Desde hace unos meses tengo pensamientos intrusivos egodistónicos en lo que parece que puede ser un

Entiendo que estás pasando por un momento muy complejo y angustiante, especialmente por la naturaleza de estos pensamientos y su relación con experiencias pasadas. Los pensamientos intrusivos egodistónicos (aquellos que chocan con tus valores o identidad actual) son muy comunes en trastornos obsesivos, incluidos los casos de TOC puro o mental.
La clave del tratamiento del TOC reside, como has señalado, en entender que los pensamientos intrusivos no te definen ni reflejan quién eres ahora. Lo importante no es lo que pensamos, sino cómo reaccionamos ante esos pensamientos. Aunque en el pasado ciertas ideas o comportamientos pudieron tener un significado distinto, lo que importa ahora es la relación actual que tienes con esos pensamientos, cómo te generan ansiedad y cómo los percibes como no deseados.
Respecto a tu pregunta sobre la evolución de las parafilias hacia un trastorno obsesivo puro, es posible que existan experiencias clínicas donde una persona atraviesa una transformación en su relación con ciertos pensamientos o impulsos, especialmente si ha habido cambios en valores, identidad personal o contextos de vida. Estos procesos pueden generar culpa, vergüenza y, a veces, obsesiones persistentes, propias del TOC.
Lo más importante es no quedarte solo con estas dudas. Te recomiendo buscar apoyo de un psicólogo especializado en TOC y en terapias cognitivo-conductuales. Un profesional podrá ayudarte a trabajar en la aceptación, en reducir la ansiedad asociada a estos pensamientos y a desarrollar una relación más sana y neutra con ellos.

De manera general en salud mental no hay nada que sea necesariamente causa - consecuencia, por esto, el TOC no tiene que vincularse necesariamente a situaciones concretas. En la etiología del TOC se encuentran causas de base biológica, causas ambientales y la vulnerabilidad psicológica de la persona, que en mayor o menor medida se identifican en los afectados.
Las obsesiones en el TOC plantean contenidos relacionados con lo que es importante para la persona afectada o su código moral, de esta manera, la evaluación que se hace de esos pensamientos intrusos obsesivos y que es inmediata a la presencia de las obsesiones, es la que genera tanto malestar (ansiedad, tristeza, culpa, enfado…). Si no son importantes para la persona, significativos y contrarios a la moralidad de la persona, no generan malestar. Por esto, lo que cuentas acerca que tu rechazo a la intrusión de esos pensamientos genera tanto malestar, porque son contrarios a tu código moral, son indeseados, como bien dices, son egodistónicos. Esto no compromete el tratamiento, ya que es parte fundamental del mismo.
Espero haberte sido de ayuda.
Un saludo

Primero, quiero felicitarte por tu valentía al compartir esta situación. Los pensamientos intrusivos egodistónicos pueden ser increíblemente perturbadores, pero entenderlos es el primer paso para manejarlos. Lo importante aquí es separar los pensamientos de tu identidad: los pensamientos no te definen, ni ahora ni antes.

El hecho de que esos pensamientos puedan haber sido deseados o realizados en el pasado no invalida el proceso de tratamiento actual. Nuestro cerebro evoluciona, y nuestras preferencias y valores también cambian con el tiempo. Lo que una vez fue deseado puede ya no serlo, y esto no tiene por qué comprometer tu capacidad para trabajar en los pensamientos intrusivos actuales.

El enfoque terapéutico para estos casos, como los relacionados con el TOC puro, a menudo se centra en aceptar los pensamientos sin juzgarlos ni intentar suprimirlos. La aceptación no implica estar de acuerdo con los pensamientos, sino aprender a observarlos sin reaccionar emocionalmente a ellos. Esto se trabaja en conjunto con técnicas de reestructuración cognitiva y exposición con prevención de respuesta.

Si existe una conexión con experiencias pasadas como las parafilias, puede ser útil explorar con un terapeuta especializado cómo estas experiencias se relacionan con tus emociones y creencias actuales, sin que ello implique juzgarte ni generar culpa. Lo esencial es trabajar en tu relación con los pensamientos y cómo manejas el malestar que te generan en el presente.

Recuerda, no estás solo en esto, y hay soluciones. Con el apoyo adecuado, puedes avanzar hacia una vida más tranquila y equilibrada. Tu disposición a abordar el tema ya es un gran paso hacia tu bienestar.

Buenos días
No se si lo he entendido bien pero voy a intentar responderte lo mejor posible. Si esas filias que comenta están fuera de los valores de la persona pueden generar mucho malestar hasta el punto de producir compulsiones, es decir evitación de cosas o pensamientos, pero los pensamientos cuanto más te esfuerzas en evitarlos más malestar generan. Exactamente eso no eres tú, pero el pensarlo te preocupa. Ej. pensar cuando llega el metro que que pasaría si te tiras (obviamente no lo vas a hacer, pero este pensamiento te puede generar tanto malestar que pienses que eres una suicida).
Saludos

Hola. La premisa de que "esos pensamientos no son uno mismo" es fundamental en el tratamiento de los trastornos obsesivos. Sin embargo, entiendo que puede ser complicado aceptar esta idea cuando esos pensamientos antes eran deseados y, en cierto modo, formaban parte de tu identidad en el pasado.

En cuanto a tu pregunta sobre la relación entre parafilias y trastornos obsesivos, hay casos documentados en los que las personas experimentan cambios en sus deseos y pensamientos a lo largo del tiempo. A veces, lo que antes era una fuente de placer puede convertirse en una fuente de angustia, y esto puede estar relacionado con diversos factores, como cambios en la vida, experiencias traumáticas o el desarrollo de nuevas perspectivas sobre uno mismo y la sexualidad.

Ten en cuenta que la aceptación de tus pensamientos, sin juzgarlos ni identificarlos como parte de tu ser, es un proceso que lleva tiempo. La autocompasión y la paciencia contigo mismo son clave en este camino. Si no lo has hecho ya, te animo a que busques el apoyo de un terapeuta que tenga experiencia en estos temas, ya que puede ofrecerte un espacio seguro para explorar tus preocupaciones y trabajar hacia una mayor comprensión y bienestar.

La relación entre parafinas y desarrollo de TOC es estrecha, y bastante común. Digámoslos que es un desarrollo de la problemática inicial, ya que esa tensión no se resolvió y quedó encapsulada. Se trata de partes no aceptadas, que están exiliadas de la conciencia y buscan entrar constantemente. Para ello, sería conveniente una terapia centrada en el apego y el trauma, y un trabajo profundo con tu sistema familiar interno. Espero haber podido ayudar.

Entender que lo que planteas puede generar mucha incertidumbre y malestar, especialmente cuando se trata de pensamientos intrusivos egodistónicos que se sienten tan contrarios a tus valores o cómo te percibes ahora. Respecto a tu duda, la relación entre los pensamientos intrusivos actuales y experiencias pasadas puede ser compleja, pero es importante tener en cuenta la naturaleza de los pensamientos intrusivos: por definición, los pensamientos intrusivos egodistónicos son aquellos que aparecen sin invitación y que chocan con los valores y deseos actuales de la persona. En el caso del trastorno obsesivo puro (también conocido como TOC puro), estos pensamientos no significan que la persona quiera actuar según ellos, sino que suelen ser interpretados de manera catastrófica, lo que genera un ciclo de ansiedad y búsqueda de alivio.

Es fundamental entender que los pensamientos intrusivos no definen quién eres, ni ahora ni en el pasado. La mente tiene la capacidad de generar todo tipo de ideas, imágenes o recuerdos, y el hecho de que un pensamiento aparezca no significa que tenga relevancia sobre tus valores o deseos actuales. Cómo percibes y das significado a esas experiencias pasadas. Muchas veces, lo que genera malestar no es tanto el recuerdo en sí, sino cómo te juzgas o evalúas ahora desde tu perspectiva actual. Este proceso de juicio interno es común en el TOC puro, y trabajarlo desde un enfoque de aceptación puede marcar una gran diferencia.

Además, es importante destacar que en casos como el tuyo, el contexto emocional y los cambios personales a lo largo del tiempo tienen un papel crucial. A menudo, experiencias o comportamientos del pasado que no generaban conflicto pueden adquirir un nuevo significado en el presente debido a cambios en los valores, la percepción de uno mismo o el propio desarrollo personal. Este fenómeno es completamente normal y puede trabajarse de manera efectiva en terapia.

En mi experiencia, los casos en los que existe una historia previa de conductas o pensamientos alineados con experiencias pasadas (como parafilias) requieren un enfoque integral que aborde tanto el presente como el pasado sin caer en juicios. Reconocer lo que ocurrió y la relación que tienes ahora con esas experiencias. Esto no se hace desde la culpa ni el reproche, sino con una mirada curiosa y compasiva para comprender cómo encajan estas piezas en tu historia.

Es completamente posible que una parafilia que en algún momento fue deseada o realizada se convierta, con el tiempo, en una fuente de pensamientos intrusivos egodistónicos en el contexto de un trastorno obsesivo-compulsivo (TOC). Este tipo de evolución no compromete el tratamiento ni la aceptación de la premisa central de que estos pensamientos intrusivos no definen quién eres en el presente.

El TOC puede "capturar" cualquier tema que genere ansiedad o conflicto interno, incluyendo aspectos que alguna vez fueron congruentes con tus deseos. La clave del tratamiento sigue siendo el mismo enfoque basado en la aceptación de los pensamientos como eventos mentales sin implicar acción o juicio sobre ti mismo. La terapia cognitivo-conductual, especialmente con exposición y prevención de respuesta (EPR), puede ayudarte a reducir el impacto de estos pensamientos.

La historia previa con la parafilia no invalida el tratamiento, pero puede requerir un enfoque más cuidadoso para trabajar con las emociones y significados asociados. Es importante discutirlo abiertamente con un terapeuta especializado en TOC, que también pueda ofrecerte un espacio seguro para explorar estos temas.

Buenos días! Exactamente como comentas, una de las premisas fundamentales del tratamiento del TOC es separar el pensamiento de la persona. Estos pensamientos intrusivos egodistónicos, como bien los has llamado, consisten en tener ideas automáticas que se separan mucho de nuestros valores actuales, de cómo queremos ser y actuar. Por eso, si pensamos en hacer algo que es muy diferente de nuestros valores e interpretamos que eso significa inmediatamente que lo queremos hacer, nos sentiremos culpables y preocupados.
Es normal que si durante mucho tiempo hemos estado realizando una conducta determinada, como es tu caso, de vez en cuando puedan aparecer pensamientos relacionados con ella, y no quiere decir que queramos llevarla a cabo de nuevo o que vayamos a hacerlo. Si para ti este cambio que has hecho vitalmente no fuera importante, no te preocuparías en absoluto. Pero como tu forma de ser y tus valores han cambiado, y es importante para ti, tiene sentido que de pronto te preocupe volver a "ser" así. Esto puede llevarte a hipervigilar lo que piensas y sientes, si no lo separas de quién eres como persona.
Es importante recordar que es muy distinto pensar en hacer algo, tener ganas de hacerlo, y llegar a hacerlo. Ninguna de esas tres cosas tiene que implicar necesariamente a las otras dos.
Hacer esto solo puede ser complicado, así que si ves que te desborda, es totalmente legítimo que busques ayuda profesional y te invito a ello.
Espero que te haya servido mi comentario :)

Efectivamente, la base del tratamiento suele ser "separarse de esos pensamientos como si no fueran uno mismo". También tiene sentido que esos pensamientos tengan que ver con experiencias pasadas, ya que se habrían condicionado o "automatizado". Además, al ser de una temática de parafilia, también es lógico que cueste más "separarse" de esos pensamientos, sin embargo, el trabajo generalmente sigue siendo el mismo y puede adaptarse a estas circunstancias sin mayor problema. Mucho ánimo con toda tu situación!

Para que desaparezcan habría que introducir alguna actividad. Te propongo que cuando aparezca el pensamiento intrusivo lo alargues un poco, trata de estirarlo todo lo que puedas. No tienes por qué provocártelo, pero si aparece alárgalo. Observa los cambios.

Buenas tardes. Puede suceder que ocurra como te está pasando, que años después salte a tu mente actuaciones del pasado que en su momento los veías como correctas, pero no así en la actualidad. Sin embargo, en el presente, si no te parecen adecuados pero vienen a tu mente esos recuerdos-pensamientos puede provocarte una disonancia interna que te provoque malestar. Habría que tratarlo como un TOC de pensamiento.