansiedad obsesiva y una fobia de impulsión, no con una enfermedad grave como la esquizofrenia. Los pensamientos intrusivos son una manifestación de tu ansiedad, y con el tratamiento adecuado y las herramientas correctas, es posible manejarlos y reducir su impacto en tu vida.

Dale tiempo al proceso terapéutico y recuerda que no estás solo. Pedir ayuda y seguir en este camino demuestra tu valentía y deseo de estar mejor. ¡Vas por buen camino!

Lo que describes parece estar relacionado con un proceso de ansiedad intensa que ha derivado en pensamientos intrusivos y un estado de hipervigilancia hacia tus propias experiencias mentales. Es muy común que, al buscar información sobre enfermedades, la mente comience a "imitar" los síntomas, especialmente si tienes una tendencia a la preocupación o a la sugestión. Esto no significa que tengas algo grave, sino que probablemente tu ansiedad esté alimentando un ciclo de miedo y análisis excesivo.

Los pensamientos intrusivos, aunque perturbadores, no son indicativos de que vayas a actuar sobre ellos ni de que exista una condición grave como la que temes. Lo importante aquí es trabajar en cómo manejas estas ideas, reduciendo el poder que les das y rompiendo el ciclo compulsivo de buscar confirmación o certeza. Este proceso puede ser difícil de abordar solo, pero con ayuda profesional, como terapia cognitivo-conductual, puedes aprender estrategias efectivas para reducir la ansiedad y lidiar con los pensamientos intrusivos.

Si lo necesitas, podemos trabajarlo en consulta para ayudarte a recuperar el control y encontrar tranquilidad en tu día a día.

Nuestra mente puede lanzarnos pensamientos de todo tipo, y a veces estos pensamientos tienen un contenido que nos asusta profundamente. Es importante entender que los pensamientos son como trenes que pasan por una estación: tú estás en esa estación y puedes observarlos. Algunos trenes te resultan incómodos o aterradores, y la reacción más común es intentar evitar esos trenes o subirte a ellos para ver adónde te llevan. Pero cada vez que te subes, esos trenes te arrastran en una dirección que no necesariamente quieres tomar. Sin embargo, igual que puedes subirte, también puedes elegir quedarte en la estación y observar cómo vienen y se van, sin necesidad de actuar sobre ellos.

Parece que, en tu caso, estás luchando contra estos pensamientos, intentando deshacerte de ellos o buscando certidumbre. Esto puede estar tomando la forma de búsquedas en Google, leer foros o analizar cada pensamiento para comprobar si tiene sentido o no. Estas respuestas son una forma de evitar el malestar que los pensamientos te generan, pero esa evitación tiene un coste: parece que te está atrapando en un ciclo de preocupación constante, alimentando aún más esos miedos y manteniéndolos presentes en tu vida.

Una pregunta que podría ayudarte es: ¿hasta dónde te ha llevado esta estrategia de buscar respuestas o evitar los pensamientos? ¿Qué impacto está teniendo en tu día a día? Más allá de intentar luchar contra ellos, la clave puede estar en observarlos como lo que son: pensamientos, no realidades. Aunque a veces su contenido sea aterrador, son solo trenes que pasan, no verdades sobre quién eres o lo que va a ocurrir. Tú eres algo diferente a tus pensamientos.

Esto es algo que puede trabajarse en terapia.

Estimado consultante,

muchas gracias por tu pregunta. Comprendo que la situación en la que te encuentras te haya llevado a consultar información que haya podido generarte mucho malestar y pensamientos intrusivos. En este tipo de casos, es muy importante delimitar las causas y las consecuencias de las conductas y los pensamientos. Cada caso es único y diferente, y sólo analizándolo en detalle e individualmente se puede hacer una terapia a medida para tus necesidades. Si lo necesitas, puedes contactarme via mail para concertar una primera valoración gratuita y estudiar más en detalle tu caso.

Un cordial saludo,

José González Martínez

Gracias por compartir tu experiencia con tanta claridad. Lo que describes encaja más con un cuadro de ansiedad obsesiva o fobia de impulsión que con una enfermedad psicótica como la esquizofrenia, pero se concreta en una sesión en terapia.

Lo más importante es que tú eres consciente de lo ilógico o aterrador de esos pensamientos, lo cual ya diferencia tu experiencia de un trastorno psicótico, donde normalmente no hay conciencia de enfermedad. Además, el hecho de que estos pensamientos aparecieron justo después de investigar síntomas en internet, y que sientas alivio al reconocerlos como parte de lo que leíste, refuerza la idea de una ansiedad basada en sugestión y miedo más que en una patología grave.
¿Qué te recomiendo?
Evita el “doctor Google” ya que buscar compulsivamente solo alimenta la ansiedad.
Entrenamiento en mindfulness o aceptación: ayuda a convivir con los pensamientos sin darles poder.
Psicofármacos si lo indica el psiquiatra, a veces pueden ayudar a reducir el nivel general de ansiedad. Yo no soy psiquiatra pero puede venirte bien tener la opinión de un profesional.
No estás solo. Muchos atraviesan este tipo de ansiedad sin saber que tiene nombre y tratamiento. Estás haciendo un buen camino al buscar ayuda y cuestionar lo que sientes. Sigue adelante con apoyo profesional, porque sí tiene solución. Espero haberte ayudado :) un saludo.

Lamento tu situación. Todo problema tiene solución y hay formas de manejar el malestar emocional. Pedir ayuda es valiente y mereces sentirte mejor. Busca apoyo en personas de confianza o profesionales; no estás solo. Aquí tienes información útil.
La ansiedad es una respuesta natural del cuerpo ante situaciones que percibimos como amenazantes o estresantes. Es común sentir ansiedad en momentos importantes, pero cuando este sentimiento se vuelve intenso, persistente o interfiere con la vida diaria, puede considerarse un trastorno de ansiedad. Los síntomas pueden incluir preocupación excesiva, dificultad para concentrarse, alteraciones del sueño, palpitaciones, sudoración o sensación de agobio.
Para tratar la ansiedad existen varios enfoques. Entre ellos, la terapia psicológica —especialmente la terapia cognitivo-conductual— es una de las más efectivas, ya que ayuda a identificar y modificar patrones de pensamiento negativos. En algunos casos, las y los profesionales de la salud pueden recomendar medicamentos para regular los síntomas. Además, adoptar hábitos de vida saludables, como hacer ejercicio regularmente, mantener una alimentación equilibrada, practicar técnicas de relajación y establecer rutinas de sueño, puede contribuir significativamente al bienestar emocional. Recuerda que cada persona es diferente y el tratamiento más adecuado depende de la situación individual; por ello, es importante acudir con especialistas para recibir orientación personalizada.
Podemos analizar juntos tus síntomas de ansiedad y su origen para tratarlos adecuadamente. Te ofrezco una consulta psicológica online gratuita.

Comprendo perfectamente la angustia que sientes. Es una situación muy dolorosa y confusa. Lo que describes es una lucha agotadora que te ha llevado a un estado de hipervigilancia constante, y es totalmente válido que te sientas asustado.

Los psiquiatras y psicólogos que has visitado están en lo cierto. Lo que te sucede encaja perfectamente en el perfil de una fobia de impulsión o, más ampliamente, en el de un Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC).

Entendiendo la fobia de impulsión
Una fobia de impulsión no es un deseo real de hacer daño. Es un miedo irracional y obsesivo a perder el control y actuar de forma violenta. Las personas que la padecen, como tú, son personas que valoran mucho el control y la moralidad, por eso el simple pensamiento les resulta tan aterrador.

Lo que te ocurrió al leer sobre la esquizofrenia es un fenómeno muy común: la sugestión. Tu mente, ya predispuesta a la ansiedad, encontró en esos síntomas un nuevo "problema" para obsesionarse.

Obsesión (pensamiento intrusivo): Los pensamientos de hacerte daño o de dañar a otros.

Compulsión (respuesta mental): La búsqueda de información en Google, los foros y vídeos para "verificar" si tienes esquizofrenia. Esta búsqueda no te calma; te da un alivio temporal que refuerza el ciclo de la obsesión.

La diferencia entre síntomas reales y la imitación de la ansiedad
Aquí está la clave de lo que te está pasando. Un paciente con esquizofrenia generalmente no es consciente de que sus delirios o alucinaciones son irreales. Para él, son la realidad.

Tú, en cambio, eres plenamente consciente de que esos pensamientos no tienen sentido y que no son ciertos. Tu mente está imitando lo que leíste y crea escenarios basados en esa información.

Los "delirios" que describes: No son delirios reales. Son pensamientos intrusivos. El hecho de que te calmes al recordar que los leíste demuestra que son producto de tu obsesión, no de una desconexión con la realidad.

El miedo cuando "no lo recuerdas": Cuando un pensamiento de paranoia te llega y no recuerdas haberlo leído, te asustas. Eso es porque el TOC ha encontrado una nueva forma de asustarte, una más convincente para tu cerebro. No significa que sea real; significa que el trastorno ha evolucionado para mantenerte en ese estado de ansiedad.

Tu miedo no es un síntoma de un trastorno grave. Es la manifestación de tu ansiedad, que ha encontrado en la información sobre la esquizofrenia un nuevo blanco para sus obsesiones.

El camino a seguir es la terapia. La Terapia Cognitivo-Conductual (TCC) es muy efectiva para la fobia de impulsión. Un especialista te enseñará a no luchar contra los pensamientos, a aceptarlos y a entender que son solo eso: pensamientos que no tienen poder real sobre ti.

Hola, gracias por compartir tu pregunta.
Experimentar miedo hacia los propios pensamientos es algo más común de lo que la mayoría de las personas cree.

Es importante normalizarlo: nuestra mente sabe qué es lo que más miedo nos da y, en ocasiones, puede enviarnos pensamientos que incluso nos hagan dudar de nosotros mismos, especialmente si esos pensamientos despiertan sensaciones intensas de miedo o ansiedad.

Debemos entender que este tipo de pensamientos, aunque resulten muy desagradables, forman parte del funcionamiento normal del cerebro. Al normalizarlos, podemos reducir la reactividad que provocan y, con ello, disminuir su impacto cuando inevitablemente aparezcan.

El problema surge cuando estos pensamientos (o las consecuencias que generan) afectan alguna área de nuestra vida o nuestro bienestar. Esto puede deberse tanto a la intensidad del pensamiento como al desarrollo de conductas o compulsiones destinadas a calmar la ansiedad que provocan.

Si sientes que este puede ser tu caso, es recomendable trabajarlo con un especialista. Los psicólogos podemos ayudarte a comprender cómo funcionan estos pensamientos y a gestionarlos para que no generen tanto malestar.

En resumen pensar cosas desagradables y que nos produzcan miedo es normal, no es que te estés volviendo loco. Pero sería conveniente trabajar cómo te relacionas con tus pensamientos para que estos no produzcan esa reactividad emocional.

Espero que mi respuesta te aporte un poco de calma. Un saludo.