Porque sobre pienso mucho? Y se me quita el apetito

14 respuestas
Porque sobre pienso mucho? Y se me quita el apetito
 Nuria Hidalgo Muro
Psicólogo
Cornellà de Llobregat
Hola! La ansiedad es una sensación muy desagradable, aún que útil y puede manifestarse de muchas maneras. Como comentas, una de ellas puede afectar al sistema digestivo, apodado por muchos estudios recientes como "el segundo cerebro". Sobre-pensar mucho puede suponer que la manera de enfrentarse a las situaciones que te generan estrés no te resulta útil y agrava el malestar. Si esta suponiendo un problema para enfrentar tu día a día, sí, te recomiendo buscar ayuda profesional. ¡Mucho ánimo!
 Elena Carretero
Psicólogo
Rivas-Vaciamadrid
Seguramente los pensamietnos que tengan, sean negativos e intrusivos (es decir, no los puede controlar), esto puede afectar a su estado de ánimo de forma negativa y por tanto como consecuencia, cerrarle el apetito.
A veces al tristeza o el estrés nos generará hambre y en otros casos nos cierra el estómago, según el significado que le hayamos dado a la comida durante nuestras experiencias entre otras cosas.
No dude en preguntarme lo que necesite, un abrazo.
 Laura Ramírez
Psicólogo, Psicólogo infantil
Alcalá de Henares
Hola! Puede haber mucho motivos por los que una persona sobre piense y entre en un estado de ansiedad que le quite el apetito. Sería conveniente indagar un poco en tu infancia, qué paso para que "sobre pensar" fuera adaptativo?? Qué pasaba cuando te dejabas llevar por tu curiosidad e inocencia infantil?? Cuál era la respuesta de tu entorno??
Es completamente comprensible que te sientas agotado por el sobrepensar y que esto incluso afecte tu apetito. Sobrepensar suele aparecer como un intento de tu mente por resolver algo que considera importante, como si estuviera tratando de protegerte o anticipar posibles problemas. Tiene una función: ayudarte a sentirte más seguro o preparado, pero a veces ese esfuerzo termina siendo contraproducente y consume demasiada energía emocional y física.

Te invito a reflexionar: ¿hacia dónde te lleva este sobrepensar? ¿Está centrado en algo que realmente valoras, o quizás está funcionando como una manera de evitar sentir emociones o sensaciones incómodas? Por ejemplo, puede ser que tu mente esté tan ocupada en pensar porque hay algo que resulta difícil de enfrentar, como la incertidumbre, el miedo o la tristeza.

Cuando esto sucede, no es raro que el cuerpo también lo exprese, como ocurre con la pérdida del apetito. Es su manera de decir que está bajo presión. ¿Qué pasaría si, en lugar de intentar controlar estos pensamientos, te permitieras observarlos, notando cómo afectan tu vida y si te acercan o alejan de lo que realmente te importa?

El cambio es posible y comienza con pequeños pasos. Reconocer lo que sientes y explorar nuevas formas de relacionarte con tus pensamientos puede ser un buen punto de partida para recuperar tu bienestar.
Buenos días. Habría que indagar para ver la causa y poder hacer el tratamiento adecuado a tu sintomatología. Es muy común en trastornos de ansiedad.
 Magaly Donaire Sánchez
Psicólogo, Psicólogo infantil
Cáceres
El sobrepensar o rumiar es un patrón común en las personas con ansiedad. Sucede cuando te quedas atrapada en pensamientos repetitivos, a menudo sobre lo que podría salir mal, lo que te genera más estrés y preocupaciones. Esto se debe a cómo funciona la ansiedad: tu mente se activa con pensamientos que anticipan amenazas o situaciones difíciles, y, al no encontrar una resolución clara, sigues pensando sin poder parar.

El apetito también puede verse afectado por la ansiedad. El estrés y la ansiedad activan el sistema nervioso simpático (la respuesta de "lucha o huida"), lo que puede alterar varios procesos del cuerpo, incluyendo la digestión y el apetito. En algunas personas, la ansiedad reduce el deseo de comer, ya que el cuerpo está más centrado en las "amenazas" percibidas que en las necesidades básicas. También, los niveles elevados de cortisol (la hormona del estrés) pueden interferir con el apetito.

Ambos, el sobrepensar y la falta de apetito, son respuestas naturales del cuerpo al estrés y la ansiedad. La buena noticia es que, con el tiempo y con las estrategias adecuadas, puedes aprender a reducir estos patrones y recuperar el equilibrio tanto mental como físico. El psicólogo puede trabajar contigo en técnicas para interrumpir los ciclos de sobrepensar y también ayudarte a manejar los efectos de la ansiedad en tu cuerpo, como el apetito.
Sobrepensar pasa porque tu mente intenta resolver problemas o evitar errores, pero se queda atrapada en un bucle. Esto genera ansiedad, y tu cuerpo lo siente: al activarse el "modo alerta", tu apetito disminuye porque tu sistema prioriza estar en tensión en vez de relajarse.

¿Qué puedes hacer?

Respira y relaja tu cuerpo con técnicas de respiración.
Ponle un límite al análisis: dedica solo 10-15 minutos al día para pensar en eso y luego cambia de actividad.
Haz ejercicio para liberar tensión.
Si no tienes hambre, come algo suave y ligero como fruta o yogur.
Desde mi punto de mi experiencia terapéutica; se podría interpretar tu tendencia a sobrepensar y la pérdida de apetito como manifestaciones de conflictos emocionales inconscientes que buscan expresarse de manera simbólica en tu mente, cuerpo y ser energía.

La ansiedad, desde esta perspectiva, puede surgir de tensiones internas entre deseos, emociones o impulsos latentes y las exigencias de tu entorno o tus propias normas internas. El "sobrepensar" podría ser un intento de tu mente consciente por ganar control sobre aquello que en el plano inconsciente genera incertidumbre o miedo. Es decir, tu pensamiento excesivo puede ser una defensa contra emociones o conflictos profundos que te resultan difíciles de enfrentar directamente, como inseguridades, temores a la pérdida o deseos no reconocidos.

También, la pérdida de apetito podría interpretarse como una forma en que tu cuerpo refleja un estado de conflicto interno. A veces, el acto de comer puede representar la conexión con el placer, la satisfacción o incluso el cuidado de uno mismo, y en momentos de ansiedad, podrías inconscientemente inhibir estos impulsos como una manera de “controlar” el caos interno. En ciertos casos, también podría estar relacionado con sentimientos de rechazo hacia algo o alguien, o incluso hacia ti mismo, que no has podido procesar emocionalmente.

Si exploramos estas experiencias en un contexto terapéutico psicodinámico puede ayudarte a identificar los significados subyacentes de tu ansiedad, reconectar con las emociones detrás del "sobrepensar" y comprender por qué se manifiestan en el cuerpo, como en la pérdida de apetito.
Recuerda podemos entender tu mente como un lago profundo. En la superficie, las olas del pensamiento se agitan, intentando mantener todo bajo control, mientras que en el fondo, corrientes ocultas —emociones, deseos y conflictos— buscan salir a la luz. La pérdida de apetito es como si el lago intentara vaciarse para calmar las olas, pero en realidad, lo que necesitas no es vaciarlo, sino bucear con cuidado en sus aguas, descubrir esas corrientes y permitir que fluyan en armonía. Solo al explorar lo que está en el fondo podrás traer calma a la superficie. Estaremos con gusto dispuestos a acompañarte a bucear en la profundidades del algo - un saludo
 Aarón Valeriano Salazar
Psicólogo
San Cristóbal de la Laguna
¡Buenas tardes! El sobre-pensar puede darse por una serie de factores que habría que ir descubriendo poco a poco en terapia psicológica. Con las herramientas adecuadas es posible que esos pensamientos puedan disminuir e incluso desaparecer. Muchas veces el exceso de pensamientos y la salud mental, en general, se puede transferir hacia sintomatología física, lo que llamamos somatización en psicología y, en este caso, sería la falta de apetito. ¡Un abrazo!
La rumia es reforzante en sí misma; un pensamiento sigue al otro y así como el pez que se muerdela cola. Esto puede ser bastante cansado, puede producir emociones como la angustia o sensaciones, en este caso la pérdida de apetito.
Hola! Entiendo que pueda ser algo que te preocupe...
La función del cerebro es pensar, y es algo que no deja de hacer nunca, ni cuando dormimos!
La cosa es que no todo lo que el cerebro piensa es real o racional y podemos quedarnos enganchados a los pensamientos con carga emocional. Lo importante es aprender a gestionar esos pensamientos, entrenar la atención para ser capaces de dejarlos pasar y no quedarnos enganchados.
Sobrepensar es un mecanismo que muchas veces surge como una forma de intentar tener el control sobre una situación, pero en realidad, termina generando más ansiedad e incertidumbre. Cuando la mente está constantemente analizando, anticipando o preocupándose por distintos escenarios, el cuerpo también lo resiente. La ansiedad derivada del sobrepensamiento puede afectar funciones básicas como el apetito, ya que activa el sistema nervioso y puede generar síntomas físicos como nudo en el estómago, falta de hambre o incluso malestar digestivo.

Aprender a gestionar estos pensamientos y regular la ansiedad es clave para recuperar el equilibrio emocional y físico. Si sientes que el sobrepensamiento está afectando tu bienestar diario, puedo ayudarte a trabajarlo con estrategias efectivas. Visita mi perfil y reserva una cita para empezar a mejorar tu relación con tus pensamientos.
Soy Paula y voy a intentar de explicartelo lo mejor posible!
El sobrepensar o rumiar (o darle muchas vueltas a las cosas) es algo más común de lo que crees. Sucede cuando tu mente se queda atrapada en un bucle de pensamientos, preocupaciones o "¿y si...?". Puede pasar por estrés, ansiedad o porque intentas tener todo bajo control. Es como si tu cerebro quisiera encontrar respuestas, protegerte de un peligro o evitar que algo salga mal, pero en lugar de ayudar, acaba agotándote.
Cuando tu mente está tan ocupada, tu cuerpo también reacciona. La falta de apetito es una respuesta natural al estrés. Tu organismo tiene activado su modo de alerta (el famoso "lucha o huida"), y la digestión ha pasado a un segundo plano. Es como si tu cuerpo estuviera demasiado enfocado en lo que te preocupa para sentir hambre.

En terapia podemos analizar juntos tu situación y puedo darte herramientas para gestionar esas emociones y pensamientos, recuperar tu apetito y tu bienestar!
Soy Marta, encantada!
Gracias por compartir tu preocupación, siento oir que no te sientes bien.
El sobrepensar suele ser una respuesta al estrés o a la ansiedad, donde tu mente se queda atrapada en pensamientos que no te dejan descansar. La falta de apetito puede estar relacionada con esa tensión, ya que el cuerpo reacciona al estrés de diferentes maneras.
En terapia te ayudaría a trabajar en técnicas de relajación, manejo de pensamientos y estrategias para reconectar con tu cuerpo y tus necesidades emocionales. Un abrazo!

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